Al menos cuatro personas, entre ellos tres niños, murieron el lunes cuando un hombre que huyó en moto abrió fuego a las puertas de un colegio judío en Toulouse, en el suroeste de Francia, en el tercer tiroteo fatal en la región en sólo una semana.
El ataque dejó también varios heridos, dos de ellos graves, y ocurrió tras la muerte de tres soldados en dos tiroteos diferentes en la misma región la semana pasada, que fueron llevados a cabo por un hombre que escapó en moto.
El presidente Nicolas Sarkozy y Francois Hollande, el candidato socialista que retará las aspiraciones de reelección del mandatario en los comicios de mayo, cancelaron otras citas para dirigirse al lugar del incidente, acompañar a las víctimas y exigir mayor seguridad.
Las muertes podrían colocar a la seguridad en lo más alto de la agenda electoral, en medio de una amarga campaña que ha estado dominada por temas como los impuestos y la inmigración. Los fiscales abrieron investigaciones sobre terrorismo por los tres ataques.
El fiscal de Toulouse Michel Valet dijo que el hombre armado mató a un maestro de hebreo de 30 años, a sus dos hijos de 3 y 6 años y a otro niño. Un joven de 17 años fue herido de bala y está en el hospital.
"El atacante disparó fuera de la escuela, luego persiguió a los niños dentro del colegio antes de escapar en una motocicleta pesada", indicó Valet a periodistas.
El atacante usó un arma de alto calibre y otra pistola. Pero las autoridades no pudieron precisar si fueron las mismas utilizadas en los asesinatos de tres soldados en dos tiroteos la semana pasada en manos de un hombre que huyó en una moto.
Un portavoz del Ministerio del Interior dijo que se había reforzado la seguridad en todos los colegios judíos del país.
En la pequeña escuela judía Ozar Hatorah, ubicada en un elegante barrio de Toulouse, se vivieron momentos trágicos, con los padres llorando mientras buscaban a sus hijos.
"Horror"
"Vi dos personas muertas frente al colegio, un adulto y un niño (…) Dentro, era la visión del horror, los cuerpos de dos niños pequeños", dijo un padre conmocionado, cuyo hijo asiste al colegio, en declaraciones a la cadena de radio RTL.
"No encontré a mi hijo, aparentemente huyó cuando vio lo que ocurría. ¿Cómo pueden atacar algo tan sagrado como un colegio, atacar a niños que miden 60 centímetros?", expresó.
Sarkozy, que está en campaña por su reelección en las dos rondas de votaciones de abril y mayo, fue a Toulouse el lunes por la mañana, acompañado por el ministro de Educación, Luc Chatel, y el presidente de la asociación judía francesa CRIF, Richard Prasquier.
"Esta es una tragedia terrible (…) Toda la República de Francia está movilizada por este drama terrible", declaró Sarkozy en la Radio O.
El presidente citó similitudes con los tiroteos de los soldados en Toulouse y la localidad cercana de Montauban la semana pasada, pero aclaró que era demasiado pronto para establecer un vínculo.
"Sólo los tribunales y la policía pueden decir qué consecuencias se extraen de esto", agregó.
Hollande, cuya ventaja sobre Sarkozy en los sondeos de opinión se achicó en las últimas semanas, dijo en un comunicado: "Voy a ir a Toulouse inmediatamente a ofrecer mis condolencias a las víctimas y expresar mi pésame y solidaridad con las familias y la comunidad judía de Francia".
Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí, Yigal Palmor, expresó su condena por los asesinatos: "Estamos siguiendo con gran conmoción las informaciones que llegan de Toulouse y confiamos en que las autoridades francesas resuelvan este crimen y lleven a los responsables ante la justicia".
Unos 50 expertos ya están investigando la muerte de dos soldados el jueves en la localidad de Montauban, cerca de Toulouse, que fueron abatidos a tiros cuando intentaban sacar dinero de un cajero cercano al destacamento del decimoséptimo regimiento de paracaídas.
Un tercer soldado fue abatido a tiros el fin de semana anterior en Toulouse. Las informaciones habían confirmado el viernes que en ambos incidentes se había usado el mismo arma.
Reuters