Jimmy Ortiz Saucedo
“CIDOB descalifica citaciones por ´secuestro` (El Diario 25-02-12).- (ANF).- Dirigentes indígenas, que participaron de la VIII marcha en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), calificaron de una "cacería de brujas" las citaciones emitidas contra estas personas por el presunto secuestro del Canciller del Estado el pasado 24 de septiembre en la población de Yucumo, Beni”.
El gobierno del Presidente Morales no puede con su talante represivo y dictatorial. Cuando le falla la razón, que es muy a menudo, apela a la fuerza. "Por la razón o por la fuerza", como reza el escudo chileno, el tema es hacer su capricho a cualquier costo.
Hoy nuevamente se ensaña con los indígenas de tierras bajas, que pelean por la naturaleza y el TIPNIS de todos. Ya se han vuelto una víctima recurrente del masismo.
Ayer los usaron fríamente para ser el rosto indígena de un proyecto que era en realidad una máscara grotesca. El chavismo trasnacional, unido a un grupo de ONGs, se inventaron una careta social muy conveniente para presentarse a Bolivia y al mundo, consiguiendo de esta forma adeptos, plata y una causa justa.
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Lo que nadie les dijo era que los verederos dueños del "proceso de cambio" eran los cocaleros ilegales del Chapare. Los demás eran meros colgandijos circunstanciales.
Eso es lo que indígenas y ONGs están entendiendo hoy, y sintiendo en carne propia. Como ayer sintieron los familiares de Cristian Urresti, en la quema de la Prefectura de Cochabamba (11-01-2007). Como lo sintieron los familiares de Gonzalo Durán, José Luis Cardozo, Juan Carlos Serrudo, durante los luctuosos hechos de La Calancha (24-11-2007). Como lo sintieron nuestros hermanos pandinos y los familiares del pastor evangélico, durante el golpe de Estado contra la gobernación de Pando (11-09-2008). Como lo sentimos los cruceños, y en especial los parientes del profesor de Portachuelo Pedro López y del unionista de La guardia Edson Ruíz, durante el Cerco a Santa Cruz (10 al 23-11-08). Como lo sintieron los familiares de Fidel Mario Hernany Jiménez y David Callisaya, en la masacre de Caranavi (07 y 08-05-2010). Como los sienten nuestro encarcelados, exilados y perseguidos políticos de hoy.
El alma noble de los indígenas del oriente y su proverbial Kandire, no les permitió ver el puñal bajo el poncho. Ellos son hombres de buena fe, que creen en la palabra.
De las ONGs no sé qué decir, no entiendo cómo pudieron engatusarlos. Ellos son gente profesional, ideológica y políticamente bien formados, y no se creen el cuento del tío. Probablemente el exceso de ideologización los hizo perder la noción de la realidad. Lo que sí sé es que ambos fueron vilmente usados y engañados. Hoy que ya tienen todo el poder, no los necesitan más, los tiran como trapos viejos.
Cría cuervos y te sacarán los ojos.
Pero la vida es así, todos nos equivocamos. Vivimos en un mundo bipolar donde el bien y el mal se tocan. Donde el trigo y la cizaña se entremezclan en el cultivo. Los límites de la verdad y la mentira son muchas veces imperceptibles. La luz y las tinieblas son parte de la realidad cotidiana.
Lo importante es entender todo esto y sumarse, con la misma fuerza que se sumaron al masismo embustero, a un verdadero proceso de cambio. Un proceso de cambio que quiere construir, en democracia, un auténtico país para todos, incluso para sus verdugos cocaleros. Un verdadero país plurinacional, como son la mayoría de los países del mundo moderno.
Reitero: desde el inicio de la República hemos adolecido de un liderazgo nacional con una visión amplia de País. Un liderazgo patriótico con grandeza de espíritu, que busque por encima de los intereses regionales, culturales o raciales, el bienestar de la Nación en su conjunto. Un liderazgo que nos haga sentir bolivianos a todos. Un liderazgo integrador.
Ese nuevo proceso de cambio verdadero ya comienza a vislumbrarse en el horizonte. Los indígenas y las ONGs debieran ser parte de él.