El Mandatario demandó “ajustarse los cinturones”. Dos expertos anticipan que lo peor recién se sentirá a partir del próximo año y que el Gobierno debe tomar sus previsiones.Página Siete /La PazDos expertos en economía afirmaron ayer que las declaraciones del presidente Evo Morales sobre ajustarse los cinturones demuestran que el gobierno reconoce la gravedad del contexto internacional debido a la baja del petróleo.El sábado, el Mandatario anunció que está alistando políticas de austeridad ante la baja del precio internacional del crudo y que en tiempos de pobreza, cuando las familias no tienen mucha plata, «a veces hay que amarrarse el cinturón”.El gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, y el expresidente del Banco Central de Bolivia (BCB), Juan Antonio Morales, advirtieron que lo peor se viene en 2016, por lo tanto, recomiendan al Ejecutivo tomar previsiones. «Las palabras del Presidente sorprenden cada día más. Esta nueva advertencia que hace está muy cerca de la realidad, porque el panorama de aquí en adelante no es nada favorable; por lo tanto, si hay algo que hacer, es leer bien la realidad para tomar las decisiones y en 2016 enfrentar un escenario que será mucho más grave que los últimos dos años”, consideró Rodríguez.El hecho de que Estados Unidos haya pasado de país importador a exportador, es un panorama que afecta al comportamiento de la economía boliviana, debido a la dependencia de la venta de gas natural, mencionó.Recomendó hacer ajustes en el gasto público y optar por medidas proactivas. Por ejemplo, un recorte en el gasto fiscal es una medida reactiva, pero la proactiva tiene que ver con planes que ayuden al sector productor, como la disminución de costos de producción, mejorar la productividad y la competitividad.Sugirió destinar más recursos al área de salud, educación, infraestructura y producción, y dejar de lado los gastos del ala política.El expresidente del BCB afirmó que en el país se está viviendo lo que ya se había advertido hace tiempo y que las repercusiones se sentirán en los ingresos.»Creo que es urgente reconocer qué medidas se pueden asumir para contrarrestar los efectos de la crisis internacional que ya se sienten en Bolivia y que serán más agudos el próximo año”, advirtió Morales.De acuerdo con el experto, el Gobierno debe revisar su programa de inversión pública, alguno de ellos innecesarios porque no aportarán en el crecimiento de la economía ni servirán para generar empleos. Es el caso de la construcción de aeropuertos o canchas, donde se destinan fuertes sumas.Paralelamente se debe crear un clima apropiado para que el sector privado también responda, y eso pasa esencialmente por revisar la política salarial, agregó.Entretanto, el subgobernador de Cercado, en Tarija, Jhonny Tórrez, manifestó ayer que la baja internacional del precio del petróleo es un tema que les preocupa, debido a que el 89% de sus ingresos dependen de la venta del gas natural. Al primer semestre de este año, los ingresos por el Impuesto Directo de Hidrocarburos (IDH), regalías y participación al Tesoro General de la Nación disminuyeron en 18,7% con relación a similar periodo de 2014, según el Boletín Estadístico de YPFB.Según datos oficiales, entre enero y junio de este año sólo se recibió 1.427,6 millones de dólares, pero en igual lapso de 2014 superaron los 1.758,1 millones de dólares (ver cuadro).