El presidente de la CNI, Horacio Villegas dijo que se espera entregar el documento a los candidatos presidenciales para que contemplen en sus planes de gobierno, las recomendaciones desde el sector industrial.
Horacio Villegas, presidente de la CNI (centro) con altos ejecutivos de la institución. Foto: CNI
La Paz, 12 marzo (ANF) .- La Cámara Nacional de Industrias (CNI) presentó su propuesta de política industrial, que plantea entre otros aspectos, la reposición del Ministerio de Industrias para impulsar el desarrollo de la manufactura que se traza pasar del 16% a más del 20% en su aporte al Producto Interno Bruto (PIB) hasta el 2030.
El documento que será entregado a los candidatos presidenciales para que tomen en cuenta las recomendaciones del sector industrial en sus planes de Gobierno pretende atacar problemas estructurales que han frenado el crecimiento industrial y han derivado en mayor informalidad.
La apuesta es que en los próximos años las exportaciones industriales representen el 40% del valor exportado del país, mientras que la industrialización y la consolidación de industrias exportadoras se traduzcan en el empleo formal y digno que represente al término de esta estrategia en un 40% de todo el mercado laboral.
El presidente de la CNI, Horacio Villegas afirmó que el país se cerró creyendo que viviría por siempre de los ingresos por exportación de hidrocarburos y minerales, que se comían el 85 al 90% de los ingresos.
“No hemos querido pensar que se nos acabará el gas y los minerales o pasarán de moda o bajarán de precios –que parece pasará- y hay que acomodarse (…). Hemos perdido el tiempo y eso es lo más grave porque el tiempo no se recupera”, señaló.
Villegas cuestionó acuerdos de exportación con países como Nicaragua, Cuba y Venezuela, que no han funcionado. “Hay que pensar en hacer algo más serio con la Unión Europea, Estados Unidos, con el Pacífico”, dijo.
“El ejecutivo de los industriales dijo que la elaboración de la “Propuesta de Política Industrial para Bolivia” tardó un año en elaborarse sobre el análisis de la situación del sector y los indicadores de productividad, competitividad, comercio exterior, tema laboral, entre otros factores.
“Lo habíamos hecho pensando en esta etapa electoral; sabíamos cuando eran las elecciones y es el momento de aportar a la discusión, planteamos cambiar la visión de lo que es industria, porque la industria es creatividad, es software, alimentos orgánicos, cereales andinos, cadenas y nichos específicos”, dijo.
Dijo que sí antes se pensaba que el producto industrializado era enlatado, a hora es al revés. “¿Cómo hago para llevar una chirimoya fresca a alguien del hemisferio norte?, eso implica otras tecnologías, tipos de cosechas en tiempos diferentes, temas genéticos, sistemas de riego, logísticas eficientes, todo es muy complejo”, explicó.
Inversiones
En cuanto a las inversiones dijo que es un tema de competencia de quien da mejores condiciones que van más allá de los impuestos porque tienen que ver con servicios de comunicación, caminos, mejores acuerdos comerciales para exportar, entre otros.
“A mí no me preocupa tanto que las industrias que están aquí se vayan como lo que ya ha pasado, que no están llegando inversores extranjeros grandes a poner industrias grandes, eso me preocupa más porque el que viene de afuera va a encontrar mejores condiciones en otros países”, aseveró.
Apuntó que el sistema laboral también influye al momento de evaluar el sistema laboral, que en criterio de Villegas en el país es muy rígido. “Sin posibilidad de despedir, sin previsibilidad, no se sabe cuánto va a subir el salario mínimo es como una tómbola unos dicen 20%, otros 40%, es poco serio”, dijo.
Parte de la previsibilidad del industrial dijo que esta recuperar el poder adquisitivo del salario que contempla la tasa de inflación. “Pero cuando uno llega de afuera es muy difícil entender a este país”, señaló.
Villegas subrayó la necesidad de contar con un Ministerio de Industrias que se avoque específicamente al sector, pues actualmente el Ministerio de Desarrollo Productivo tiene diversas competencias que no le permiten constituirse en un verdadero aliado desde el Estado para la dinamización del sector.
La propuesta que tiene más de 100 páginas, plantea recomendaciones de política denominadas “neutrales”, otras de alineamiento comercial y laboral, también las denominadas selectivas, las últimas apuntan a responder a las problemáticas de la industria boliviana.