Una faceta íntima del ganador del premio a la mejor película en el festival Sunscreen. El director abre su corazón en una entrevista donde cuenta detalles de su vida
Omar Villarroel está muy contento y no es para menos, puesto que hace unos días su película, se llevó el galardón a la mejor del festival internacional Sunscreen en Estados Unidos y en la que actuó Pablo Fernández, quien también estuvo presente en la gala de premiación.
Omar ha llamado mucho la atención de los medios últimamente, pero muy poco se sabe de su vida, por lo tanto te dejamos algunos detalles para que conozcas mejor al director, guionista y productor que se ganó la atención de artistas internacionales.
Es cochabambino de nacimiento, tiene 41 años, de los cuáles 15 los vivió en Estados Unidos. Explicó que su viaje se debió a la misma razón que tienen todos los migrantes, “hacer realidad sus sueños”. Además explicó la emoción que le causaba conocer otros países y culturas.
Tiene una hija a la que confiesa amar con todo su corazón, Micaela, quien está en Cochabamba cursando su primer año de universidad. Cuenta que no pierden el contacto y que cada logro de su primogénita lo llena de orgullo y le da motivos para seguir.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Además de su hija, su otra pasión es el cine, el que le ha costado mucho desempeñar allá puesto que el tema de los documentos y el idioma siempre han sido una barrera difícil de franquear, aunque actualmente tiene más problemas al pronunciar las palabras en español.
Esta película como todas las producciones le costó ‘sangre, sudor y lágrimas’, pero contó con un equipo de profesionales bolivianos y extranjeros de primer nivel que hicieron posible que el esfuerzo diera sus frutos y se llevaran un gran premio. Omar explica que Pablo Fernández fue una gran elección en cuanto a actores, pues admira el trabajo que este artista realiza y está muy contento de que haya podido ser parte de la película a pesar de su falta de tiempo.
Alegre, optimista y apasionado, así se confiesa este director que tiene todavía mucho camino por delante.
Fuente: sociales.com.bo