“El amanecer del planeta de los simios”: El odio habita en todas partes

Cuando parecía que la saga de El planeta de los simios había pasado a mejor vida, tras un remake muy poco inspirado y unas secuelas que cumplían a rajatabla el interés constante de tan solo seguir explotando la gallina de los huevos de oro, 20th Century Fox atacó de nuevo con El origen del planeta de los simios, superproducción veraniega en forma de spin-off, que contra todo pronóstico, logró conquistar el favor de la crítica y el público.'El amanecer del planeta de los simios'

El nivel era difícil de superar, más teniendo en cuenta que estas nuevas oportunidades, si lo consiguen, tan solo suelen acertar en el primer intento, acomodándose luego a utilizar la misma fórmula pero de una forma hipertrofiada. Sin embargo, El amanecer del planeta de los simios‘ se erige como un producto superior a su antecesora que no tiene miedo a tomar riesgos y, por tanto, logra un resultado muy por encima de la media de superproducciones que cada semana llegan a los cines.

Rick Jaffa y Amanda Silver, autores de la anterior entrega, demuestran una vez más una gran inteligencia a la hora de abordar el complicado material de base. Con unos conseguidos diálogos enfocados siempre hacia un público adulto, pero sin dejar de lado el concepto de entretenimiento, sostienen un argumento no excesivamente complejo que explota al máximo su sencillez. La trama se sigue con gran interés, intentando siempre ir hacia delante sin detenerse mucho a explicar los pormenores y haciendo que la narración tenga una gran fluidez. Directa y evolutiva, ‘El amanecer del planeta de los simios’ nunca tiene la necesidad de reincidir una y otra vez en el mismo punto y se conforma con coquetear con distintos géneros, desde la aventura a la ciencia ficción pasando por el western, en ese jugoso escenario post apocalíptico que les brinda el argumento.



La construcción y evolución de los personajes es un elemento crucial en una película de estas características, de lo contrario, sería muy difícil conseguir la suspensión de la incredulidad en escenas como las que ‘El amanecer del planeta de los simios’ ofrece. El enorme trabajo de guion y la estupenda puesta en escena de Matt Reeves, hacen que los espectadores puedan empatizar con un grupo de primates o que sean solemnes situaciones que, de otra forma, serian completamente disparatadas, como la de ver a un simio disparando con una metralleta a lomos de un caballo.

El director tiene parte de culpa en que esta secuela pueda ser tildada por méritos propios de un blockbuster inteligente. Su planificación de las secuencias es estupenda, dejando constancia que domina a la perfección los resortes de la acción y el suspense. Estos mecanismos están muy bien dosificados y resueltos, evitando el caos y apostando siempre por la suma constante de interesantes situaciones. Como buena cinta de entretenimiento, no pone todo el peso en un par de impresionantes secuencias y juega siempre con la idea de ampliar poco a poco esta lucha encarnizada entre humanos y primates.

'El amanecer del planeta de los simios'

César y sus congéneres se reparten el pastel

En este aspecto, cabe destacar el impresionante trabajo visual realizado con los simios. Si ya sorprendió el acabado del carismático César en 2011, tener por seguro que en esta entrega se ha pulido hasta límites nunca antes vistos. Lejos de conformarse con la simple recreación de unos personajes vistosos pero carentes de sentimientos, las emociones que logran transmitir los principales personajes con sus gestos y movimientos son dignas de admirar. El equipo detrás de los efectos visuales como los actores que han hecho posible el resultado, entre los que encontramos al admirado Andy Serkis, superan de manera sobresaliente el complicado trabajo que tenían entre manos.

El reparto «humano» queda un poco relegado a un segundo plano, aun así, cabe destacar el trabajo de todos ellos, especialmente de Keri Russell, Jason Clarke y Gary Oldman, los cuales en sus escasas escenas de lucimiento saben dotar de cierto peso a sus arquetípicos personajes.

De seguir vivo Pierre Boulle, autor de la novela que sirvió como base para la saga, estoy seguro que sentiría envidia por el resultado obtenido con esta película. Y es que, pese al elemento nostálgico que hace ensalzar a los cielos la transgresora en su época ‘El planeta de los simios’, este «amanecer» se convierte por méritos propios en la mejor entrega de la franquicia y una de las mejores películas de lo que llevamos de año.

Fuente: www.ecartelera.com