Tesis india, miopía militante

Gustavo L. Quiroga Mercado “Y los hombres disfrutan ser conducidos como manada de animales…” DostoievskiUn texto de pretensión revolucionaria (teoría de la acción) debe ser precedido por un estudio preliminar crítico antes de ser endilgado a adolescentes de criterio no formado. Sus propulsores no encontraron mejor texto catecismo que el de Fausto Reinaga: “Tesis india”. Colegiales reunidos bajo el denominativo de “tejedores de futuro” “debaten” ese ideario como verdades absolutas.José Félix Reinaga Chavarría puede ser tipificado con un adjetivo: entusiasta. Se entusiasma con Johann von Goethe, de su obra toma su seudónimo, “Fausto”; se entusiasma con el marxismo, se enrola en partidos políticos marxistas, reniega de estos y los califica de “marxoides”; el tercer entusiasmo es con el indianismo. Se le acusa de traicionar partidos políticos, de resentido social, de explotador, de burgués y de no ser indio. En la nota 15 de “Tesis India”, refuta dichas acusaciones, pero cuando intenta esclarecer su origen indio por línea materna prueba exactamente lo contrario, “Mi madre era india aimara, razón porque en Macha (pueblo de Tomás Katari, donde crían a Reinaga) no tiene pariente ni hay gente de su apellido, nací en Huahuanicala, orillas del lago Titicaca…”, no cita el nombre de la señora, Alejandra Chavarría Pérez (apellidos vasco y judío; por adopción o seudónimo: Aleja Katari). Reinaga, habla del otro; es amauta simulado.“Tesis India” es diatriba. Un ataque global, ataca la política, los partidos políticos; la literatura y a los literatos; la educación y los educadores, la alfabetización; a las universidades, al ejército, a los obreros; a los indios que no comulgan. Los muchachos tejedores de futuro, deben ser entusiastas para encontrar la tesis india en Reinaga. Afirmar que almacenaban alimento para cientos de años, que Cristo y Buda hablaban maya, que se superó a Einstein, se dominó la geometría (la rueda fue esquiva), etc., ya le descalifican. En el meollo, “Tesis India” plantea un retorno al socialismo Inca, un ideal idílico. Reinaga no hace ni un bosquejo de lo que fue ese imperio socialista, es más, el apelativo es prestado, en 1928 Louis Baudin publica “El Imperio Socialista de los Incas”.Es arenga: Pizarro encontró la primera república socialista del mundo, sociedad perfecta; la mística india provocaría el incendio universal; una ética cósmica, religión y filosofía cósmica, el hombre “parte indesligable del cosmos”; una Bolivia mestiza europea, otra Bolivia india. In extenso: “El socialismo (o comunismo) inka es la posesión colectiva de la tierra (comunidad indigenal) y sistema de vida colectivo (ayllu) regidos por la ley suprema y universal” (ley cósmica, ama llulla, ama sua, ama khella). Todo es cósmico y colectivo; irreal. La consigna: volver al socialismo inca sin explotación (anestesiada), sin desocupación, ni miseria, ni hambre; revolución india aterrizando, en el imperio socialista de los incas el indio pudo ser esclavo, un ente reducido a cifra, un nudo en un quipus. En “Tesis india” no se describe ese edén; en “El imperio socialista de los incas” sí; Baudin acude a fuentes bibliográficas, etnológicas, arqueológicas, es una obra “sine ira et studio”, en el imperio socialista inca todo está regulado y registrado, sólo la enfermedad y la muerte escapan al control del Estado. El inca es “el amo que debe alimentar a sus mascotas”, el indio, la manga de hombres felices. Una contra tesis, y otra conclusión: “Es fundamental tomar acciones si no deseamos volvernos sujetos de un nuevo imperio inca”.Los Tiempos – Cochabamba