El exministro fue imputado por daño económico, incumplimiento de deberes, delitos contra la salud pública, entre otros.
El exministro de Salud, Marcelo Navajas, no suscribió ningún contrato de compra de los 170 respiradores, presuntamente con sobreprecio, sólo firmó una nota que disponía la agilización del proceso de adquisición por la emergencia sanitaria que había en el país, afirmó este jueves a Página Siete su abogada Rosario Canedo.
“Sobre la firma, sólo suscribió una sola que era una nota en la que se disponía la agilización del proceso de compra por la emergencia sanitaria por el coronavirus que se tiene en el país, pero no firmó ningún contrato para la compra de esos equipos”, dijo Canedo.
La exautoridad pasó la noche del miércoles en una celda judicial, la Fiscalía lo imputó por siete delitos: daño económico, incumplimiento de deberes, delitos contra la salud pública, conducta antieconómica, malversación, uso indebido de influencias y contratos lesivos al Estado.
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Tanto la defensa de Navajas como la parte querellante esperan que en las siguientes horas se desarrolle la audiencia de medidas cautelares, tras la cual se puede determinar su detención preventiva.
“Lo han imputado con una serie de delitos por lo que no se tiene tipicidad, no se tienen los elementos configurativos del tipo penal, los han tipificado porque sí. Ninguno de los delitos tiene justificación alguna, porque un delito debe adecuarse al tipo penal, aquí no se adecúa, pero veremos qué pasa en la audiencia cautelar que se espera que se realice en el transcurso de las siguientes horas”, indicó.
Aseguró que su defendido es un profesional que siempre trabajó en el sector privado y que aceptó el cargo de ministro porque es neumólogo y consideró que sus conocimientos y su experiencia podría cooperar con la población. “El no actuó con dolo”.
“Entonces, cuando le presentan un estudio sobre estos ventiladores y como se requería por la urgencia sanitaria que se tiene en Bolivia, él dispuso la compra inmediata, firma una nota que agilice la misma y ordenó a que se sigan los procedimientos. Además se tiene un decreto supremo que sí le autorizaba a hacer adquisiciones por invitación directa”, afirmó Canedo.
Sobre la oferta de Cosin, firma que propuso la venta de los mismos equipos a 12.500 dólares y no a 28.000 como fue comprado cada respirador, afirmó que al exministro nunca se le presentó esa propuesta y que cuando se hizo el pedido se vivía un panorama de alta demanda de equipos a nivel mundial, por lo que había que hacer una adquisición inmediata.
La abogada dijo que Navajas le informó que sí tuvo contacto con uno de los técnicos que hacía el seguimiento de los equipos, pero no se involucró más ni se fijió quiénes trabajaban en el el ministerio desde las gestiones pasadas, como es el caso del director jurídico Fernando Valenzuela. Canedo señaló que su defendido «respetó» la fuente de trabajo del funcionario, al igual que la de otros porque Navajas formaba parte de un gobierno transitorio.
Sobre el contacto que tuvo con el cónsul de Bolivia en Barcelona, David Pareja, la abogada aseguró que lo contactó mediante la Cancillería para que el diplomático verifique que la empresa existía.
Fuente: Página Siete Digital