Víctimas. En el momento del accidente había 4 mil personas en el lugar.Argentina. Un auto que circulaba a demasiada velocidad. Un conductor borracho. Una curva que requiere atención. Un camping lleno de gente que intentaba disfrutar del domingo bajo el sol. Todos estos elementos se conjugaron ayer de la peor manera en Salta. Dos personas murieron, cinco resultaron heridas (dos de ellos de gravedad) y una familia quedó destrozada. Ese fue el trágico saldo que dejó un accidente que, cerca de las 14.30 de ayer, protagonizó con su automóvil un hombre que conducía en aparente estado de ebriedad.El hecho ocurrió en el camping de Quijano, un pueblo turístico ubicado 32 kilómetros al este de la capital salteña. Como cada fin de semana caluroso, el predio recibe cerca de 4 mil visitantes. Uno de los asadores estaba ocupado por un grupo compuesto por 17 personas, entre los cuales se encontraban los hermanos Jurado: Ana, de 25 años, y Juan, de 21. Todos habían llegado desde el barrio Alta Tensión de la capital salteña a bordo de tres autos y tres motos, y se encontraban terminando de almorzar justo en el vértice del camping por donde, a unos pocos metros, pasa la Ruta Nacional 51, que va hacia la puna salteña y luego hacia Chile.En un Fiat Uno rojo manejaba Jorge Omar Barrientos, acompañado por tres hombres mayores de edad. Bajaba por esa ruta a gran velocidad (según algunos testigos, a más de 100 kilómetros por hora) y perdió el control al entrar a la curva ubicada a pocos metros del camping. Al morder la banquina un montículo de tierra se transformó en una especie de rampa: el auto pasó por encima de la verja del predio y cayó encima de un Renault 11 blanco.El grupo de personas que estaban en el lugar sufrieron las consecuencias: los hermanos Jurado murieron casi en forma instantánea por los golpes recibidos, mientras que la hija de Ana, Ambar Valentina, de un año y medio, está internada y en “franca mejoría”, según indicaron los médicos. Rodrigo Tapia y el conductor del Fiat permanecen en grave estado. Los demás heridos no corren riesgo de vida. “Por suerte cayó encima del techo del otro auto, porque de haber seguido su loca carrera se llevaba puestas a más personas”, contó a Clarín Luis, un testigo de la tragedia (ver “Se agachó…”).En el auto que provocó el accidente viajaban cuatro ocupantes. El conductor y su acompañante están internados, pero los otros dos que viajaban en los asientos de atrás lograron escapar: aunque la gente que estaba en el camping primero los rodeó y trató de no dejarlos ir, lograron escabullirse en un descuido. Anoche eran buscados por la policía salteña. “No los dejamos ir. Los detuvimos aquí, pero después fue tanta la locura que aprovecharon la confusión para escapar”, le contó a Clarín Fabián, uno de los testigos. Todos los que presenciaron el accidente aseguraron que tanto el conductor como sus acompañantes, estaban borrachos.Fuente: Por Gustavo Ruiz – clarin.com