El analista Moisés Naim ha descrito tres escenarios posibles para el 6D venezolano: 1) la patada al tablero, mediante la suspensión de las elecciones o el fraude masivo y visible; 2) el milagro, ganando los comicios limpiamente; y 3) el baño de democracia, reconociendo la victoria opositora y suavizando las presiones internacionales.Sin embargo, existe un cuarto escenario a tener en cuenta: la probabilidad de que la maquinaria de fraude chavista se limite a reducir la ventaja opositora, impidiéndole la mayoría absoluta pero permitiéndole alcanzar la mayoría simple en la Asamblea Nacional, con el oficialismo a corta distancia.Esto le abriría el camino al PSUV para mostrarse como “democrático” hacia el exterior y al mismo tiempo le daría la posibilidad de retener el control del Legislativo mediante acuerdos prebendales con fuerzas políticas menores, a las que también podría inflar en votos el 6D.Dispositivo esencial en este plan que podríamos llamar de fraude parcial sería el amedrentamiento a la oposición a través del despliegue de los violentos “colectivos” chavistas el día de la votación, buscando reducir el flujo ciudadano hacia los centros electorales.Estos grupos paramilitares ya han sugerido que tomarán las calles en esa fecha “armados de amor” y el reciente asesinato de un importante dirigente de la MUD es una fuerte señal en ese sentido…[email protected]