Brasil ratificó ayer que concedió asilo político al jefe de la bancada opositora en el Senado, Róger Pinto, que se declaró perseguido del régimen de Evo Morales. Ahora se espera el salvoconducto de Bolivia. Opositores y analistas señalan que el asilo político a PInto confirma que en Bolivia el Gobierno no garantiza los derechos humanos y que no hay una justicia independiente. El gubernamental MAS dice que Brasil se equivocó.
Brasil da revés a Evo con el asilo de Pinto
El Gobierno de Dilma Rousseff aceptó el pedido de asilo político del senador opositor. Ahora se espera el salvoconducto de Bolivia.
Aviso. Cartel de denuncia del pedido de asilo del senador Pinto; en la zona de Miraflores de La Paz. Foto La Razón
El Gobierno de Brasil ratificó ayer que concedió asilo político al jefe de la bancada opositora en el Senado, Róger Pinto, que se declaró perseguido del régimen del presidente Evo Morales. La decisión de la Cancillería brasileña, conocida como Itamaraty, surgió horas después de que el ministro boliviano de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca, anunciara que no había recibido la notificación oficial de Brasilia.
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La decisión del Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff se debe, según el diario Valor Económico de Brasil, a la constatación de que existen señales de parcialidad de la justicia boliviana y el cercenamiento de la defensa en algunos de los 20 procesos en contra del senador opositor.
Familiares del legislador, que se encuentra en la embajada brasileña en La Paz desde el 28 de mayo, aseguraron que lo más importante es haber conseguido el asilo político, pero ahora esperan que el Gobierno boliviano emita un salvoconducto para salir del país. Apenas se oficialice el trámite, Brasil enviará un avión para su traslado.
En criterio del politólogo Jorge Lazarte, la concesión del asilo político a Pinto significa una doble derrota para el presidente Morales. Primero, porque es un reconocimiento de que en Bolivia no hay garantías judiciales ni procesales para los opositores; segundo, porque la institución del derecho internacional lo otorgó Brasil, cuyo Gobierno es aliado de Morales, y no EEUU.
Según Lazarte, la situación del senador opositor echa por tierra el reclamo que presentó Bolivia en la 42ª Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) en contra de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Con ocasión de la apertura del foro hemisférico, el presidente Evo Morales dijo que ese mecanismo interamericano se refundaba o estaba condenado a desaparecer.
De acuerdo con los procedimientos internacionales, lo que corresponde en estos casos es que una vez concedido el asilo, el Gobierno requerido, en este caso el de Bolivia, tiene que emitir el salvoconducto de salida del país, bajo la protección del peticionario, en este caso Brasil. Desde el momento en que un Estado otorga el asilo garantiza la permanencia y la salida del país de la persona afectada.
Desde que el presidente Evo Morales asumió la Presidencia, en 2006, representantes de la oposición y dirigentes empresariales han solicitado asilo y refugio en Brasil, Estados Unidos, España, Paraguay, Perú y Uruguay.
El último caso se produjo en diciembre de 2011, cuando el gobernador de Tarija, Mario Cossío, se refugió en Paraguay, denunciando persecución política.
Afectado por OAS y Petrobras
La nacionalización de Petrobras, ocurrida el 1 de mayo de 2006, y la reciente ruptura del contrato con la empresa OAS, que construía la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos con financiamiento del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bndes) de Brasil, son apuntadas por el politólogo Jorge Lazarte como algunas de las causas de la ‘agenda negativa’ que mantenían los gobiernos del presidente Evo Morales y de Dilma Rousseff.
Según el politólogo, los desplantes que han recibido las empresas brasileñas forman parte de la inseguridad jurídica que se vive en el país y de la falta de garantías que menciona la Cancillería brasileña para conceder el asilo político al senador opositor Róger Pinto.
Según un artículo de Valor Económico, el pedido de asilo del legislador de Concertación Nacional se produjo en un momento delicado de la relación bilateral y de una agenda negativa que ambos países deben resolver.
La columnista Mary Anastasia O’Grady, del diario estadounidense Wall Street Journal, escribió que “el problema real de Morales, el odio de los bolivianos a su autoritarismo, está saliéndose de su control. El problema empezó con un intento en diciembre de 2010 de aumentar los precios de la gasolina un 70%. El incremento fue tan violento que se vio obligado a retractarse. El incidente dañó su imagen”.
Es una figura del derecho internacional
Armando Loayza / Excanciller de Bolivia
Hay una larguísima tradición histórica del asilo diplomático y muchas concesiones de la que son signatarios Bolivia y Brasil. El país que otorga asilo tiene amplia facultad para analizar la naturaleza del delito; si considera que la vida de esta persona corre peligro, puede otorgarle el asilo y el otro país debe acatar la decisión, como este caso Brasil, que hizo uso de ese derecho.
Ahora corresponde a Bolivia conceder el salvoconducto para que el asilado salga del país en un plazo prudencial.
El asilo político es una tradición, una institución histórica en el continente. En 1946, cuando fue asesinado el presidente Gualberto Villarroel, sus ministros, incluso Víctor Paz Estenssoro, se asilaron en la embajada de Paraguay y hubo personas que intentaron penetrar en la legación diplomática con grave peligro, pero se preservó la inviolabilidad de la embajada. Es una institución del derecho internacional del continente, pero Brasil ha debido tener buenas razones para otorgar el asilo y se tiene que acatar la situación porque cuenta con derecho absoluto al calificar la naturaleza de la delincuencia. Este es un caso típico de asilo diplomático latinoamericano.
Diferencias de conceptos
– Exilio. Es lo mismo que destierro, por lo tanto el exilio es cuando el Gobierno de algún país obliga a dejar el territorio en un tiempo límite.
– Asilo político. Es cuando solicita al gobierno de un país diferente al suyo, o cuando este gobierno se lo ofrezca, lo reciba en su nación y tenga derechos como civil, porque fueron violadas sus garantías individuales en su país de origen.
– Refugio. Es un fenómeno caracterizado por el paso de fronteras estatales por parte de personas o grupos obligados a abandonar su país de origen debido a cuestiones de raza, credo o cuestiones políticas.
El caso Pinto provoca sacudón
Diplomacia. El oficialismo afirma que a Brasil le faltó información para aceptar el asilo de Róger Pinto. Prevén enviar una comisión para que entregue documentación de denuncias.
Acusados. Los familiares de las personas que se declaran perseguidas políticas del Gobierno respaldan a Róger Pinto.
El Deber
Para los oficialistas y opositores, la decisión del Gobierno de Brasil de conceder asilo político al senador opositor Róger Pinto tendrá consecuencias en el futuro. Mientras los seguidores del presidente Evo Morales aseguran que a partir de ahora aumentará la impunidad en el país; para sus adversarios, con esto la comunidad internacional prestará más atención a las denuncias de persecución política a los contrarios al MAS.
En criterio de la segunda vicepresidenta de la Cámara del Senado, Centa Rek, después de la decisión de Brasil de conceder asilo a su colega de bancada, el Gobierno debe revisar y redireccionar sus políticas porque, caso contrario, empeorará su situación frente a la comunidad internacional.
“Aquí tenemos dos problemas gravísimos: uno que el Gobierno no respeta ni garantiza los derechos humanos y, por otro lado, no hay una justicia independiente”, dijo Rek.
La independencia de la justicia fue reclamada por el presidente Evo Morales durante la 42ª Asamblea de la OEA que se celebró recientemente en Cochabamba, que recriminó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de favorecer a Estados Unidos porque, junto a Canadá, son los que más aportan recursos económicos al sistema interamericano.
Para el oficialista MAS, la decisión asumida por el Gobierno de Dilma Rousseff sienta un mal precedente. Según el jefe de bancada de los masistas en el Senado, Eugenio Rojas, otras exautoridades que son procesadas por actos irregulares optarían por salir del país, vía diplomática, para evitar las investigaciones.
“Brasil debe hacer esa evaluación y valoración, porque de lo contrario habrá autoridades que se abstendrán de responder a la justicia”, dijo Rojas.
Por su lado, la senadora opositora Carmen Eva Gonzales, que enfrenta ocho procesos, de los cuales cinco son por la figura de ‘desacato’ y otros tres por sedición, dijo que la decisión de Brasil fue un ‘garrotazo’ contra el Gobierno del presidente Evo Morales que se ha dedicado a perseguir judicialmente a los opositores.
Gonzales aseguró que Pinto no abanadonó su curul de CN, sino que pidió licencia temporal por hechos atentatorios en contra de su vida, por lo que se debería dar un tratamiento especial.
Si la comisión de Política Plural del Senado no acepta la licencia de Pinto, Linda Flor Villalobos, senadora suplente también por CN, tendrá que asumir las funciones. Gonzáles aseguró que, pese a que Flor fue electa por CN, hizo un transfugio político al MAS.
Por su lado Vladimir Peña, representante de la Gobernación cruceña, dijo que el senador Pinto sufre del acoso político por haber denunciado temas tan peligroso, como la corrupción y el narcotráfico en el país.
Peña advirtió de que “seguramente el Gobierno enviará una comisión a Brasil” para que este reconsidere el asilo político a Pinto, pero tal y como sucedió con el gobernador suspendido de Tarija, Mario Cossío, que pidió asilo en Paraguay, el Gobierno brasileño ratificará el asilo al legislador opositor.
Por su lado, el senador masista Isaac Ávalos destacó que la decisión de Brasil no afectará las relaciones bilaterales entre ambos países porque “este no es un tema de Estado a Estado, sino absolutamente personal”.
Brasil recurre a los convenios
A las 15:15 de ayer, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil confirmó en su página web la aceptación de la solicitud de asilo del senador boliviano Róger Pinto.
“El Gobierno brasileño decidió conceder el asilo nacional al boliviano Róger Pinto Molina, a la luz de las normas y prácticas de los países latinoamericanos del Derecho Internacional y del párrafo X del artículo 4 de la Constitución Federal”, expresaban en el comunicado.
La Constitución brasileña establece en el artículo mencionado 10 principios que rigen sus relaciones internacionales.El décimo es “la concesión del asilo político”.
Brasil firmó, al igual que Bolivia, la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados suscrita en 1951 y convalidada por 147 Estados y ratificado en 1967, mediante un protocolo que universaliza a todos sus miembros.
El canciller David Choquehuanca aseguró ayer que actuarán de acuerdo a lo que establece la legislación nacional, los convenios bilaterales y la normativa internacional.
Choquehuanca dijo, además, que se reunió con el canciller de Brasil, Antonio Patriota, antes de la aprobación del asilo que le propuso “hacer una auditoría jurídica para que puedan tener todos los elementos de análisis”.
21 JUICIOS EN CONTRA DE PINTO
Desacato contra exministro
Desacato contra el vicepresidente.
Desacato contra ministra Nardi Suxo
Desacato contra abogada Carrasco
Incumplimiento de deberes
Contratos lesivos al Estado
Incumplimiento de deberes
Desacato contra fiscal Marcelo Soza
Sedición contra ministra Nardi Suxo
Desacato y sedición
Asesinato
Incumplimiento de deberes.
Corrupción
Incumplimiento de deberes
Venta irregular de terrenos
Desbosque
Desbosque
Desbosque
Desbosque
Irregularidad en fondos de avances
Irregularidad en fondos de avances
«Lamento que se dé el asilo»
REBECA DELGADO / PDTA. DE DIPUTADOS
-¿Qué evaluación hace sobre la aceptación del asilo de Pinto ?
-Lamento que se haya concedido el asilo porque, de acuerdo a la normativa internacional, eso se da cuando hay una persecución política. En este caso, el senador Róger Pinto tiene varios procesos penales por delitos comunes por lo tanto, el asilo no debería haber correspondido.No sabemos qué información tendrán las autoridades de Brasil. Lo que están haciendo es beneficiar a que no se rinda cuenta en nuestro país por delitos comunes.
– ¿Van a cumplir con la entrega del salvoconducto?
El Ministerio de Gobierno y la Cancillería seguramente analizarán el tema del salvoconducto. Yo, como diputada, lamento de que no se haya considerado que, en el caso del senador Pinto, tiene delitos comunes no políticos y eso corresponde a la jurisdicción ordinaria de Bolivia. Lo cierto es que se tiene que cumplir además la normativa internacional
-¿Conformarán alguna comisión para que viaje a Brasil a tratar el tema?
Vamos a analizar. Lo que haremos es suministrar más información porque no podemos dejar que se estén tomando esas determinaciones y con una información tergiversada de lo que realmente acontece en nuestro país. Me voy a encargar de dar mayor información a Brasil para que sepan lo que realmente acontece.
-¿Cree que esta acción de Brasil va afectar las relaciones diplomáticas?
Creo que no afectará. Tenemos las mejores relaciones con América Latina, pero nos hemos dado cuenta de que no existe la suficiente información. Solo con mala información se puede dar esa resolución.
Brasil confirma asilo a Pinto y Bolivia aún espera carta oficial
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil confirmó la “concesión de asilo” para el senador Róger Pinto. La Cancillería boliviana asegura no tener comunicación oficial y se pronunciará, dice, sólo cuando haya una carta del país vecino. El debate gira sobre lo político y jurídico del hecho.
La Razón / La Paz
La confirmación del asilo fue emitida ayer viernes 8, mediante la nota de prensa 141. En el escueto comunicado, la Cancillería brasileña anuncia que decidió conceder el asilo al senador Pinto en base a las normas y la práctica del Derecho Internacional Latinoamericano, y del artículo 4, inciso X, de la Constitución Federal de Brasil.
Dicho artículo 4 se refiere a los principios que tiene Brasil con respecto a las relaciones internacionales; y, su inciso X señala el principio de la “concesión de asilo político”. El canciller David Choquehuanca, por la mañana, en conferencia de prensa dijo que con respecto al posible asilo a Pinto, hasta ese momento no había recibido ninguna comunicación oficial de Brasil.
Hasta el cierre de la presente edición, el Gobierno expresó dicho criterio: no recibió nada oficial. La responsable de prensa de la Cancillería, Consuelo Ponce, explicó que bajo el protocolo de relaciones internacionales, los únicos documentos válidos son los que llegan “en físico”.
Debate. Para la senadora por el MAS Gabriela Montaño, en la decisión brasileña de dar asilo político a Pinto lo que hay que ver es el funcionamiento de la “institucionalidad” del país vecino, a la que hay que respetar. Con respecto a si el asilo significa una condena del país en el tema de derechos humanos, Montaño apuntó que no se puede mezclar la decisión jurídica, de derecho internacional, con lo político del Gobierno del país vecino.
Para el senador de Convergencia Nacional Bernard Gutiérrez, en cambio, la decisión brasileña revela que ahora “hay convicción en la comunidad internacional del fin de la institucionalidad democrática en Bolivia. La inexistencia de un Estado de derecho y la violación de los derechos humanos” en el actual régimen. De los más de 20 procesos contra Pinto, señala Gutiérrez, al menos 12 son por el ejercicio parlamentario del senador, siendo usual la acusación por desacato.
La abogada Karen Longarik, por su lado, remarca el carácter político de la decisión del asilo. “Se concede asilo porque se considera que la persona es un perseguido político”. Ahora, una vez que el senador tiene procesos legales en su contra, lo que corresponde es que éstos prosigan y, luego, una vez que haya sentencias, se proceda a un trámite de extradición, señala Longarik.
Para el abogado Carlos Alarcón, el asilo a Pinto sólo confirma que “en Bolivia se ha criminalizado la vida política para fines de concentración y perpetuación del poder; que hay intención deliberada de eliminar toda disidencia política utilizando el disfraz de la corrupción, se usa fiscales y jueces como instrumentos de linchamiento político”, dijo.
Cancillería, sólo trámite
Embajadas
La carta oficial de concesión de asilo a Pinto primero debe llegar a la Embajada de Brasil en Bolivia; sólo de allí será remitida a la Cancillería boliviana; y ésta recién empieza el trámite correspondiente.
Obligación de dejar salir al senador opositor
El siguiente paso a una comunicación oficial de parte de Brasil de haber concedido el asilo político al senador Pinto, será el salvoconducto que Bolivia debe dar al político opositor para que sea llevado al país vecino.
El salvoconducto, explican fuentes de la Cancillería, es automático (no se lo niega) por ser Bolivia parte de tratados internacionales. Aunque siempre cabe la posibilidad, señala Longarik, de que un país lo niegue; lo cual, sin embargo, constituiría un auténtico estado de fricción internacional. El negar el salvoconducto, añade Alarcón, “sería una especie de vandalismo internacional, porque uno de los mayores bienes que debe cuidar un Estado son sus relaciones internacionales”.
En su conferencia de prensa, el canciller Choquehuanca aclaró que en el caso de una solicitud de asilo, el Ministerio de Relaciones Exteriores sólo hace de tramitador, pues, como señala su responsable de prensa, en rigor, por ejemplo, no es la Cancillería la que emite el salvoconducto, sino el Ministerio de Gobierno, a través de la Dirección de Migración. Por esto, el Canciller dijo que “cuando recibamos (la nota oficial) la derivaremos al Ministro de Justicia, de Gobierno, o de la Presidencia”.