Morales descarta uso de energía nuclear en Bolivia

"Lo que pasó en Japón con la energía nuclear es muy grave” y ahora habría que rechazar la instalación de plantas nucleares en Bolivia, señaló el Presidente.

image El Presidente Evo Morales participó este sábado del Día Internacional de la Madre Tierra en el municipio de Tiquipaya

    Tiquipaya, BOLIVIA, 23 abr (ABI).- El presidente Evo Morales descartó, de plano, la generación de energía nuclear en Bolivia, durante un discurso pronunciado el sábado por la tarde en Tiquipaya, al conmemorar el aniversario de la primera Cumbre Mundial de los Pueblos por el Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra, (CMPCC) verificada en 2010 en esta población central boliviana.



    "Lo que pasó en Japón con la energía nuclear es muy grave y da lástima y una enorme preocupación. Quiero aprovechar esta oportunidad, y espero no equivocarme, tenía muchos deseos de que Bolivia tenga energía nuclear, energía nuclear no bombas atómicas, pero ahora me doy cuenta, tal vez estuve equivocado, ahora hay que pensar y tal vez rechazar al ver el Japón", una de cuyas plantas nucleares, la instalada en la ciudad de Fukushima, desbaratada por el megaterremoto seguido de maremoto el 11 de marzo último, liberó radioacticvidad.

     Adalid por la defensa de los derechos de la Madre Tierra, el mandatario elevó a nivel continental su convicción.

    "Sudamérica debe ser sin energía nuclear para defender la vida de los bolivianos, de los sudamericanos y los latinoamericanos", afirmó.

    La política medioambientalista de Morales impulsó que Naciones Unidas declare al 22 de abril Día Internacional de los Derechos de la Madre Tierra.

    "Ahora en este nuevo milenio las Naciones Unidas tiene que aprobar los derechos de la Madre Tierra, y por tanto, es tan importante la participación de los movimientos sociales y las fuerzas sociales" en tal cometido, afirmó al tiempo de celebrar la política mundial nacida en la I CMPCC en Tiquipaya, vecina de la ciudad central de Cochabamba.

    La CMPCC demandó a los países más desarrollados restaurar, en lo que sea reversible, la salud de la atmósfera planetaria, respetar los derechos de la Madre Tierra y las formas ancestrales de vida, comprometiéndose a reducir efectivamente las emisiones de gases de efecto invernadero.

    También a sufragar los costos de adaptación de los pueblos y comunidades que ya enfrentan los efectos nocivos de la crisis climática y, sobre todo, respetar el Protocolo de Kioto, que en 1997 ordenó reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 50%.

    Lo mismo, la aprobación de la enmienda al protocolo de Kioto para el segundo período de compromisos a iniciarse en 2013 al 2017 en el cual los países desarrollados deben comprometer reducciones domésticas significativas al menos  de 50%, respecto al año base de 1990, sin incluir mercados de carbono u otros sistemas de desviación", urgió.

     También advirtió que de incrementarse el calentamiento global en más de 2 grados centígrados se extenderían los desiertos y se agravaría el derretimiento de los polos y los glaciares en los Andes y en los Himalayas.

   "Muchos Estados insulares desaparecerían y  África sufriría un incremento de la temperatura de más de 3 grados centígrados", alertó.

    La ICMPCC criticó el sistema "destructivo" capitalista

    "Los países más ricos tienen una huella ecológica 5 veces más grande de lo que el planeta es capaz de soportar", afirmó la declaración.