Presidente Morales festeja sus 51 años en Teherán, junto a su homólogo de Irán

El presidente boliviano Evo Morales festejó su onomástico 51 en Teherán, en la sede del gobierno de la república islámica de Irán y en un conmovedor discurso de agradecimiento a su homólogo iraní, Mahmoud Ahmadinejad, narró el drama vivido por sus padres, indígenas indocumentados, que se murieron sin festejar un cumpleaños ni conocer la fecha de su nacimiento. En un reconocimiento a Ahmadinejad, Morales se deshizo en elogios para las autoridades iraníes.image

El presidente de Bolivia Evo Morales, recibe un abrazo de su homólogo iraní, Mahmoud Ahmadinejad hoy martes 26 de octubre – Efe Agencia



"Para cualquier ser humano el cumpleaños es un día sagrado y, por eso, gracias a mi pueblo y gracias a Irán y su pueblo", afirmó el gobernante boliviano que cumple una visita de Estado de tres días a Irán, donde ha firmado acuerdos bilaterales de complementación en diversos rubros.

Un emocionado Morales narró, ante un auditorio en las orillas de la perplejidad, que "nunca pudimos festejar el cumpleaños de mi madre (María Ayma) porque no sabía cuándo había nacido".

La mujer, que fue a nacer en los Andes de Bolivia a mediados de la década de los años 30, en momentos en que en el país regía un secante régimen hacendal y esclavista, se casó con Dionisio Morales y ambos fundaron un humilde hogar en las orillas del Lago Popoo (oeste), luego que la masa indígena fue manumitida y dotada de derechos civiles recién en 1952 en virtud de una revolución popular.

"Han supuesto la fecha de nacimiento de mi padre (para festejarlo). Cuando era niño encontré su documento de identificación de mi padre y le propuse a mi hermana mayor festejar el cumpleaños de mi padre.Y cuando mi hermana (Esther) y yo dijimos a mi padre ‘te vamos a festejar tus cumpleaños’, mi padre decía ‘yo no sé cuándo he nacido", describió Morales el drama que vivieron miles de indígenas bolivianos durante la mayor parte del siglo XX.

El mandatario boliviano, nacido en los remotos caseríos de Isallavi (o Isayavi), que celebró su quinto aniversario natal a la cabeza del gobierno boliviano, contó que recién, cuando cumplió 20 años, en octubre de 1980, festejó por primera vez su onomástico, en tanto ya dirigente de los cultivadores de coca de la región central del Chapare, base de su poder político.

Nueve años tuvieron que pasar para vuelva a hacerlo en 1989, cuando en Francia organizaciones de campesinos le sorprendieron al cantarle a capela por su natalicio.

"El año 1989 fue mi primer viaje a Europa, al exterior, a Francia  y en una federación, sorpresivamente, se habían informado que era mi cumpleaños", apostilló.

En esa oportunidad por primera vez se comió un pastel y fue festejado con la parafernalia propia de tales celebraciones.

"Habían prendido muchas velitas, me dijeron que soplara las velas, y soplaba y soplaba y nunca se terminaban las velas, yo nervioso, sudando, (traspirando) y nunca  se apagaban, y se reían de mí", agregó.

En un reconocimiento a Ahmadinejad, que galvanizó el festejo, Morales, que se encuentra desde el lunes en este país, se deshizo en elogios para las autoridades iraníes.

"Nunca olvidaré esta noche, siento que tengo hermanos en todo el mundo, especialmente en Irán. Este encuentro obedece a dos pueblos que luchan por su liberación. Desde la colonia y durante la república siempre han resistido, han enfrentado a los distintos imperios", proclamó.

Morales saludó sus afinidades políticas e ideológicas con las de Ahmadinejad y volvió a plantarse contra el imperialismo.

"Una gran resistencia de los pueblos frente a esas políticas de exterminio, los más vilipendiados, los amenazados con el exterminio ahora somos gobierno" tanto en La Paz como en Teherán, significó. TEHERÁN | ABI. (lostiempos.com)