“Mesa se va”

Editorial de Esto también sucedeEvo Morales dijo ayer en una entrevista que Carlos Mesa, después de su derrota el 20 de octubre, se va a escapar. Y quien no crea en la opinión de Morales puede remitirse a lo afirmado hace dos meses por Julio Aliaga Lairana, inicialmente partidario de Mesa y conocedor de las internas en CC. Es lo más probable: Mesa no se quedará en Bolivia y tendría todo listo para irse a España. ¿Y qué hará su bancada? Muchos de ellos ya han sido militantes del MAS. Hay casos concretos como Eduardo Maldonado, ex senador masista, que ha sido parlamentario de casi todos los partidos políticos con representación parlamentaria en los últimos tiempos. Hay por lo menos 10 candidatos a parlamentarios de Mesa que ya han trabajado para Evo, incluyendo los casos de los postulantes a primeros senadores por Santa Cruz, Vania Sandoval y Eduardo Muñoz, o Xavier Jordán por Cochabamba.No tenemos ninguna garantía de esa bancada y mucho menos de Mesa, quien ha pactado con Evo reiteradas veces (ver indultos del 2003 y 2018 por ejemplo). Existe un alto riesgo de que gran parte de esa bancada vuelva a darle los 2/3 al MAS. Morales acaba de recordar que fue Mesa quien le solicitó una reunión para pedirle trabajo como embajador de Bolivia en Unesco, algo confirmado por los archivos de prensa. Mesa tampoco ha tenido la valentía de explicar las varias denuncias de corrupción y se esconde bajo el argumento de guerra sucia.Aunque no nos guste, es evidente según las encuestas serias que Evo Morales gana en primera vuelta. Ha consolidado su voto duro y seguramente se le agregará de 2 a 3% del voto en el exterior y otro tanto del voto rural profundo, no medido en los sondeos.Mesa no tiene ya donde crecer. Un análisis de la migración del voto publicado ayer en El Deber establece claramente que el voto de Ortiz muy difícilmente podría transitar hacia Carlos Mesa.El voto de Ortiz está fuertemente basado en un proyecto nacional moderno, pero también en la propuesta única y clara de avanzar hacia un proceso de federalización, comenzando con la federación de las atribuciones que otorga la autonomía.Mesa sigue vendiendo humo como en La Haya, generando falsas expectativas sobre una segunda vuelta imposible. Lo real es que, en estas condiciones, estamos ante un voto eminentemente parlamentario. De ahí la importancia de elegir bien a quienes harán la resistencia democrática desde el Legislativo, algo que los masistas reciclados en las listas de Mesa no pueden llevar a cabo.