La recta final de la contienda electoral en Perú

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En la campaña, dos candidatos con posibilidades fueron eliminados por secretaría, mientras que la única certeza es que Keiko Fujimori es la favorita para ganar el domingo.

Hay una frase que por estos días se repite una y otra vez en Perú: las elecciones son impredecibles y siempre se deciden la última semana. Y esta vez no es la excepción. Porque cuando faltan sólo seis días para que se celebren los comicios presidenciales, la incertidumbre se ha instalado en la carrera por el Palacio Pizarro. Hasta hace poco ni siquiera había claridad sobre quiénes serían los candidatos impresos en el voto, ya que dos abanderados fueron acusados de una serie de irregularidades y terminaron siendo sacados de la carrera por el Jurado Nacional de Elecciones. Pero incluso en días recientes, una de las aspirantes con posibilidades fue acusada de manejo de fondos irregulares y además se abrió una investigación -aunque el sábado fue desestimada- contra el hombre que espera pasar al balotaje junto a Keiko Fujimori: el economista Pedro Pablo Kuczynski, conocido como PPK.



Hasta ahora, lo único claro es que Keiko -hija del ex Presidente Alberto Fujimori (1990-2000), encarcelado por corrupción y delitos de lesa humanidad- es la favorita para ganar en la primera vuelta de este domingo 10, ya que cuenta con poco más de 30% de intención de votos según todas las encuestas.

Sin embargo, nadie tiene certeza de quién obtendrá el segundo lugar el fin de semana. Tres candidatos tienen opción de ocupar ese sitial: PPK (16,8%), la abanderada de izquierda Verónika Mendoza (15,5%) y el socialdemócrata Alfredo Barnechea (8%). Mucho más atrás se ubica Alan García, a quien la prensa peruana ya descarta de plano.

Siguiendo la historia electoral peruana, cualquier cosa puede pasar. Por ejemplo, en 1990, Alberto Fujimori era un ingeniero de origen japonés desconocido para la mayoría en Perú, pero terminó pasando a una segunda vuelta en la que se impuso ante nada menos que Mario Vargas Llosa. También en las elecciones de 2001 Alan García regresó de su exilio y terminó en el balotaje contra todo pronóstico, aunque finalmente fue derrotado por Alejandro Toledo. Y ocurrió también en 2006, cuando el “outsider” Ollanta Humala irrumpió de la nada y estuvo cerca de llegar al Palacio Pizarro, algo que logró en 2011 al vencer a Keiko Fujimori.

La incertidumbre es tal que más allá de lo que digan las encuestas, el viernes se reveló que el Jurado Electoral Especial de Lima (JEE) abrió un “proceso de exclusión” contra García por supuestamente entregar dádivas durante una actividad proselitista, algo que está prohibido por la ley de Partido Políticos, que comenzó a regir en enero pasado. Lo mismo le ocurrió el miércoles pasado a Kuczynski, sin embargo, el sábado el JEE rechazó el pedido de exclusión contra su candidatura.

Por este delito ya fue apartado de la carrera el aspirante por la Alianza para el Perú (APP), César Acuña, quien en enero figuraba segundo en las encuestas. Algo similar le pasó al tecnócrata Julio Guzmán, quien a comienzos de marzo subió hasta el segundo lugar, pero fue sacado de la carrera por irregularidades en la inscripción de su partido. A su vez, una reciente petición de descalificación contra Keiko Fujimori por supuestamente haber cometido una infracción similar a la de Acuña fue desestimada por el JEE.

Las encuestas dadas a conocer este fin de semana revelaron que PPK ha perdido apoyo y que Mendoza ha ido ganando adeptos, mientras que Barnechea ha caído al cuarto lugar. La candidata izquierdista es una congresista de 35 años que en su momento militó en las filas del humalismo, mientras que Barnechea es un escritor que en los 80 fue militante del Apra y hoy se define como socialdemócrata.

Según dijo a La Tercera el analista político peruano Pedro Tenorio, “todo indica que el ‘vía crucis’ de estos comicios, caracterizados por una incertidumbre permanente, se prolonga hasta el domingo 10 de abril y en adelante. La polarización continuará porque esa es la característica de las elecciones peruanas. Principalmente la polarización fujimorismo-antifujimorismo, como ya se puede notar en el día a día electoral”.

Para el politólogo Carlos Meléndez, “el antifujimorismo está creciendo. Según Ipsos, el anti-voto de Fujimori está a punto de llegar al 50% de los peruanos, cifra inédita en las dos carreras presidenciales de Keiko Fujimori. El problema para el sector anti-fujimorista es que es fragmentado (sectores radicales, republicanos, de izquierda, de derecha) y tienen problemas para organizar su acción colectiva. No tienen liderazgos, ni partidos, ni ‘dueños’. No deciden si votar por PPK, por Barnechea o por Mendoza. Por lo tanto, aunque la corriente de opinión antifujimorista crezca, no resuelven aún los dilemas ‘logísticos’ para aprovechar ese ‘sentimiento antifujimorista’ activado para derrotar a Fujimori en las urnas”.

Los analistas señalan que Keiko Fujimori no tiene un camino fácil en la segunda vuelta, porque volverá a enfrentarse a un durísimo electorado “anti”. Eso le ocurrió en 2011 cuando fue derrotada por el antifujimorismo y no tanto por Humala. De hecho, para este miércoles, en esta semana decisiva, está programada una manifestación en contra de Keiko que se espera tenga una alta convocatoria. Pero aún nada está dicho.

Fuente: La Tercera