Vamos mal…

Susana Seleme Antelo

susana s 1) La gente está temerosa de un gran fraude el 12 de octubre. ¿Cuál es el riesgo, tomando en cuenta lo ocurrido en Venezuela con Maduro?

El riesgo es enorme, pero los candidatos de la oposición parece que no se dan cuenta pues no le reclaman al régimen de viva voz y al unísono las anomalías de la campaña, como la subordinación del Órgano Electoral a su libre antojo. Tan mal andan que aún no le exigen la entrega del padrón electoral. Ese es el signo inequívoco de la trampa que ya está montada, no ahora, sino desde la parodia del censo de 2012. Vamos de mal a peor y la campaña se reduce a una guerra de insultos entre todos que no aborda temas importantes, como la crisis de la justicia, que se ha convertido en una crisis de Estado, según opina el abogado penalista William Herrera, o la política de hidrocarburos, entre otras crisis.



2) Los candidatos hablan casi de lo mismo y todos dicen que van a defender la nacionalización, que no habrá gasolinazo y que no tocarán los bonos. ¿Cómo diferenciarlos?

Ese es uno de los problemas: no hay diferenciación, aunque Samuel Doria Medina sí planteó un tema crucial: la necesidad de inversión extranjera para la exploración y explotación de nuevas reservas de hidrocarburos. El régimen tergiversó a su antojo esa propuesta y ningún otro candidato de la oposición asumió el reto, siendo un tema estratégico. Ninguno ha pedido rendición de cuentas, concepto extinguido del lenguaje político hace 9 años, pese a denuncias de corrupción. De la crisis judicial no se ha hablado y tampoco de la necesidad de una reforma constitucional, que solo está manejando el régimen. Se sospecha que esa reforma contemplaría su reelección indefinida. Vamos mal y la oposición se ataca entre ella, sin darse cuenta de quién es el enemigo de la democracia

3) ¿Por qué crece Jorge Quiroga y por qué baja Juan del Granado?

Porque Juan del Granado no logra zafarse del ideario populista y autoritario de Evo Morales. Fue su aliado muchos años y eso pesa, porque la gente lo recuerda así. Sin los votos del partido de Juan del Granado (MSM) en el Congreso, Morales no hubiera podido manejar a su libre arbitrio los destinos de Bolivia los primeros 5 años del llamado “proceso de cambio”. En tanto, Quiroga crece porque tiene un discurso agresivo y suena fuerte, pero así como arremete contra Morales, arremete contra Doria Mediana. Si nos atenemos a la última encuestas, Quiroga no le quita votos al jefe del régimen y parece que se los quita a del Granado.

4) El tablero de la campaña en Brasil se volcó por completo. ¿Puede afectar esto a Bolivia?

¡Si ganara Marina Silva, afectará no solo a Bolivia, sino a toda América Latina: sería un cambio radical en la correlación de fuerzas! Se rompería el único baluarte poderoso del socialismo del siglo XXI. Venezuela y Argentina, en estado de coma, un Correa que no podría declararse presidente indefinido, y una Cuba que tiene la tutela ideológica, pero sin la ayuda petrolera venezolana, tendría más problemas. Dilma Rousseff tuvo la valentía de meter presos a todos los corruptos de los gobiernos de Lula, pero ya no es suficiente. En todo caso, Dilma y Marina están en empate técnico y habrá segunda vuelta. Se supone que el candidato Aecio Neves del Partido Social Demócrata Brasilero (PSDB) apoyará a Marina Silva. Se comenta que ella contaría entre sus colaboradores a José Serra, el candidato del PSDB que en 2010, dijo que la carretera por el TIPNIS, era “la rodovía da coca”.

El Día – Santa Cruz