Espionaje. Evo lo condena afuera y lo ordena en casa; confirman infiltración a marcha indígena

Tramoya. Revelan datos de espionaje desde Moxos. Exdefensor y dirigentes dicen que es un hecho irrefutable que la policía Angélica Cáceres Quispe se infiltró en la columna indígena el 21 de septiembre de 2011 y fue quien agredió al canciller. Cuestionan al Gobierno su pose de superioridad moral.

Revelan datos de espionaje desde Moxos

DENUNCIA. Indígenas relatan que Aracena vigiló la octava marcha. Hay vigilia en Trinidad.

image EL DEBER, BOLIVIA



Foto: Villegas siguió la marcha a bordo de un jeep Nissan verde petróleo.

El destape de la infiltración de la cabo Angélica Cáceres en la octava marcha indígena (2011) es apenas la punta del iceberg en una trama cargada de incidentes de espionaje policial. Eso es lo que aseguran los dirigentes Adolfo Chávez y Fernando Vargas, basados en los documentos y fotografías de la movilización en defensa del Tipnis.

Chávez relata que hay evidencia de seguimiento policial encubierto desde el paso de la marcha por Santa Ana de Moseruna (Moxos) hacia Totaisal, y que el ahora general Alberto Aracena, comandante nacional de la Policía, vigiló a los marchistas y llegó a requisar a su grupo de avanzada cuando habían llegado a Limoncito (Ballivián), antes de Chaparina. 

“Salimos de Santa Ana de Moseruna a la 1:00. Avanzamos más de 50 km, de madrugada hacia Totaisal y en ese camino encontramos una vagoneta volcada con cuatro agentes de Policía. Nos estaban siguiendo”, cuenta. Chávez rememora que tras las negociaciones con el Gobierno en San Borja, adonde llegó el entonces ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, el seguimiento de vehículos de policías encubiertos, fotos y filmaciones, se hicieron evidentes. Identifica al exdirector de Régimen Interior Boris Villegas y al exdirector de Inteligencia Víctor Maldonado, a cargo de este seguimiento, que para Chávez es comparable con la política de espionaje de los servicios secretos de EEUU a sus ciudadanos.

Por su parte, Aracena dijo antes que él no estuvo en Beni el día de la refriega policial. Y recientemente ha instruido una investigación al caso de infiltración de la cabo Cáceres. Mientras que Maldonado ha preferido dejar que la Fiscalía explique lo sucedido a partir de sus investigaciones.

Vargas lo secunda y cuenta que Aracena le dijo que tenía “instrucciones de muy arriba” para que la marcha no pasara de San Borja, pocos días antes de la represión del 25 de septiembre. 

Amplían investigación

El fiscal general Ramiro Guerrero instruyó incorporar la denuncia de infiltración de la cabo Cáceres en la investigación del caso Chaparina, proceso que lleva 20 meses y no tiene avances sustanciales.

“Hay una comisión que lleva adelante esta investigación. Se ampliará, seguramente. Hay elementos que los fiscales deberán contemplar para convocar a declaraciones, todos esos elementos son nuevos”, sostuvo. Mientras que la fiscal beniana Wilma Blazz ratificó que está vigente la orden de aprehensión contra Vargas, Chávez y Pedro Nuni por un caso activado la semana pasada por dirigentes afines al Gobierno

CONFLICTO EN CIERNES 

CUARTO DÍA DE VIGILIA EN TRINIDAD

Las oficinas de la subcentral Tipnis son el parapeto de Chávez, Nuni y Vargas por la orden de arresto en su contra.

MAS ve que bloqueo afecta a Beni

El senador Eugenio Rojas aseguró que un bloqueo cívico por los indígenas solo afectará al departamento de Beni.

Movilización en La Paz

Activistas protestaron fuera de las oficinas de la Fiscalía paceña por la orden de arresto.

Cuestionan al Gobierno su pose de superioridad moral

Fiscalía mantiene apremio contra indígenas. Análisis. Dirigentes del Tipnis y la Cidob dicen que el gobierno es experto en armar casos con la ayuda de la Fiscalía y la Policía.

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EL DÍA, Santa Cruz

Los dirigentes indígenas Adolfo Chávez y Fernando Vargas rechazaron ayer las declaraciones del ministro de Gobierno, Carlos Romero, en el sentido que denunciar la existencia de una policía infiltrada "es inmoral" y señalaron que los videos y pruebas hablan por si solos y los presentarán como pruebas de descargo en el proceso que enfrentan por el supuesto secuestro del canciller David Choquehuanca el 21 de septiembre del 2011.

"Para hablar de moral hay que tener sangre en la cara", dijo Adolfo Chávez, líder de una facción de la Cidob, mientras que Fernando Vargas calificó el hecho de insólito, pues con tantas evidencias el Gobierno quiere imponer la mentira cuando todos saben que el supuesto rapto fue armado para después armarles un proceso con la ayuda de la Fiscalía y la Policía.

Presentarán pruebas. Por su parte Waldo Albarracín, abogado defensor de los indígenas, informó que existe un hecho irrefutable y fue que la cabo Angélica Cáceres Quispe se infiltró en la columna indígena el 21 de septiembre de 2011 y fue quien agredió al canciller.

El jurista, asesor de dirigentes que defienden el territorio indígena, mostró videos y fotografías en las que se ve a la policía vestida con polera amarilla y pantalón rosado forcejear entre la multitud para llegar al cuerpo del ministro de Exteriores. El Gobierno introdujo sus agentes de inteligencia para montar un falso escenario”, denunció Albarracín. Y encima poco después la condecora por su brillante actuación en la marcha.

Se mantiene orden de aprehensión. Mientras tanto en Sucre, el fiscal general del Estado, Ramiro Guerrero, dijo que se mantiene la orden de aprehensión contra los dirigentes indígenas Adolfo Chávez, Pedro Nuni y Fernando Vargas y dijo que "cuando se trata de aplicar la ley debe ser pareja".

En ese sentido, justificó la orden de detención porque ellos, como cualquier ciudadano, debieron presentarse a declarar a Trinidad, Beni, para responder a las acusaciones del dirigente de la Conisur, Gumercindo Pradel, sobre la presunta agresión en Gundonovia.

Sobre la jurisdicción de justicia originaria campesina que han pedido, Guerrero dijo que existe una denuncia abierta por la vía ordinaria y los acusados deben presentarse a responder.

¿Violencia y hechos fabricados?

Marcial Fabricano. EL expresidente de la Cidob fue flagelado brutalmente el 12 de mayo del 2009 en un encuentro de corregidores en Trinidad. Acusaron del hecho a militantes del MAS, pero no prosperó ninguna investigación sobre el hecho.

Secuestro del canciller. El Gobierno denunció que el  21 de septiembre del 2011, David Choquehuanca fue secuestrado por dirigentes indígenas que se dirigían a La Paz en la octava marcha en defensa del Tipnis. Se abrió un proceso penal.

Represión en Chaparina. El 25 de septiembre del 2011 los indígenas que se dirigían a La Paz en la octava marcha en defensa de la integridad del Tipnis fueron brutalmente reprimidos por agentes policiales. El caso también está sin esclarecer.

Agresión a Pradel. El 20 de junio del 2013 en un encuentro de corregidores realizado en Gundonovia, zona del Tipnis, el dirigente del Conisur, afín al Gobierno de Morales, fue agredido. Por esa razón han librado apremio contra líderes indígenas.

Punto de vista

Emilio Martínez

Analista Político

"Existe una inversión de los valores"

"Con estupor escuchamos al ministro Romero diciendo que denunciar la infiltración policial en la VIII Marcha Indígena es “una inmoralidad" como muestra curiosa de la inversión de valores  bajo el gobierno de Evo Morales. Nos recuerda la definición de kakistocracia hecha por Michelangelo Bovero, como al “gobierno de los peores”. Ahora quienes sufrieron la brutalidad policial en Chaparina pasan a ser criminalizados, mientras los organizadores de la violencia pontifican sobre la moral".