Familiares de los militares bolivianos de baja graduación están en alerta por las represalias que existen en contra de los efectivos, por lo que no descartan iniciar medidas.
Justicia Militar procesa a seis suboficiales
Protestas. Militares movilizados están acusados de ‘incitación’.
La Razón / La Paz
Los Tribunales de Personal de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y del Ejército enviaron los procesos sumariales de al menos seis uniformados de baja graduación que protagonizaron protestas en mayo al Tribunal Supremo de Justicia Militar, informó una fuente castrense.
Los suboficiales y sargentos de las Fuerzas Armadas (FFAA) iniciaron su movilización el 3 de abril y publicaron un anteproyecto de ley para descolonizar la institución, pero al no ser escuchados realizaron marchas inéditas en mayo. En respuesta, el Alto Mando Militar ordenó el retiro obligatorio de 715 efectivos movilizados, de los que retornaron 630.
Según una fuente militar, que pidió la reserva de su identidad, tras los procesos sumariales en contra de cinco uniformados de la FAB y uno del Ejército, que encabezaron las movilizaciones, se determinó enviarlos a la Justicia Militar, para que esa instancia determine su situación.
De acuerdo con la fuente entrevistada, los Tribunales de Personal de las dos fuerzas encontraron los indicios suficientes de “peligrosidad y culpabilidad” en contra de los seis sindicados, sobre quienes el Tribunal Supremo de Justicia Militar emitirá una resolución, ya que esta instancia sancionará por un delito que habrían cometido y por el cual estarían siendo procesados. Sin precisar las faltas por las que serán procesados, mencionó que una acusación será por “incitación”.
El ilícito está penado con privación de libertad, pérdida de años de antigüedad e incluso con la baja obligatoria de los militares, según advirtió la fuente entrevistada. El caso lo tomará una de las dos salas penales que existe en el Tribunal Militar en donde también existen fiscales que indagarán la causa de los militares sancionados.
Conforme a informes extraoficiales, ningún uniformado de la Armada Boliviana fue remitido a la Justicia Militar, ya que al único que se le ratificó el retiro obligatorio es al suboficial Lorgio Cartagena, debido a que no se reincorporó a su unidad. Él pasará a un proceso que durará hasta dos años.
Tras el conflicto que duró casi tres semanas, se crearon dos mesas de trabajo entre las FFAA y los suboficiales comando (representantes de los efectivos por años de antigüedad) para tratar el tema; uno que trata los 715 retiros y el otro los cambios a la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas (LOFA). Con esta labor se dejó a la fecha, sin efecto de la sanción a 630 efectivos que se reincorporaron a su unidad, previa presentación de su carta de reconsideración.
Faltan resolver peticiones
Proceso
A la fecha, el Tribunal de Personal de las tres fuerzas (FAB, Ejército y Armada) no definió la situación de al menos 79 efectivos, entre suboficiales y sargentos, que se movilizaron. Aún no saben si serán sancionados.
Amenaza
Una esposa de los militares de baja graduación, que pidió no ser identificada, informó que los familiares están en alerta por las represalias que existen en contra de los efectivos, por lo que no descartan iniciar medidas.