Eva Mendes, la actriz que cambió la alfombra roja por la familia

Eva Mendes, tras el desfile de su marca de ropa New York & Company, el pasado septiembre en Nueva York.La pareja de Ryan Gosling decidió detener su carrera en el cine para cuidar de sus dos hijas

“De pequeña quería ser monja hasta que me enteré de que no ganas dinero. Entonces decidí que sería otra cosa”. Esta frase es de Eva Mendes. Hablaba de sí misma cuando se llamaba Eva de la Caridad Méndez y era una joven latina afincada en Los Ángeles cuya obsesión era pagar las facturas de su madre. A los 12 años asistió a su primer concierto. Era el del cantante José Luis Rodríguez El Puma. Entonces estaba acomplejada porque tenía una boca demasiado grande y unas caderas demasiado anchas. Los años darían la vuelta a sus inseguridades y esos dos rasgos serían su pasaporte para convertirse en una sex symbol de Hollywood, donde conquistó al chico modosito con abdominales de acero, Ryan Gosling. Pero, desde entonces, como quien dice, desapareció del mapa.Dado que el actor está en la cresta de la ola y se lleva a los Oscar a su hermana, la gente se pregunta: ¿qué hace exactamente su novia y madre de sus dos hijas, además de vivir una discreta relación con uno de los hombres más deseados de Hollywood? Él ya dio una pista en su discurso como ganador del Globo de Oro, cuando agradeció a Mendes haberse encargado de las niñas y haber gestionado la muerte de su hermano durante el tiempo en que él rodaba La La Land. Muchos vieron amor, otros vieron machismo en esas palabras. ¿Había hecho la actriz lo opuesto a Emma Stone en la película y había renunciado a sus sueños para que él triunfara?La parte monja, desde luego, quedó atrás, pues de hecho Mendes se declara alérgica al matrimonio. No solo con Gosling, sino también con su otra relación larga, el productor peruano George Augusto. Pero no hay duda de que, a su manera, las tradiciones pesan sobre ella, al menos en lo que respecta a dar prioridad absoluta a la familia, sobre todo desde que nacieron sus dos hijas con apenas dos años de diferencia.Entonces decidió que nada de niñeras: que con dos abuelas y varias hermanas pensaba arreglarse y disfrutar de la maternidad. Que sus hijas hablarían español, que escucharían boleros y que tendrían claro que su sangre es cubana. ¿Una mujer chapada a la antigua? “No estoy segura de haberme retirado, pero quiero pasar este momento de manera especial. No me gusta que me quiten del mapa, pero esencialmente eso es lo que pasa con el trabajo (si tomas esta decisión). Creo que puede ser muy, muy sano si es algo que sientes que merece la pena. Ahora mismo, me siento afortunada de estar en casa con mis hijas y quiero aprovechar las ventajas que tengo”, aseguró a la revista Latina en una de las pocas entrevistas que ha concedido en los últimos años y la primera tras tener a su segunda hija.Ni que decir tiene que, con esta decisión, impuso también el matriarcado en el hogar Gosling-Mendes. No hay más que ver lo poco canadienses que suenan los nombres de sus hijas: Esmeralda Amada y Amada. Y para ellas desea la más normal de las infancias. “Nos guste o no, la privacidad va a ser muy difícil para Esmeralda”, explicó al blog Violet Grey. “Creo que es injusto, pero es nuestra realidad. Así que Ryan y yo decidimos bien pronto darle a ella toda la intimidad posible mientras podamos”, añadió.
Eva Mendes y Ryan Gosling, en un fotograma de
Eva Mendes y Ryan Gosling, en un fotograma de ‘Cruce de caminos’, película en la que se conocieron en 2013. CORDON PRESS
Pero, ¿qué carrera ha dejado atrás Eva Mendes? Su paso por el cine es, según se mire, tan machista como su presunta retirada al hogar (no rueda desde 2014). A pesar de tener películas tan destacables como La noche es nuestra (la que define como su mejor interpretación), Cruce de caminos (donde conoció a Ryan Gosling) o Holy Motors, de Leos Carax, sus papeles arquetípicos de latina explosiva ganan por goleada: desde Hitch a Ghost Rider pasando por A todo gas 2.Quizá por eso, porque ella siempre dijo que quería ser una latina que demostrara al mundo que se puede ser algo que la gente no espera, decidió rebelarse contra el tópico combinando la maternidad con el camino del éxito empresarial, igual que hicieron Salma Hayek o Jennifer Lopez. En el año que dejó el cine, Eva Mendes lanzó su línea de ropa a precios asequibles y para todas las tallas para la marca New York & Company, y también su aventura en cosmética económica pero de calidad bajo el nombre de CIRCA. Para sus productos suele ser su propia modelo. Una manera mucho más eficaz de mantener la imagen que ella quiere proyectar al mundo. Se entienda o no se entienda. Y el Oscar de Ryan Gosling ya llegará.Fuente: elpais.com