Se derrumbó el edificio “Málaga” en el centro cruceño

Derrumbe_edificio El edificio “Málaga”, que se encontraba en construcción en la intersección de las calles Manuel Ignacio Salvatierra y Gabriel René Moreno, se derrumbó esta noche. La edificación de 10 pisos se vino abajo, dejando atrapados entre los escombros a 16 obreros de los que aún se desconoce su estado. Los bomberos trabajan en las tareas de rescate.

Edificio cae y sepulta a 17 personas

El centro de Santa Cruz tembló anoche tras el desplome del edificio Málaga, de nueve pisos. Un grupo de trabajadores inspeccionaba la obra cuando ocurrió la desgracia

El centro de Santa Cruz de la Sierra vive desde anoche horas de angustia por la caída del edificio en construcción Málaga. La mole de cemento se derrumbó, cerca de las 22:00, y quedó atrapado entre sus escombros un grupo de trabajadores que realizaba  una inspección cuando supuestamente detectaron problemas en la estructuras, según informes extraoficiales.



Una versión oficial y preliminar de las autoridades, que se difundió pasada la medianoche, dio cuenta del rescate con vida de nueve personas y de otras ocho en situación de desaparecidas. Brigadas de la Gobernación, la Alcaldía, Bomberos, la Policía y de la Fundación SAR continuaban, hasta el cierre de esta edición (3:00), en las labores de búsqueda, en medio de la desesperación de los familiares que se concentraron en los alrededores del edificio desplomado, en la céntrica calle Monseñor Salvatierra.

Inicialmente se evitó, por precaución, el ingreso de maquinaria pesada a la zona. Se calcularon cuatro horas de rastreo y otras 12 de rescate, desde que comenzaron las labores (pasadas las 23:00). Al lugar llegaron ambulancias para trasladar a tres heridos a la clínica Lourdes y seis al hospital San Juan de Dios. Los nueve pisos de la obra tenían un avance importante, quedando sólo pendiente la obra fina, según versiones extraoficiales.

Las autoridades iniciaron una investigación y se presume que hubo fallas en la construcción.

  El hecho 

22:00

A esa hora se informó del desplome del edificio en el centro de la capital cruceña

El Deber

Buscan pistas de los atrapados

Equipos de rescate siguen trabajando. La labor se extenderá unas 12 horas

G. Arancibia / F. Lacio – El Deber

Un estruendo de la nada, aproximadamente a las 22:00, fue el inicio de uno de los peores desastres urbanos que ha vivido la capital cruceña. El edificio multifamiliar Málaga, aún en construcción en la calle Monseñor Salvatierra, se vino abajo y atrapó en su violenta caída a por lo menos 17 personas, de las cuales, hasta el cierre de esta edición, nueve están a salvo y recuperándose de la tragedia vivida.

Lo ocurrido movilizó a la Policía, la Gobernación, la Alcaldía y a los grupos de rescatistas voluntarios que, a pesar del riesgo que corren sus vidas, aún están metidos en medio de los escombros que causó el siniestro con la caída de nueve pisos, tratando de encontrar a los que el destino les permita salir de este hecho.

“Mi hermano está allí, tengo que entrar a sacarlo”, gritaba desconsolado Luis Alfredo Rojas Frías, un joven que también trabajaba en la obra y que, por aquellas cosas del destino, salió a buscar ayuda de más obreros y se salvó de ser aplastado por el concreto.

A decir de este muchacho, que no encontraba consuelo, cuando él regresó de una obra cercana a la que fue a pedir ayuda, todo ya había pasado. El polvo de los materiales destrozados y algunos gritos sofocados por la tierra eran lo único que quedó en el lugar. Luego, a los pocos minutos, las sirenas de las ambulancias y el murmullo de las cientos de personas que llegaron llenaron el ambiente.

El rescate comenzó pasadas  las 22:30. La Policía fue la primera en evacuar a los heridos, que aún en shock por lo sucedido no daban crédito a lo que sus ojos veían.

Uno de estos sobrevivientes fue Óscar Encinas N., que había llegado a la obra acompañando al ingeniero Luis Camacho. El objetivo era buscar soluciones a los agrietamientos que ya se habían detectado en la parte inferior de la construcción.

Fue precisamente la información que proporcionó Encinas lo que permitió a los rescatistas preparar las tareas de ayuda. Una forma que se encontró para hallar a los de-    saparecidos fue llamar a sus teléfonos celulares y saber si estaban aún con vida. En la zona del desastre no se habla de otra cosa que no sea fe y esperanza y las familias esperan augustiadas noticias de sus seres queridos. Hasta el cierre de esta edición, aún ocho se reportaron como atrapados.

Otros detalles

– Informe. Diego Suárez, uno de los encargados de los equipos de rescate de la Gobernación, informó, poco después de las 2:00, que eran 17 las personas que estaban en el edificio. Precisó que, hasta esa hora, se había evacuado del lugar a nueve personas, tres derivadas a la Clínica Lourdes y seis al hospital San Juan de Dios. El trabajo se prolongará por al menos 12 horas.

– Apoyo. Se supo que hoy llegará un grupo de especialistas en este tipo de rescates desde La Paz, que traerán canes entrenados para estos trabajo y se busca equipos de sonido especializados para escuchar en medio de los escombros algunos signos vitales o pedidos de auxilio de los sepultados.

– Vecinos. El comandante departamental de la Policía, Humberto Echalar, pidió a la gente que vive por la zona irse, por el momento, a otros lugares más seguros. El gobernador cruceño, Rubén Costas, dio una voz de aliento y esperanza a los familiares de los atrapados.

Los afectados

Luis Camacho N.

Marcelo Niño de Guzmán

José Luis Encinas N.

Joaquín Callaú N.

Armando Ribera N.

Bruno Pérez N.

José Antonio Égüez N.

Antenor Daza N.

Óscar Gutiérrez N.

Félix Montaño N.

Enrique Alarcón N.

Miguel Mario Rojas Frías

Testimonios del desastre

Cecilia Ochoa Martínez

“Me aferré a mi hijo”

Esta mujer vive en una casa al lado de la construcción que se derrumbó. A la hora del siniestro estaba mirando televisión, junto a su hijo Ricardo Mendoza (3) y su niñera Reyna (13). “La muchacha salió al escuchar los ruidos, pero quedó atrapada por los escombros. Yo me aferré a mi hijo y quedé en un hueco que se formó en mi casa. Pedí auxilio, pero luego perdí el conocimiento”, relató la mujer.

Leonardo Áñez N.

“Pasaba a comprar coca”

“Estaba pasando por el lugar para ir a comprar coca. Soy guardia de seguridad de la zona. Escuché un ruido fuerte y luego vi cómo todo el edificio se venía abajo. Corrí al ver el polvo que llenó la cuadra entera”, cuenta Leonardo Áñez N., un cuidante del lugar que no salía del asombro de lo sucedido. Su información ayudó a iniciar las tareas de búsqueda de los rescatistas.

Vicenta Mamani N.

“Vi cómo se caía todo”

Es esposa de Óscar Gutiérrez N., uno de los ingenieros de la obra. Ella había ido a visitar a su marido, junto a sus tres hijos, de 2, 5 y 7 años. “Me despedí de él y cuando estaba saliendo escuché un ruido”, recuerda la mujer, que se cruzó al frente de la cuadra desde donde vio impotente cómo el edificio atrapaba a su cónyuge. Por fortuna el hombre fue uno de los rescatados y se recupera.

Al edificio le faltaba sólo la obra fina

Estaba construido en cerca de 700 metros cuadrados. El proyecto tiene seguro, según la abogada

Carla Paz Vargas – El Deber

La obra bruta del edificio Málaga ya estaba lista. Sólo faltaba la pintura y los vidrios, es decir la obra fina, cuando la estructura se desplomó, prácticamente sepultando a los trabajadores bajo los escombros. El proyecto, que se inició a mediados del año pasado, es una iniciativa de la empresaria Paulina Callaú Jarpa, que fuera directora de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo (Cainco) durante el periodo 2009-2010.

Martha Ruiz, abogada de la propietaria, dijo que los esfuerzos de la empresa están concentrados en precautelar la salud de los heridos. “Nos enteramos del incidente a las 22:00 a través de los medios de información. Estamos preocupados, porque el ingeniero y el calculista están adentro intentando rescatar a los trabajadores”, explicó la asesora en un contacto telefónico con EL DEBER cerca de las 00:00.

Ruiz indicó que entregaron los planos a los bomberos para facilitar las tareas de rescate en los cerca de 700 metros cuadrados de superficie que ocupaba el edificio. Consultada sobre la empresa que se hizo cargo, precisó que la obra estuvo a cargo de profesionales con experiencia y que los planos fueron aprobados por la Sociedad de Ingenieros, el Colegio de Arquitectos y la Alcaldía. “Se cumplieron todos los requisitos, no es un edificio improvisado, desconozco las razones del incidente, pero se hará un peritaje”, adelantó.

La abogada afirmó que la estructura estaba asegurada, aunque no reveló el nombre de la compañía, y sostuvo que para hoy tendrá más información sobre la inversión estimada. De acuerdo con presidente de la Cámara de la Construcción, Rolando Schurpp, la firma encargada de la obra es la Sociedad Inmobiliaria y Constructora (Sicruz). En la página web de la empresa Sicruz se indica que fue fundada el 20 octubre de 2004, pero tiene obras realizadas hace diez años.

   En detalle 

– Proyecto. El edificio incluía 43 departamentos, tres locales comerciales, garajes cubiertos, bauleras, piscina, churrasquera en planta baja y en la terraza del noveno piso. Asimismo, contaba con salón de eventos, dos ascensores y baños para el personal de servicio.

– Implementos. La página web del edificio Málaga destaca que los sanitarios son de alta calidad, grifería fina, mesones de mármol y granito, muebles bajos de cocina, closets, instalación para calefones y para lavadoras.

– Información. En los letreros de promoción e información que se exhiben en la calle se lee que el proyecto fue aprobado bajo el número 86852, que el diseño arquitectónico le correspondió a Joaquín Callaú, el cálculo de estructura a Armando Rivera, el cálculo hidrosanitario a Lusinete Máximo dos Santos y la dirección de obra a Marcelo Niño de Guzmán.

– Estacionamiento. Capacidad para 27 vehículos en el subsuelo y con acceso a los ascensores y un baño para mayor comodidad y seguridad de los propietarios.

Arquitecto deslindó responsabilidad

El arquitecto que se encargó del diseño del edificio Málaga, Joaquín Callaú, deslindó responsabilidades luego de que se desplomara la estructura.

“Escuché en algunos canales de televisión que se asocia mi nombre como responsable de la obra, pero yo sólo diseñé y no tuve nada que ver con la ejecución ni el cálculo estructural”, explicó.

Además, insistió en que su participación en el proyecto arquitectónico concluyó hace varios meses, aunque no precisó cuándo entregó los planos para su ejecución.

“Tengo entendido que los trabajadores estaban haciendo una inspección cuando la estructura se desplomó. Yo me enteré porque me llamaron algunos conocidos, y en las próximas horas buscaré asesoramiento legal, para evitar malentendidos”, señaló.

En el lugar, ubicado en la calle Monseñor Salvatierra, entre Independencia y René Moreno, se construían 43 departamentos de cinco tipos distintos en nueve pisos, además de tres locales comerciales, piscina, salón de eventos, entre otros.

Descartan un sismo y esperan peritaje

La causa puede ser el cálculo estructural o una falla en la construcción

Carla Paz

Rolando Schrupp, presidente de la Cámara de la Construcción, dijo que estuvo en el lugar del incidente, vio el letrero de obra y el proyecto tiene el registro de construcción aprobado por la Alcaldía, así como los nombres del ingeniero y el calculista.

“Usualmente, cuando ocurre una desgracia como ésta se hace un peritaje para conocer quiénes son los responsables. Nosotros advertimos sobre este tema, pero se debe esperar el peritaje, porque puede ser que haya fallado el suelo, o un error en la construcción o mala calidad de la obra”, señaló el directivo.

Schrupp apuntó que hay un montón de posibilidades y quien emita un criterio está asumiendo demasiada responsabilidad, porque puede ser una falla estructural, una falla por la lluvia y que colapsó o tal vez se quiso ahorrar dinero en la estructura. Cuestionó también a la Alcaldía, porque considera que no fiscaliza las obras. “Hay una serie de fallas, y nosotros lo advertimos; era cuestión de esperar, porque uno se acuerda del ingeniero recién cuando sucede algo así”, concluyó.

En declaraciones al programa de TV No Mentirás, Luis Fernando Vaca Díez, oficial mayor de Obras Públicas, reveló que se hará una evaluación de lo ocurrido. “Se puede adelantar que hay dos alternativas al no ser por un sismo: una es una falla de cálculo y otra una falla constructiva, por lo que la Oficialía Públicas hará una comisión para definir las causas del incidente”.

Una falla de cálculo es una mala estimación de la presión estructural del edificio con relación a la carga que debe soportar y una falla constructiva es no obedecer las recomendaciones técnicas, como el material, según los técnicos.

Hoy se tendrá conocimiento exacto de la empresa y el propietario. “La Oficialía Mayor de Planificación tiene exigencias que se deben cumplir, se debe ver si fue un problema de cálculo”, sostuvo Vaca Díez.

El presidente de la Sociedad de Ingenieros Civiles, Alejandro Viruez, habló de una serie de causales posibles y adelantó que sólo una auditoría técnica desvelará la verdad.

   Opinión  

“La causa no fue natural”

Mario Suárez Riglos /  Geólogo

Inmediatamente conocido el desastre de anoche en el centro de la ciudad, busqué en la página del Observatorio de San Calixto en la que se descartó el registro de un sismo. Hubo uno de 2,5 grados con epicentro en Arequipa (Perú) que no tuvo ninguna consecuencia allí, menos en Santa Cruz. De esta información se deduce que el derrumbe del edificio Málaga no fue por un fenómeno natural, sino por otras causas.

Entonces, las causas pueden ser varias, entre ellas un mal cálculo estructural o una grave falla en la construcción. De todos modos, el peritaje que debe hacerse podrá establecer qué pasó realmente. /JAC