Cochabamba parecía enero de 2007

Jimmy Ortiz Saucedo

jimmy-ortiz1 Noticia: “Cocaleros muestran su fuerza y conflictos siguen (Los tiempos de Cochabamba) Los cocaleros, movimientos sociales y organizaciones afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) mostraron ayer su poder al lograr el repliegue de los otros sectores en conflicto, que tenían previsto movilizarse ayer”.

Comentario: Fue una verdadera demostración de fuerza. Al mejor estilo de lo que ellos saben hacer. Al estilo del macho alfa de la manada, vociferando, atropellando a todo el que no píense como ellos, matando cuando el caso lo amerita.



Sólo la prudencia de los cochabambinos evitó una confrontación de proporciones. Incluso se suspendieron las clases y el transporte público. Trágica situación para una ciudad en pleno tercer milenio. Era como si esperaran la llegada de las tropas de Atila el Huno.

La jornada me trajo a la memoria la quema de la prefectura de Cochabamba (11/E) y la muerte impune de Cristian Urresti Ferrel, el 11 de enero del 2007, y otros dos ciudadanos. En una de las páginas más negras de la historia masista, conjuntamente con el sangriento Golpe de Estado a la gobernación de Pando, los asesinatos de La Calancha y el Cerco a Santa Cruz.

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Lógicamente todos ellos impunes, sus fiscales, jueces, policías e incluso el ejército, no pueden intervenir contra la revolución “democrática” y cultural del “hermano” Evo.

Esta vez los cocaleros del Chapare salieron en defensa de su Presidente. Y me refiero al Presidente de las 6 federaciones del trópico de Cochabamba. Ellos necesitan que siga gobernado el país, precisan que siga derramado “sus luces” sobre la humanidad.

Necesitan sembrar coca en el TIPNIS, para seguir alimentando la voraz exportación, aunque el proceso destruya nuestros pulmones verdes y el habitad de los dueños ancestrales de la tierra.

Y mientras la vanguardia cocalera amedrentaba Cochabamba, en la retaguardia “Once policías heridos en choque de cocaleros y erradicadores” en el Chapare (Opinión 10-05-12). Este es el verdadero rostro de los masistas cocaleros, sin ningún respeto a la vida.

Los líderes, los discursos y las 6 resoluciones del evento, estuvieron a la altura de las circunstancia. Fue de un surrealismo patético. Su mentalidad totalitaria es notable, la democracia ni si quiera la sospechan y peor aun la sienten.

Comenzaron llamando la concentración cocalera como “cabildo por la cochabambinidad”, ¿Qué tal?, como si ellos fueran Cochabamba, como si la verdadera Cochabamba no estaba en sus casas esperando la agresión.

En actos como estos, no podía faltar la agresiva Leonilda Zurita, la misma del 11/E. Ella fue incluso acusada por el ministerio público de la época. El fiscal general, Mario Uribe, presentó ante la Suprema el requerimiento acusatorio en contra de la ex ministra de Gobierno, Alicia Muñoz; la ministra de Justicia, Celima Torrico y Leonilda Zurita del MAS. Pero ellos son inmunes a la justicia de Evo.

La ex senadora Zurita fue acusada de malversación, uso indebido de influencias, incendio, destrucción o deterioro de los bienes del Estado y de la riqueza nacional. Esta es la calidad humana y moral de la cocalera Leonilda.

Pero lo que raya en el cinismo más absoluto es una de la resolución del encuentro coralero: “declarar estado de emergencia con movilización permanente de defensa de la democracia”.

¡Defensa de la democracia! ¡Los masistas cocaleros de Evo Morales defendiendo la democracia que cada día atropellan! Estos señores piensan que los bolivianos somos estúpidos. Piensan que no sabemos que es la democracia.

Ellos creen, que la democracia es votar un domingo cada 5 años y que luego un tirano haga con nuestra vida lo que le dé la gana. ¿Eso creen que es democracia?

La Carta Democrática Interamericana, norma supra constitucional define la democracia dice:

Artículo 3.- Son elementos esenciales de la democracia representativa, entre otros, el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales; el acceso al poder y su ejercicio con sujeción al estado de derecho; la celebración de elecciones periódicas, libres, justas y basadas en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo; el régimen plural de partidos y organizaciones políticas; y la separación e independencia de los poderes públicos.

Esta es la democracia, lo demás son cuentos chinos del populismo chavista moribundo. Sería más coherente y verdadero que los cocaleros ilegales del Chapare defiendan el Plan Cóndor, o el Plan Evo, que la democracia.