Elizabeth Reyes*“El pueblo me silba, pero yo me aplaudo”. Esta frase tomada de la Primera sátira de Horacio, le calza muy bien a Evo Morales y a todo su gobierno. El pueblo les dijo NO el 21 de febrero y ellos han reaccionado con una virulencia típica del malperdedor y han tratado de escamotear el triunfo de la ciudadanía democrática. Empezaron con su teoría del “empate técnico”, y luego echaron mano al autoelogio “somos el único proyecto de país”, “hemos perdido la batalla, no la guerra”, “Evo es el único líder y debe seguir”, etc.De alguna forma, la campaña que no supieron ganarla en las ánforas, la quieren redireccionar todavía desde los discursos de plaza y desde los medios que les son adictos, para mostrar y demostrar que ellos son fuertes, tienen el Poder, y que el voto de los ciudadanos prácticamente no les importa nada.Y de alguna manera, este despliegue de argumentos les está dando resultados. La oposición no ha sido lo suficientemente estratégica en su comunicación y, de manera increíble, después de que el pueblo en mayoría absoluta dijo NO a la reelección de Evo Morales, pareciera que sigue el debate sobre si Evo se presentará o no el 2019.El filósofo español Fernado Savater escribió en una de sus columnas que “los líderes populistas son muy malos perdedores” y aun perdiendo elecciones “se resisten en todo lo que pueden al tránsito pacífico a la democracia”. Esto es lo que está pasando con Evo Morales, pero hay que advertirle desde ahora lo siguiente: los resultados del referendo no autorizaron la modificación del artículo 168 de la Constitución del Estado Plurinacional. Es decir, el ya no puede ser candidato democrático el 2019, de ninguna manera. La única forma en que el candidatee es si su partido y su mayoría congresal y el domino que ellos tienen en el Tribunal Constitucional hacen alguna interpretación espúrea, viciada y antijurídica de la Constitución. Y si eso ocurre, entonces nos tendrá a todos los bolivianos movilizados, oponiéndose a ese Golpe a la Constitución y al referendo de febrero que le dijo NO.Por eso es importante que la oposición y el Movimiento Ciudadano no entremos al debate que nos quiere proponer el MAS: no hay forma legal en que Evo Morales sea candidato. El abogado constitucionalista Carlos Alarcón lo explicó bien en uno de sus artículos. El 21 de febrero los bolivianos “decidimos de manera constituyente y vinculante” y dijimos NO “a la postulación de los actuales Presidente y Vicepresidente, en los mismos cargos, en las elecciones del año 2019 (segunda parte de la pregunta de la papeleta de votación, de alcance particular, cosa juzgada constitucional para el año 2019, aunque se cambiaría el artículo 168 con otro referendo esto regiría para el futuro pero no afectaría este efecto particular y concreto ya decidido el 21 F).La cosa es clara. NO es NO nomás. Democráticamente Evo Morales y Álvaro García Linera no pueden ser candidatos el 2019, salvo que opten por la vía golpista. Y ahí será otra cosa. Esperemos que no se atrevan.*Ex diputada y activista en derechos humanos