Votar por el “Sí” es inmoral

schabibIsmael Schabib Montero*Se entiende por moral el conocimiento y la práctica de leyes, normas y buenas costumbres, para vivir en sociedad, practicando el bien y evitando el mal. La ley busca  justicia. Una ley o una norma que se elabora para beneficiar a una camarilla es “la ley del embudo”, como las que ha creado nuestro gobierno para favorecerse. Desde su llegada al poder el régimen masista buscó tener los dos tercios en el parlamento para convertirlo en un apéndice del Poder Ejecutivo y lo logró, con elecciones amañadas, sistema de carnetización  fraudulento, banco de votos…, TSE absolutamente dócil, trabas de todo tipo y persecución a los opositores, etc.La peor señal vino de parte del Sr. presidente Morales que declaró públicamente “le meto nomás (contra la ley) y que arreglen los abogados…”, es el colmo de la inmoralidad. Una persona que piensa así está descalificada  para participar en  política  porque es un peligro para la sociedad. Utilizar la mentira como aquello de que “gozamos de bonanza económica por causa de la nacionalización de los hidrocarburos” es también inmoral; lo cierto es que si no hubiéramos tenido gas en abundancia no hubiera habido para nacionalizar, el gas es mérito de los gobiernos de los partidos tradicionales que hicieron de este asunto una política de Estado; encontrar gas, certificar las reservas y negociar su venta, especialmente al Brasil, fue muy difícil, nos llevó más de diez años.En el  caso de la justicia, la oposición le sugirió al gobierno no llamar a elecciones judiciales para que no empeore, no quiso, pero no porque no lo entendió, sino porque quería tener un Poder Judicial totalmente dócil también, para lograr la re – reelección de octubre del 2014 con el argumento del TCP que el país había sido “refundado”, que las anteriores elecciones no contaban; ahora se queja de la mala justicia hipócritamente. Este gobierno no gobierna para el país, para su desarrollo, gobierna lanzando medidas que le aseguren mantenerse en el poder y nada más; señalar que la baja del precio de las materias primas no nos afectara es falso e irresponsable si ya es un hecho que nuestros ingresos han mermado en un 35% aproximadamente.Diez años en el poder es también una señal de que es saludable cambiar este régimen; el simple hecho de querer prorrogarse es una inmoralidad, es anti democrático. En el exterior se comenta cada vez con más fuerza de que somos un narco Estado, que los gobiernos del Foro de San Pablo hicieron de la cocaína un recurso estratégico para conseguir sus objetivos, que por eso tenemos de presidente en Bolivia a un cocalero… un ser humano que se envaneció al extremo en el poder, que se hace coronar como un Inca, que se hace amarrar las trenzas de sus  zapatos, que se jacta de no respetar la ley y se escucha así mismo por casi 6 horas hablando incoherencias, no está en sus cabales.Votar por el Sí, no solamente es apoyar la inmoralidad, es convertirse en un cómplice de los delitos que pudiera haber cometido este gobierno; son emblemáticos los casos del Fondo Indígena; la represión en Chaparina;  la matanza en Porvenir y otras como las de La Kalancha y el hotel Las Américas; la persecución política; el aumento en la producción de cocaína; el empeoramiento de la justicia; los casos de extorsión. La falta de previsión para atenuar los daños en el lago Poopó y otros como Laguna Colorada, desnudan el cuento de la “Pachamama”, que es solamente demagogia populista, etc.Los bolivianos empezaremos a recuperar nuestra dignidad e institucionalidad votando por el NO, evitando de esta manera que  gente descalificada que actúa delincuencialmente se refugie en el poder por más tiempo. Las personas que votaremos por el NO estamos de parte de la moral, una moral que tanto necesitamos para que impere la justicia en Bolivia.*Vicealmirante de la república de Bolivia