¿Todos leemos y escribimos?

Manfredo Kempff Suárez

Esta vez no vamos a criticar lo que ha dicho S.E. en su viaje a Nueva York durante su participación en la reunión sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Como presidente no podía menos que afirmar que “Bolivia es un ejemplo en el mundo” y que los progresos políticos, económicos, sociales y culturales, no tienen parangón posible. Él lo ve así y ya está; para qué contradecirlo si no va a servir de nada.

Lo que sí es algo que nos hace dudar mucho y que vale la pena exponer es la afirmación de que nuestro país sea “un territorio libre de analfabetismo”. Esto no se debe solamente a lo que afirmó S.E. en EE.UU. sino que es algo que se repite desde todas las esferas del Gobierno y al parecer la población lo cree. Yo tengo mis dudas – aunque quisiera no tenerlas – de que Bolivia esté entre las cuatro naciones más alfabetizadas de Latinoamérica y el Caribe.



Se afirma desde el Gobierno que nuestro país está sólo por debajo de Uruguay, Argentina y Cuba en alfabetización. Quiere decir que estamos por encima de Chile y Colombia, por encima de México y Perú; significa que nuestra situación en cuestión de leer y escribir ha sido admirable porque hace más de una década los bolivianos éramos unos analfabetos completos. Y no se trata de ironizar ni mucho menos, porque quien afirma que Bolivia está en este estado excepcional es nada menos que la UNESCO, que no es poco decir.

El programa cubano de alfabetización “Yo sí puedo”, se lanzó en nuestro país el 2006, cuando se suponía que el analfabetismo era una tara terrible, pero resulta que para el 2008, nada más que dos años después, la UNESCO afirmó que Bolivia ya estaba libre de analfabetos, que solamente un 2.9% no sabía leer y escribir. Esto ha tenido que ser o un error de la UNESCO o algo tan extraordinario que sería el mayor logro del MAS y habría que reconocérselo. Y agradecerle a Fidel de paso. Es que si sólo un 2.9% es analfabeto, ¿por qué hay tanta gente en el campo que no sabe leer? ¿O la medición ha sido solamente en las ciudades?No vamos a poner en duda que el programa “Yo sí puedo” haya sido un éxito. Ahora bien, ¿la gente que aprendió a leer y escribir entenderá lo que lee? Porque leer: “Yo amo a mamá” o “Evo es mucho tipo”, no es haber superado el analfabetismo. Si el 97% de los compatriotas están alfabetizados, quiere decir que pueden leer un libro y entenderlo o leer una noticia en el periódico y comentarla. ¿Habremos llegado a tanta maravilla en este Gobierno? Esperemos que sea cierto.