El escándalo desatado por la reciente visita del Ministro de Defensa de Irán podría acabar develando una oscura trama internacional. Sucede que Ahmad Vahidi, quien tuvo que fugarse del país tras conocerse sus antecedentes como coautor intelectual del atentado terrorista a la AMIA, es considerado por la Unión Europea (UE) como uno de los principales promotores del programa nuclear bélico de Teherán, lo que abre la posibilidad de que su presencia estuviera relacionada con los yacimientos de uranio de Bolivia.
Un reportaje del periódico Tiempo Argentino revela que, de acuerdo a un listado elaborado por la UE en el 2008, Vahidi está vinculado al desarrollo de sistemas vectores de armas nucleares, por lo cual el organismo paneuropeo recomienda a sus Estados miembros congelar fondos destinados a su ministerio e impedir la entrada de Vahidi o el tránsito por sus territorios.
En ese mismo listado de la UE, se recuerda que Vahidi es también el comandante de la Guardia Revolucionaria y de las Brigadas Quds, milicias paralelas al ejército convencional iraní. Lo que nos lleva a preguntarnos si la presencia de este siniestro personaje en la inauguración de la Escuela Militar de la ALBA no tendrá algo que ver con los proyectos chavistas para el desarrollo de milicias adoctrinadas en el “socialismo del siglo XXI”.
¿Milicias paralelas a las Fuerzas Armadas de Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua, conformadas con asesoría iraní y equipadas con armamento nuclear?
Puede sonar a política-ficción, pero parece estar en los planes descabellados del eje seudo-bolivariano…
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