“Dictadura” mediática: Evo ahoga a “escaso 10% de medios independientes”

Conclusiones. Según la SIP, el Gobierno de Evo Morales atosiga con impuestos, retiro de publicidad y acusación política a los medios independientes de Bolivia. SIP revela compra masiva de medios por gobiernos.

Evo ahoga a “escaso 10% de medios independientes”

image Los Tiempos y Agencias

La nueva presidenta de la SIP, Elizabeth Ballantine, clausura la 69 Asamblea, ayer. – Efe Agencia.



El Gobierno de Evo Morales en Bolivia “continúa con su estrategia para implantar un nuevo paradigma de comunicación” con el que “intenta asfixiar al ya escaso 10 por ciento de medios independientes”.

La afirmación está contenida en el informe de conclusiones de la Sociedad Interamericana de la Prensa, que ayer clausuró su 69 Asamblea Ordinaria realizada desde el viernes pasado en Denver (Estados Unidos), donde, además, eligió como nueva presidenta a la estadounidense Elizabeth Ballantine.

Según el informe, el sistema del Gobierno boliviano aplica “el ataque verbal y la atribución equivocada de un rol político a medios y periodistas”, además, de un “aumento discriminatorio de supuestas obligaciones tributarias” y el “manejo discrecional de publicidad estatal en medios”.

La SIP citó, asimismo, “los crecientes rumores sobre la compra de medios a cargo de personas cercanas al Gobierno, la presencia de periodistas que sirven de propagandistas y de otros que,  abrazados a una aparente independencia, operan para distorsionar la realidad (…) y empujar a medios independientes a errores que son capitalizados por el Gobierno para sus ataques”.

Asimismo, la SIP llamó ayer a “enfrentar los embates” de los gobiernos de países como Venezuela, Nicaragua, Bolivia y Ecuador que intentan coaccionar a su prensa y debilitar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, “en particular la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la cual es blanco de ataques permanentes”.

También condenó el asesinato de 14 periodistas en Latinoamérica, durante el último semestre, tres de ellos en México, dos en Brasil, Colombia, Guatemala y Haití, y otros tres en Ecuador, Honduras y Paraguay.

La organización también fustigó “el acaparamiento de medios de comunicación por parte de gobiernos autócratas” y la aprobación de la Ley Orgánica de Comunicación en Ecuador, que, a su juicio, “sirven para controlar y censurar los contenidos de los medios”.

Presidenta de la SIP en Bolivia

La nueva presidenta de la Junta de Directores de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) es Elizabeth Ballantine, quien asumirá el cargo por un año en relevo del ecuatoriano Jaime Mantilla.

En su primer discurso, Ballantine pidió que los hispanos residentes en Estados Unidos se sumen a las gestiones para preservar la libertad de expresión, tanto en este país como en sus países de origen. “Queremos llegar a la diáspora latina en Estados Unidos, que ya tiene un impacto político, por ejemplo, en la elección del presidente (Barack) Obama”, comentó.

Ballantine, editora de The Durango Herald (Colorado), es hija y nieta de editores de periódicos. Su prioridad durante su año como presidenta de la SIP será “reestructurar a la SIP, comenzando por América de Sur”. Con ese motivo, Ballantine y sus colaboradores visitarán varios países sudamericanos en los próximos meses.

Esas visitas, explicó, serán para conocer la situación creada por “democracias dictatoriales”, es decir, gobiernos democráticamente elegidos, pero que usan medidas antidemocráticas para permanecer en el poder, como Argentina, Bolivia, Ecuador y Venezuela.

SIP revela compra masiva de medios por gobiernos

Denuncia presiones de gobiernos contra la prensa.

Problema. La Sociedad Interamericana de Prensa llamó a enfrentar los embates que intentan debilitar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos y critica la adquisición masiva de medios

EL DEBER

La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) criticó ayer lo que calificó de ‘embates’ de los gobiernos de Argentina, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Venezuela –entre otros- para coaccionar a la prensa de estos países, en los que, según la organización, impera una “cultura gubernamental de secreto”, y sus intentos de debilitar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos y en especial su Relatoría para la Libertad de Expresión. En respuesta, el Gobierno boliviano acusó a la SIP de defender la libertad de empresa y no así la libertad de prensa.

En el caso específico de Bolivia, la SIP opina que el Gobierno de Evo Morales “continúa con su estrategia para implantar un nuevo paradigma de comunicación” con el que “intenta asfixiar al ya escaso 10% de medios independientes”.

Precisamente el presidente Morales, en septiembre, reveló que en el país solo queda entre 10 y 20% de medios opositores, a los que calificó de “afines a la verdad” y no de afines al Gobierno. En 2009, en contrapartida, el mandatario afirmó que el 80% de los medios de comunicación del país “son mis opositores”.

Las denuncias de la SIP

En su declaración, tras el cierre de su 69ª asamblea general sobre el estado de la libertad de prensa en el hemisferio, la SIP afirma que la estrategia gubernamental en Bolivia se apoya en “el ataque verbal y la atribución equivocada de un rol político a medios y periodistas”, además de un “aumento discriminatorio de supuestas obligaciones tributarias” y el “manejo discrecional de la publicidad estatal en los medios”.

También se apuntó a “los crecientes rumores sobre la compra de medios a cargo de personas cercanas al Gobierno, la presencia de periodistas que sirven de propagandistas y de otros que abrazados a una aparente independencia, operan para distorsionar la realidad (…) y empujar a los medios independientes a errores que luego son capitalizados por el Gobierno para sus ataques”.

Más general, la organización criticó que en algunos países impere “una cultura gubernamental de secreto en la que, como ejemplo, los presidentes y funcionarios públicos de Argentina, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Panamá y Venezuela se niegan a ofrecer entrevistas o conferencias de prensa”.

El Gobierno responde

La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, en contacto con EL DEBER calificó a la SIP de institución obsoleta porque tiene una visión parcializada de las cosas. “Sus análisis tienen un enfoque político y opuesto a los procesos de cambio en los países de América Latina. Defiende la libertad de empresa antes que la libertad de prensa y entienden a la comunicación como un simple derecho de los empresarios”, manifestó la autoridad.

Dávila cuestionó la “doctrina de la SIP” por ser “de la década de los 70”, argumentando que tiene una visión reducida de la libertad de prensa y que confunde la noticia con un producto comercial en lugar de considerarla un derecho del pueblo.

“No pueden ser los propietarios de medios los que se constituyan en árbitros de lo que es la libertad de prensa. Eso no es correcto. Deben ser los pueblos, los ciudadanos los que comenten, analicen y evalúen lo que es la libertad de prensa y opinión”, acotó Dávila,que calificó de absurdos los rumores de la compra de medios masivos por parte del Gobierno o sus allegados en el país.

La 69ª asamblea de la SIP se desarrolló en Denver, Colorado (Estados Unidos), y asistieron 300 editores y periodistas

Para saber

Llamado a hispanos

La nueva titular de la SIP, Elizabeth Ballantine, pidió que los hispanos residentes en EEUU se sumen a las gestiones para preservar la libertad de expresión en ese país y sus países de origen.

Virus en la región

El periodista venezolano Jesús Sánchez dijo que en la región hay un virus de dejar que gobernantes democráticamente elegidos asuman el control de la información, de modo que el Ejecutivo sea la única voz.

CRÍTICAS A ESPIONAJE EN EEUU

El espionaje de EEUU fue duramente cuestionado en la cita.

Próximos encuentros

La SIP fijó reuniones para marzo de 2014 en Barbados y octubre en Santiago de Chile.

Diagnóstico acertado sobre el país

Álvaro Puente / Pedagogo

Ciertamente el Gobierno tiene con la prensa una actitud absolutamente antidemocrática, absolutamente controladora, privadora de libertad; nadie puede opinar nada contra el Gobierno o nadie puede ser crítico que no sea porque es financiado por instituciones ‘terribles’ o que no tenga fines ‘macabros’, no entienden que todos tenemos derecho a pensar diferente y a no creer que este es el mejor camino.

Ellos exigen que se cuente como lo dice el Gobierno, que lo valoremos como lo mejor y que el que no lo hace es enemigo del país, es enemigo del pueblo y merece la horca.

La Sociedad Interamericana de Prensa acierta en su diagnóstico sobre la situación aquí, donde no se entiende la libertad de prensa, de expresión, de información y se la intenta coartar y cortar.

Por otro lado es curioso la línea de estos gobiernos de atacar a medios, tenemos cadenas nacionales de televisión que se han comprado medios para que toda la información esté mediatizada, es una actitud absolutamente contraria al derechos fundamental de acceso a la información.

En fin, la sociedad debe tener los medios de saber cuál es lo bueno y lo malo