Karla Würth, el éxito está en no rendirse

Karla recuerda que mientras estudiaba derecho en la Universidad Privada de Santa Cruz (UPSA) tuvo la oportunidad de trabajar. “Eso me abrió los ojos a lo que quería, no esperé a salir de abogada para ejercer, e identifiqué mis fortalezas para luego proseguir con las maestrías”, señala.Curiosa y estudiosa, así se define esta joven tarijeña, que radica en Santa Cruz desde pequeña. Nada menos cierto pues se graduó con honores de la UPSA y obtuvo dos maestrías. Una en Jurisprudencia Comparada en la Universidad de Nueva York (EE.UU) y la otra en Asesoramiento jurídico de Empresas en la Universidad Gabriel René Moreno y Universidad Jaume I (Valencia, España), así como cursos de especialización en buen gobierno corporativo en Oxford, Inglaterra.Su desafío11 años atrás nació el consorcio Würth-Bedoya-CostaduRels, que creó junto a Fernando Bedoya y Mauricio CostaduRels. “Cuando empezamos teníamos mucho trabajo, pero todo comienzo es difícil y no sabíamos temas de administración. Muchas veces hubiese sido fácil tirar la toalla, pero asumimos el reto de crear empresa, con mucho sacrificio y trabajo, y creo que la receta de cualquier éxito está en no rendirse. La constancia y la persitencia fueron nuestros aliados”, afirma.Sostiene que “la mayor satisfacción de todo profesional es el deber cumplido”. Cuenta que desde niña sus padres le enseñaron a dar un poco más de lo que le piden. “Si te exigen 10 da 15, significa que no solo cumpliste sino que diste más”.En ese sentido ve al consorcio como una escuela para los jóvenes profesionales. “Tengo la oportunidad de guiar a abogados graduados y estudiantes de derecho, espero que ellos me superen, vayan más allá. En Santa Cruz y La Paz contamos con un personal de 24 personas”, agrega. La firma de abogados realiza mayormente asesoramiento corporativo y cuenta con una cartera activa de más de 65 clientes. El campo del derecho es amplio y explica que “la labor de todo abogado debería ser preventiva, no esperar a que llegue la multa y actuar conforme a ley”.“Los jóvenes deben apuntar al trabajo global, es el futuro. Con el internet no hay fronteras y el lenguaje es el inglés, es la moneda de transacción. Además, hay que dominar los programas de computación”.Retribuir a la sociedadKarla es miembro del directorio de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) y de la Fundación del Bosque Seco Chiquitano. “Participar en estas fundaciones es devolver lo que he recibido a la sociedad, mi educación y las oportunidades de trabajo, cuidando y ofreciendo mi tiempo y apoyo legal a lo más precioso, que es el medioambiente y la naturaleza”, dijo.Pero no todo es trabajo en la vida de Karla, es soltera y disfruta de compartir gratos momentos con su familia. “Si yo no me pongo de primero, nadie lo va hacer”. Realiza pilates y se desestresa con una manicure y pedicure con masajes. Conserva su figura gracias, asegura, a que no consume azúcar, ni en el té