Ta feo el asunto

Mario Saucedo W.LORO– Saucedo, ando medio asustao’.Que has hecho.Tengo un loro de esos habladorísimo, malo y bravo. El otro día le tiró una tratada a una persona que pasando por donde estaba le dijo hola periquito. El loro agachó un poco la cabeza y mirándolo de costao’ le largó una retahíla de esas palabras que les pegan a las buenas, que ya quisiera un fanático pa’ insultar al árbitro. Su pico se ha vuelto un basurero.Y pa’ que le enseñás.Yo le enseñé a decir buenos días, café, un par de piropos. Es más, uno de esos predicadores le enseñó el Ave María que lo recita a gritos todos los domingos, a las seis de la mañana. Si hasta creí que se iba a ser creyente. Además canta. Sus favoritas son las canciones de Paquita la del barrio, Rata de dos patas, Acábame de matar, Cosa de cobardes; y un montón más.Y pa’ empeorar el asunto, a mi vecina que cocina riquísimo y prepara con el alcohol unas combinaciones que te hacen recordar, olvidar, perdonar, y todo lo que termina en ar; se le ocurrió poner en su canchón cuatro mesas y todos los viernes atiende a clientes de esos que atan la luna con el sol. El loro se acomoda en un gajo de mango que justo da al patio de la fulana, y se desvela con todingos los trasnochaos. Ahí es donde el loro aumenta su vocabulario. Aparte de eso, le gusta escuchar las noticias a la una de la tarde. Sabe de chismes, robos, terrorismo, se aprende todos los nombres, y cuando de política se trata; es como que si fuera un analista. Vos le decís fulano y contesta tránsfuga. Mengano y dice corrupto. Zutano y responde miechiii. Hasta las caras reconoce. Cuando las elecciones presidenciales leía yo el periódico, el loro estaba en mi hombro, tras que vio la papeleta de sufragio con las fotos de los candidatos… Ay mamita e Cotoca, dijo.Estoy preocupao Saucedo. No vaya a ser que pa las elecciones que se vienen, pase por donde está el loro uno de esos políticos haciendo campaña, y el bicho este le diga alguna verdad. Como están las cosas, lo acusan de terrorista, separatista, vende patria; y va ser pa que termine en Palmasola desplumao, rodeao de condimentos, y en una olla de agua hirviendo.Ta feo el asunto.