Brasil debe asumir una mayor responsabilidad en la lucha antidrogas en Bolivia, porque el 60% de la cocaína boliviana termina en territorio brasileño, afirmó este domingo el encargado de negocios de Estados Unidos en La Paz, John Creamer.»Bajo el principio de responsabilidad compartida, le toca a Brasil asumir mayor responsabilidad porque es el mercado principal para la cocaína boliviana», afirmó Creamer, el funcionario de mayor rango diplomático en La Paz, pues ambos países carecen de embajadores desde 2008, informó el diario Página Siete.El presidente izquierdista Evo Morales expulsó a fines de ese año al embajador estadounidense, acusándolo de apoyar un supuesto complot de derecha, mientras que Washington respondió de igual manera por razones de reciprocidad, por lo que Creamer asumió la responsabilidad diplomática.Creamer, quien termina su misión, sostuvo que Brasil debe asumir un mayor rol en el combate al narcotráfico, porque «la mayor parte de la cocaína va rumbo a Brasil, país que señala que el 60% de la droga que entra a su territorio es de Bolivia».Agregó que para Estados Unidos «la droga que sale de Bolivia no es un problema, pues menos del 1% de las incautaciones que se hacen en mi país es de procedencia boliviana. El 95% sigue siendo cocaína que proviene de Colombia».Según datos de Naciones Unidas, Bolivia produce unas 115 toneladas de cocaína al año, mientras que el gobierno logra incautar unas 29 toneladas, de las que entre 40% y 50% son de procedencia peruana.Brasil considera que un 60% de la cocaína que sale de Bolivia va a su territorio, 20% va a Argentina y 20% a Chile. En el caso brasileño, de ese 60% de cocaína que le llega de Bolivia, cerca de la mitad se queda en Brasil y el resto termina en Europa.Brasil ya comenzó a involucrarse este año en la lucha antidrogas boliviana, con asistencia técnica para un plan de monitoreo de cultivos de coca, de las que hay 31.000 hectáreas, también con ayuda de Washington.La principal asistencia antidrogas para Bolivia nacía de Estados Unidos, aunque la ayuda bajó gradualmente, desde los 32 millones de dólares en 2006 hasta los 10 millones en este año.Bolivia es el tercer productor mundial de cocaína, después de Perú y Colombia, según la ONU.AFP