En un testimonio brindado el pasado 16 de noviembre ante el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, el analista Douglas Farah incluyó a Bolivia entre los países con “actores estatales criminalizados” y alertó sobre la presencia iraní.“Estamos viendo la aparición de múltiples actores estatales criminalizados en América Latina, principalmente agrupados en la Alianza Bolivariana liderada por Venezuela, que ahora opera en conjunto con grupos de delincuencia organizada transnacional, actores regionales como Irán y grupos terroristas”, señaló.“Estas ´alianzas de conveniencia` entre los grupos altamente capacitados con habilidades complementarias, con los nuevos niveles de protección estatal que se ofrecen, presenta un panorama mucho más peligroso y volátil en el hemisferio”.“Estas franquicias operan en control de territorios geográficos específicos, que les permiten funcionar en un entorno relativamente seguro”.“Estados que tradicionalmente han tenido poco interés o influencia en América Latina se han convertido en actores importantes en la última década, sobre todo por invitación de los Estados autodenominados bolivarianos, que buscan establecer este bloque del ´Socialismo del Siglo 21`. Dirigido por Hugo Chávez de Venezuela, incluye a Rafael Correa de Ecuador, Evo Morales de Bolivia y Daniel Ortega de Nicaragua. (…) La alianza bolivariana ha formado numerosas organizaciones y alianzas militares, incluyendo una academia militar en Bolivia para borrar los vestigios de la formación militar de EEUU”.“Irán, identificado por las sucesivas administraciones de EEUU como un Estado patrocinador del terrorismo, ha ampliado sus alianzas políticas regionales, la presencia diplomática, iniciativas comerciales y programas militares, de inteligencia y de información a través del eje bolivariano”.“Las intenciones de Irán en la región han sido durante mucho tiempo un tema de debate, pero hoy en día existe una indicación mucho más clara disponible, tanto para la comunidad de inteligencia y los investigadores sobre el terreno, que el objetivo de la presencia de Irán en la región es doble: desarrollar la capacidad y habilidad para causar estragos en América Latina -y posiblemente en el territorio de los EEUU- si el gobierno iraní considera que esto es necesario para la supervivencia de su programa nuclear, y, para desarrollar y ampliar la capacidad de evitar las sanciones internacionales que son cada vez más agobiantes para la vida económica del régimen”.“Chávez y sus aliados han permitido a Irán (…) abrir servicios financieros, compañías de fachada y líneas navieras dedicadas a evadir las sanciones por su programa nuclear. Al mismo tiempo, Irán está llevando a cabo múltiples actividades mineras que benefician directamente a sus programas de misiles y nucleares en América Latina, sin transparencia y sin escrutinio público, mientras se mueve agresivamente para expandir las capacidades de recopilación de inteligencia y militares”.Pasaportes bolivianos para ciudadanos iraníes“Varios cientos de ciudadanos iraníes han recibido cédulas ecuatorianas o tarjetas nacionales de identidad, lo que les permite viajar a muchos lugares de América Latina (…). Ecuador, Venezuela, Bolivia y Nicaragua han concedido cientos de pasaportes a ciudadanos iraníes en sus respectivos países, liberando a las personas para viajar de manera casi imposible de rastrear”.Academia militar en Bolivia con apoyo iraní“Chávez ha adoptado como su doctrina militar los conceptos y estrategias articuladas en la guerra periférica y el Islam Revolucionario (…) Para arraigar aún más esta enseñanza y explícitamente para erradicar cualquier vestigio de la doctrina militar de EEUU en la región, Chávez y otros dirigentes bolivarianos, junto con Irán, han abierto recientemente una nueva academia militar para enseñar la doctrina militar bolivariana, que opera en Santa Cruz, Bolivia”.“El Interés de Irán en el proyecto, que apoya económicamente, se puso de manifiesto cuando el ministro de defensa iraní Ahmad Vahidi llegó a Bolivia para la inauguración de la escuela, a pesar de tener una notificación roja de Interpol publicada para su detención a raíz de su presunta participación en el atentado a la AMIA de 1994 en Buenos Aires. Su aparición pública en una ceremonia militar el día antes de la inauguración de la escuela desató un escándalo internacional y fuertes protestas de la Argentina, que había pedido a Interpol que emita la notificación roja. Vahidi tranquilamente salió de Bolivia”.“Como las relaciones entre el crimen organizado y los grupos terroristas madura en lugares como Venezuela, Ecuador y Bolivia, y las relaciones se construyen y se intercambian conocimientos, esto se convertirá en un reto mucho más complejo”.Testimonio completo de Douglas Farah