El jefe de la Fuerza Aérea aseguró que no se trata de sanciones. Decisión. Después del conflicto militar, los suboficiales y sargentos fueron enviados a otras guarniciones. Según el Comando de la FAB, se debió al cierre de una escuela.
Página Siete. La marcha inédita de los uniformados, el 29 de abril.
Página Siete / La Paz
La Fuerza Aérea Boliviana (FAB) determinó el cambio de destino de 97 militares de bajo rango que se movilizaron en abril, confirmó ayer el comandante de esta entidad militar, Víctor Hugo Meneses, quien, sin embargo, afirmó que actualmente se analiza las apelaciones de los traslados.
«Entre el 16 y 17 de abril, la EPTA (Escuela de Perfeccionamiento Técnico Aeronáutico) se cerró y el personal de 97 suboficiales y sargentos que están allá no pueden permanecer ahí, es necesario hacer un cambio”, aseguró Meneses a Página Siete.
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Este medio publicó ayer que la Segunda Brigada Aérea de la FAB de Cochabamba cambió de destino, el 5 de mayo, a 21 militares de baja graduación a diferentes unidades del interior del país, el mismo día que los suboficiales y sargentos decidieron retornar a sus unidades y suspender las protestas que iniciaron en abril por una igualdad de trato.
El comandante de la FAB informó que la emisión de cambios de destino no se trata de un castigo o represalia contra los uniformados por su participación en las movilizaciones.
«El cambio de destino se hace cada año en diciembre y se ejecuta en enero. Esta vez se decidió en abril, cuando la EPTA cerró, mucho antes del conflicto militar”, aseguró el jefe militar.
La nómina de los 21 suboficiales y sargentos a la que accedió este medio fue enviada el 5 de mayo, luego del conflicto.
Los militares que fueron trasladados no recibieron su cambio con satisfacción. Un suboficial que pidió no ser identificado contó que le entregaron su notificación para irse a Cobija (Pando) de La Paz la anterior semana y que tuvo que separarse de su familia porque no puede cambiar de colegio a sus hijos casi a mitad de año. «Nos están separando de nuestras familias (…). La vida es cara en las fronteras”, relató.
Al respecto, Meneses hizo énfasis en que cualquier militar que desee puede apelar su cambio de destino, sustentando problemas familiares o sociales.
«A la fecha se han revertido muchos cambios, pero no tengo la cifra y hay más solicitudes de rechazo que están llegando. No sé cuántas son en este momento”, señaló el jefe militar.
Pero el suboficial que fue enviado a Cobija dijo que el cambio fue inmediato, por lo que no tuvo tiempo de apelar la decisión de la FAB.
Los jefes militares, entre ellos el general Marco Antonio Rojas, anunciaron en más de una oportunidad que no se iba a sancionar a ningún militar. «No recuerdo que haya dicho eso”, dijo Rojas, quien preside la mesa de trabajo que analiza los retiros.
Mesa de trabajo en cuarto intermedio
La mesa de trabajo en la que se discutía los retiros obligatorios de 715 militares de bajo rango, sancionados en el reciente conflicto militar, entró en un cuarto intermedio desde el pasado 8 de mayo.
«Hemos cumplido con lograr que el 100% de militares retornen a sus unidades y que presenten sus solicitudes de reincorporación”, informó a Página Siete el general Marco Antonio Rojas, quien preside esta mesa de trabajo.
Precisó que hasta la fecha 430 sanciones quedaron sin efecto y que el resto (285) será debatido en cada fuerza de la institución castrense. «El viernes, el Comando en Jefe dará un informe final de cuántas personas han sido reincorporadas oficialmente. Hasta ahora cada caso se trata de forma individual”, explicó.