Todas estamos de acuerdo en que la cita con el ginecólogo es por lejos la que menos ansiamos y más nos cuesta agendar. Además de eso, no es lo mismo contarles y preguntarles a nuestras amigas todas las dudas respecto a nuestra salud sexual, que hacerlo nada más y nada menos que con un profesional -sí, puede resultar 10 veces más intimidante-.
De todos modos, una visita regular a este médico es esencial para tu salud sexual. Además, es indiscutible que será la persona que mejor responderá tus preguntas, así que es mejor que consultes absolutamente todo lo que necesites.
Para hacer esto más simple, aquí te respondemos algunas de las preguntas que seguro han pasado por tu cabeza pero que nunca te animaste a hacer:
#1 Temo que mi vagina huela mal y los demás lo noten, ¿es posible?
Pero si esto no te deja tranquila, tal vez quieras usar ropa interior de algodón, jeans poco ajustados y no usar nada a la hora de dormir, ya que para evitar el posible olor y mantenerse saludable, la vagina necesita una buena ventilación.
#2 ¿Es el color de mi flujo normal? ¿Y qué hay acerca de la cantidad?
Para empezar, el tono normal es blanco o color crema, y respecto a su cantidad, no debe desbordar tu ropa interior ni hacer que debas cambiarla más de una vez por día. La vagina produce este flujo como mecanismo de limpieza y autorregulación; puede compararse con la función que cumple la saliva en la boca.Si tu flujo tiene una consistencia muy diferente o un color que no es el normal, será mejor que consultes con tu ginecólogo, ya que puede ser una señal de infección. Tal vez no sea la situación más cómoda, pero debes tener en cuenta que no puede estar en riesgo tu salud sexual y que tu médico está más que acostumbrado a este tipo de consultas.
#3 Sufro de dolores molestos en la vagina, ¿a qué se debe?
Los dolores pueden deberse a múltiples razones, es normal tener dolor por vellos encarnados, principalmente si acostumbras depilar el vello púbico. Pero si el dolor es más agudo, y tu flujo no es normal, será mejor que consultes tu caso, ya que puede ser algo más serio.Los ginecólogos sugieren que esto puede ser producto de herpes vaginal u otrasenfermedades de transmisión sexual, pero debes tener una consulta antes de confirmarlo y es recomendable que no mantengas relaciones sexuales hasta saber qué es lo que tienes.
#4 Cuando tengo relaciones sexuales sufro de mucho dolor, ¿por qué?
Una razón muy común que hace que el sexo no sea algo placentero para las mujeres es la falta de lubricación, ya sea por los nervios u otras razones. A este respecto, una de las sugerencias de los ginecólogos es que la pareja use un lubricante y facilite el acto sexual. También es importante ir lo más despacio posible.Otra alternativa que puede ayudarte es practicar con un tampón; si bien es una sensación muy diferente, puede ayudar a preparar al cuerpo.Pero si ninguna de estas técnica te sirve, es preferible que visites a tu ginecólogo y le expliques tu caso puntual, lo comprenderá de inmediato y te aconsejará mejor que nadie.
#5 Nunca tuve un orgasmo, ¿debo preocuparme?
En la mayoría de los casos, más tiempo y experiencia alcanzarán para que de a poco lo logres, ya que necesitas entender a tu cuerpo y todo lo que implica llegar a eso.El apoyo y la compañía de la pareja en esto es esencial, y es muy importante que no ponga ningún tipo de presión en ti, porque eso lejos de ayudar, empeorará las cosas.
#6 ¿Las píldoras afectan mi vida sexual?
Algunas mujeres pueden notar una reducción de la libido ya que estos métodos eliminan la ovulación y por lo tanto no hay una liberación de hormonas previa. Si notas que esto está afectándote demasiado, será mejor que consultes por otras opciones.
#7 ¿El riesgo de embarazo es menor si tengo sexo la semana después de mi período?
Uno de los mayores miedos puede ser un embarazo no planeado, por lo tanto, muchas mujeres toman la mayor cantidad de precauciones posibles para evitarlo. ¿Por ejemplo? Tienen en cuenta el momento de su ciclo menstrual para acudir al preservativo o no.
Ahora bien, los ginecólogos no recomiendan confiar solo en esto, porque no hay un momento en que los niveles se reduzcan lo suficiente como para eliminar por completo la posibilidad de quedar embarazada.
¡He aquí algunas respuestas! Eso sí, esto no significa que debas dejar de visitar a tu ginecólogo porque el cuerpo de cada una de nosotras funciona de manera muy diferente y el papel del profesional es indispensable para cuidar tu salud y evitar cualquier inconveniente. ¡No te descanses!
Fuente: www.imujer.com