Conflictos no cesan en los colegios: Padres y maestros ponen en riesgo inicio escolar

Aunque una gran mayoría de los estudiantes ya están inscritos, en algunos colegios ni siquiera se ha iniciado este proceso debido a la disconformidad de padres de familia, que se oponen a cambios instruidos desde la Dirección Departamental de Educación (DDE).

Por ejemplo en el colegio Sor María Cristina Pérez, ubicado en el 4to anillo del barrio Guaracachi, los padres de familia del turno tarde decidieron encadenarse en las puertas de este  establecimiento y sacarse sangre como medida de protesta en rechazo al traslado de sus hijos al colegio Luz del Mundo, ubicado en octavo anillo de la Pampa de la Isla.

Argumentan que el colegio está muy lejos y en una zona muy peligrosa para sus hijos, donde existen pandillas, maleza y no tiene iluminación. “Ya son dos semanas que estamos así y a las autoridades parece que no les importa el problema. Ellos dicen que el traslado se lo hace por reordenamiento, pero no se dan cuenta que están llevando a nuestros hijos más lejos cuando de acuerdo a norma deben estudiar cerca a sus casas. Son más de 600 alumnos los perjudicados”, manifestó Ángela Dorado, una de las madres de familia que tomó la drástica medida de encadenarse. Paralelamente otros padres del colegio Satélite Norte bloqueaban a la altura de la carretera al norte exigiendo que se habilite el turno de la tarde para inscribir a sus hijos. El hecho ocasionó malestar en los conductores generando congestión vehicular por lo que debió intervenir la policía.

Al respecto, el titular de la Dirección Departamental de Educación (DDE), Salomón Morales, indicó que estos cambios se deben a un reordeamiento solo para estudiantes de secundaria puesto que los centros donde actualmente estudian no reúnen las condiciones de infraestrutura para su formación técnica de bachillerato.“Si los padres insisten en quedarse, tendremos que reunirnos y ver la manera de que en un futuro próximo sí o sí sean trasladados”, dijo Morales a tiempo de garantizar el inicio de clases para el próximo 1 de febrero.

Sin embargo, tras haberse cumplido el plazo dado por el magisterio urbano  al Gobierno en demanda de un mínimo de 600 ítems, el sector sostiene reuniones y analiza la posibilidad de no iniciar las labores educativas e incluso otras medidas radicales.

Fuente: ATB, La Estrella del Oriente