Jimmy Ortiz SaucedoNoticia: Renunció el último vocal del Tribunal Supremo Electoral (Hoybolivia.com 29-05-15).- El último vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Irineo Zuna, renunció el viernes al y acusó al presidente de la Cámara de Senadores, José Alberto Gonzales, por maltratar a los miembros del Órgano Electoral. El TSE quedó sin integrantes.Comentario: Lo que mal comienza mal termina, expresa un sabio adagio popular, que se confirma una vez más con la autodestrucción del Tribunal Supremo Electoral.La propia Constitución; elaborada tortuosamente, excluye a la sociedad civil de la elección directa de autoridades electorales. La elección se hace solo entre políticos, su mandato no emana directamente del soberano, como sucede con los otros «Poderes» del Estado. Es el único «Poder» que no se elige por el voto del pueblo.La Constitución permite que el Presidente meta su cuchara en esta institución, eligiendo de forma directa un representante al Tribunal Supremo Electoral. Este representante se transforma en el más poderoso del Órgano, y usualmente es elegido Presidente.La Ley del Órgano Electoral, sesgada y llena de declaraciones líricas, amplía inconstitucionalmente la injerencia del Presidente de la República sobre los Tribunales Electorales Departamentales, permitiéndole nombrar también un representante presidencial, potestad que la Constitución no le permite.La Ley del Régimen Electoral crea un montón de formas de «democracia», como si no hubiera una sola democracia, la democracia de La Carta Democrática Interamericana de la OEA. La democracia que aprobaron por unanimidad los políticos del continente, en la XIX asamblea de la OAE en Lima Perú, el 11 de septiembre de 2001. Por si alguien no lo recuerda, este documento tiene rango supra constitucional.Se crean 4 tipos de «democracia», con la velada intención de emborrachar la perdiz, permitiendo toda serie de interpretaciones sobre ella, incluso las más retrogradas.Los periodistas alzaron el grito al cielo con la promulgación de esta ley. La prensa registró el siguiente comentario: «Ley de Régimen Electoral desata críticas en la prensa.-El presidente Evo Morales promulgó este miércoles la ley del Régimen Electoral, que desató críticas entre la oposición y diversos sectores de la prensa nacional que califican a la nueva norma como lapidaria para la libertad de expresión (.) El presidente de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), Javier Zeballos y el de la Asociación Boliviana de Radiodifusoras (Asbora), Raúl Novillo, criticaron cada uno por su parte la nueva Ley que, indicaron, se constituye una mordaza para los trabajadores de la prensa en tiempos de elecciones» (Los Tiempos 30-06-10).La falta de una verdadera vocación democrática del gobierno, y la necesidad de mostrase como demócratas ante la comunidad internacional, lo hicieron diseñar un sistema electoral de normas, instituciones y funcionarios, siguiendo el modelo cubano-chavista que se aplica claramente en varios países de la región. El Tribunal Supremo Electoral fue y será parte de ello, un simple fusible del régimen, que se lo puede quemar cada que el caso amerite.La debacle de esta importante institución, que materializa y valida la democracia, es el resultado lógico y natural de lo que se planificó para ella, después de haber cumplido a cabalidad los objetivo para los que fue creada: el mantenimiento del régimen a cualquier costo, inclusive el de su propia inmolación. La defensa y el mejoramiento de la democracia, administrando elecciones limpias, jamás fue su objetivo real.Como lo he dicho varias veces, y hoy amerita repetirlo: solo hacer elecciones democráticas los demócratas, los autócratas hacen teatro. Esto fue exactamente lo que vimos en este Órgano Electoral, una verdadera pantomima plurinacional, para ser la careta «democrática» de un país que no lo es. Este es el tema de fondo, todo lo demás vino por añadidura.Yo me pregunto: ¿quién paga los platos rotos del TSE? ¿Qué pasa con el daño que se le ha hecho a la democracia y a su institucionalidad? ¿Quién paga los daños a los derechos políticos vulnerados de Rebeca Delgado, Eduardo Maldonado, Erwin Tupa y otros, por la exclusión de su candidatura? (Pagina Siete 20-01-15). ¿Quién paga los daños al pueblo beniano que no pudo votar en los 228 candidatos inhabilitados y los atropellos posteriores? (Los Tiempos 27-03 -15). ¿Quién paga los daños del grosero fraude en Chuquisaca? (Pagina Siete 13-04-15).Que la ciudadanía no piense que con el simple cambio de autoridades, en el TSE, esto se va a solucionar. Hay que hacer cambios de fondo en todo el sistema electoral: normas, instituciones y personas. Y sobre todo, que el gobierno se ponga el chip democrático, cosa poco probable.Aunque usualmente soy optimista, esta vez no lo soy, las «reformas» en el TSE serán más de lo mismo. Serán cambios para que no cambie nada, al estilo boliviano, solo para aplacar a la opinión pública ilustrada. ¿Por qué el MAS tendría que cambiar las cosas, si así está perfecto para ellos?Cuando no hay alma democrática, todo lo demás son cuentos chinos. El nuevo TSE seguirá cumpliendo su función: empernar al MAS eternamente en el poder, como lo ha dicho el oficialismo en reiteradas oportunidades (El Deber 13-04-15), hasta que el pueblo los soporte.