Hay resistencia armada en Cobija y las FFAA avanzan hacia la ciudad

Suman 20 muertos. De Porvenir 18 y en la toma militar del aeropuerto 2 más.

Dialogo sigue frágil y Prefectos irán a Pando.

Quintana aseguró que el Prefecto de Pando será detenido por desacato. Militares en el aeropuerto obligaron a periodistas a volver a La Paz.



LA PRENSA

Luego de más de 24 horas sin poder salir del aeropuerto de Cobija y pasada la medianoche de ayer, los militares comenzaron el operativo para tomar el control de la capital.

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Fernández advierte de muchos problemas si los soldados intentan tomar la urbe

SOLDADOS AVANZAN POR COBIJA EN MEDIO DE RESISTENCIA ARMADA

Vandalismo: personas ven algunos comercios que fueron saqueados en Cobija el viernes

La Prensa y agencias.- Luego de más de 24 horas de que el Gobierno dictara el estado de sitio en Pando y de soportar la resistencia de algunos grupos con armas de fuego, militares comenzaron en las primeras horas de hoy a tomar control de Cobija.

El director del Hospital General de Cobija, Alberto Sequeiro, dijo a las 02.00 de este domingo que había visto soldados fuera del aeropuerto Aníbal Arab y apostados en zonas de la ciudad.

Un periodista radicado en Cobija, quien prefirió mantener su nombre en reserva, indicó a La Prensa que en la tarde habían llegado dos aviones Hércules con hasta cuatro tanquetas y militares. Agregó que a medianoche escuchó unos vehículos pesados que se desplazaban por la calle cercana al Hospital Roberto Galindo, que por lo general es transitada por motocicletas.

Otro reportero de televisión confirmó, a las dos de la madrugada, que los soldados se enfrentaban a tiros con francotiradores apostados en las inmediaciones del aeropuerto de la ciudad. «Se escuchan tiros lejanos y cercanos y están llegando tropas por aire».

Sin embargo, una fuente de la Prefectura dijo que todo estaba tranquilo, que no había avances de tropas, pero que de vez en cuando se escuchaban disparos y petardos.

El vicepresidente del Comité Cívico, Ricardo Shimokawa, precisó que no conocía la presencia de tanquetas, pero sí de vehículos militares livianos.

Ayer, los soldados no pudieron salir de la terminal aérea. —adonde llegaron los ministros de Salud, Ramiro Tapia, y de la Presidencia, Juan Ramón Quintana— debido a que en las cercanías había francotiradores.

Hasta el cierre de esta edición (02.40), La Prensa no pudo confirmar esa información con algún jefe castrense. Ayer, el prefecto Leopoldo Fernández advirtió que si las tropas intentaban hacer cumplir el estado de sitio y salían del aeropuerto podía «haber muchos problemas».

Aseguró que los militares no han tomado el control de la ciudad y que la medida de excepción sólo se cumple en inmediaciones del aeropuerto.

El viernes, Fernández aseguró que no se acatará la medida y pidió resistencia civil. Ayer, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, dijo que el Prefecto será detenido «donde se encuentre» por desacato al estado de sitio.

Saqueos

Un despacho de ATB informó que el sábado varias personas quemaron las instalaciones de ABC que en días pasados habían sido tomadas por las juntas vecinales.

La noche del viernes, desconocidos asaltaron dos armerías. Una fue Santa Elena (en la calle Teniente Coronel Cornejo) y la otra, del coronel de Policía Raúl Méndez, en la plaza principal de Cobija.

Además, canales de televisión informaron que hubo ataque a negocios de inmigrantes del occidente. El ministro de Gobierno, Alfredo Rada, dijo que 15 personas fueron detenidas por saqueo.

Ráfagas

Shimokawa hizo énfasis en que la gente no acata el estado de sitio. Agregó que recibió información de que hubo disparos en algunas zonas pero que no la confirmó. Según un periodista de Televisión Boliviana que está en Cobija, la madrugada de ayer se escucharon ráfagas de ametralladoras y detonación de algunos petardos.

Al parecer, explicó el presidente de la Cruz Roja de Pando, Dulfredo Cárdenas, en otros sectores aledaños al aeropuerto hay gente armada y mimetizada con civiles desarmados, aunque aclaró que ayer no escuchó tiros por el lugar. Él se trasladó, en tres oportunidades, a la terminal para recuperar el cadáver de un civil fallecido el viernes —el pastor evangélico Tony Rivera— cuando los militares tomaron control del sitio.

Además pereció el marinero Ramiro Tiñini Alvarado (18), por el impacto de una bala calibre .22 que entró por el tórax posterior derecho y le atravesó un pulmón y el corazón, reveló ayer el examen forense practicado en el Hospital de la Corporación de Seguro Social Militar (Cossmil) de La Paz, donde fue depositado el cuerpo.

Este sábado fue internado en el nosocomio de Cossmil el soldado Sandro Quispe Mamani, quien fue herido con una bala calibre .22 en el brazo izquierdo.

El viernes inicialmente se conoció que seis personas resultaron heridas en la toma del aeropuerto; sin embargo, ayer, el director del Hospital General de Cobija, Luis Alberto Sequeiro, confirmó que se atendió a cuatro personas con heridas de bala.

Sin poder salir

Tapia reconoció que él y otros representantes de esta cartera que llegaron con insumos médicos no han podido salir del aeropuerto debido a que, en la tarde, «todavía es peligroso porque aún hay ráfagas de tiros esporádicos».

«No hemos llegado al hospital (Roberto Galindo), no es muy lejos, hay gente, francotiradores, en diferentes lugares y no se puede hacer un tránsito libremente para hacer este tipo de tensión».

A unos 500 metros de la terminal, dos grupos, de unas 30 personas cada uno, cortaron el paso para impedir que los militares se trasladen a la ciudad. La gente montó barricadas.

La situación perjudicó las tareas de ayuda. Tapia pidió cordura y que dejen a los médicos trabajar. El defensor del Pueblo, Rafael Vidal, dijo que los médicos no pueden socorrer a la gente que huyó al monte en el enfrentamiento de Porvenir debido a que a la orilla del río hay francotiradores. La presencia de éstos imposibilitó a un grupo de normalistas que se encuentra cerca del río Tahuamanu salir del lugar.

El ministro Quintana aseguró que el Prefecto de Pando será detenido por desacato.

Rada habla de 30 muertos en Porvenir

El ministro de Gobierno, Alfredo Rada, dijo ayer que los muertos en Porvenir pueden superar la treintena, aunque no dio más detalles.

Rada habló durante una conferencia de prensa en la que indicó, también sin dar más detalles, que ayer se habían recuperado otros diez cuerpos. Exigió al Congreso garantizar una investigación transparente e imparcial de lo sucedido y calificó al prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, de un genocida culpable de la «masacre» y de «un delito de lesa humanidad».

El jueves, un grupo de 500 campesinos se dirigía en camionetas desde sus comunidades hacia Cobija para participar en un ampliado de apoyo al Gobierno; sin embargo, no pudieron continuar debido a que, indicaron, en la vía, empleados del Servicio Departamental de Caminos hicieron una zanja con ayuda de maquinaria pesada.

Cuando los colonos se aprestaban a continuar a pie fueron emboscados presuntamente por trabajadores de la Prefectura y simpatizantes cívicos que portaban armas de fuego.

Según el Ministro, lo sucedido en Porvenir es la peor masacre en tiempos de democracia. «Cada hora nos vamos dando cuenta de la magnitud de la masacre ocurrida».

Aseguró que los hechos en Pando superan lo ocurrido en octubre de 2003 en El Alto, cuando 68 personas murieron.

«En comparación de la población de El Alto y la población de Pando se van a dar cuenta de esto que decimos».

Periodistas

Algunos periodistas de La Paz denunciaron ayer que las tropas militares apostadas en el aeropuerto Aníbal Arab, de Cobija, los obligaron a volver a la sede del Gobierno minutos después de haber llegado a la capital pandina.

Los reporteros se trasladaron a Pando en un avión militar Hércules a las 17.30 y llegaron a la capital cerca de las 18.30. Entre los trabajadores de prensa había un reportero gráfico de un medio impreso, un reportero de la red televisiva PAT y otro de ATB.

En el grupo también había representantes de la prensa internacional. «Unos minutos estuvimos en el suelo pandino —dijo un fotógrafo— y nos sacaron luego de escuchar tiroteos y ver movimiento de tropas».

Agregó que fueron obligados a subirse al avión y regresar a La Paz debido a que los militares tenían planeado un operativo para tomar la ciudad y hacer cumplir el estado de sitio dictado el viernes en la noche.

Ayer cerca de la medianoche, durante una conferencia de prensa en el Palacio Quemado, el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, fue consultado al respecto por una periodista.

La autoridad se excusó de responder e indicó que le corresponde al Ministerio de Defensa dar un informe sobre ése y otros operativos que se realicen en el departamento con miras a retomar el control y hacer cumplir el estado de sitio.

En todo caso, destacó que la medida de excepción dictada por el Gobierno ha traído algo de tranquilidad a Cobija, que «en las últimas horas estuvo asediada por saqueadores, vándalos y masacradores» que responden a las órdenes del prefecto Leopoldo Fernández y a los dirigentes cívicos.

Ayer, el vicepresidente del Comité Cívico de Cobija, Ricardo Shimokawa, desmintió que se haya contratado sicarios para atacar a los campesinos.

«Oiga, por el amor de Dios. Los sicarios fueron contratados por el Gobierno. Estábamos desarmados (…) Todo es absurdo».

Aseguró que tienen como prueba una convocatoria de los campesinos en la que se pide a las bases a marchar con armas a la capital del departamento.

Pidió la presencia de observadores internacionales para que «vean lo que realmente está ocurriendo en esta ciudad».

 

CONALDE CONDICIONA EL DIÁLOGO Y SE VA A PANDO

EL DEBER

Decisión. Tres prefectos y cuatro dirigentes cívicos se reunieron ayer en Santa Cruz. Advierten que si hay un muerto más, en cualquiera de los cinco departamentos, se romperá la negociación con el Gobierno

Henrry Ugarte A. | [email protected]

Expectativa. Los miembros del Conalde se reunieron ayer durante cinco horas en el hotel Buganvillas; después se leyó la resolución en el Palacio Prefectural

El Consejo Nacional Democrático (Conalde) condicionó anoche la reanudación del diálogo con el Gobierno a que no haya más muertos ni heridos en ninguna de las cinco regiones que demandan la devolución del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) y rechaza el nuevo texto constitucional, pero además decidió trasladarse a Cobija para expresar su solidaridad y apoyo a una región que ya perdió cerca de una veintena de vidas humanas.

La decisión del Conalde fue calificada por el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, como un apoyo abierto al prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, quien «propició la masacre de ciudadanos bolivianos y ahora está actuando al margen de la ley», declaró.

El prefecto de Tarija, Mario Cossío, en representación del Conalde asistió el viernes a una reunión con el vicepresidente de la República, Álvaro García Linera. Después de sentar las bases para encaminar una salida a la crisis, ambos sectores decidieron declarar un cuarto intermedio hasta las 17:00 de hoy.

Ayer, Cossío informó de sus acciones a los miembros del Conalde, que se reunieron durante cinco horas en el hotel Buganvillas, y decidieron que la misma comitiva chapaca, que inició el diálogo con el Gobierno, vuelva hoy a La Paz; eso sí, siempre y cuando no haya más muertos ni heridos.

El presidente del Conalde, Rubén Costas, denunció que con la ocupación violenta en Cobija el Gobierno ha agravado la crisis nacional, porque el estado de sitio, la represión y el amedrentamiento se han vuelto una constante. «El estado de sitio y la represión militar son las pruebas irrefutables de la decisión totalitaria del masismo», dijo Costas.

Según la agenda del Conalde, hoy continuarán las reuniones de evaluación en Santa Cruz y se definirá la hora del viaje a Cobija; sin embargo, del traslado a la capital pandina no participarán los líderes cívicos, porque volverán cada quien a sus regiones para seguir de cerca la aplicación de las medidas de presión, que no serán levantadas hasta nuevo aviso.

Para el Gobierno, según el ministro Rada, las opciones de encontrar una salida a la crisis política y social que vive el país a través del diálogo se mantiene intactas, por lo tanto, aguardarán hoy en La Paz al equipo negociador que representa al Conalde.

El prefecto tarijeño, Mario Cossío, expresó su optimismo sobre la reunión de esta tarde con el Gobierno. «Vamos a sostener esta última oportunidad para darle una salida pacífica a los problemas que vive el país, y el único camino en democracia es el diálogo», dijo.

La resolución de Santa Cruz

– Denuncia. Ante la comunidad nacional e internacional: pese a que el representante del Conalde, Mario Cossío, se sentó a dialogar con el vicepresidente Álvaro García Linera, el Gobierno continuó con su plan de ocupación militar y violenta en Cobija.

– Demanda. Que se inicie una investigación seria, que establezca las responsabilidades sobre el genocidio contra el pueblo pandino, que cuente con la participación de los poderes públicos del país y de organismos internacionales que garanticen la imparcialidad.

– Advertencia. Si hay un solo muerto o un herido más en las circunstancias actuales, se producirá un rompimiento de toda posibilidad de diálogo.

– Viaje. Los gobernadores y prefectos de los departamentos decidieron trasladarse a la ciudad de Cobija para expresar la solidaridad y el apoyo al pueblo de Pando. Sin embargo, el traslado está sujeto a un nivel de coordinación que se establecerá en las próximas horas para conseguir los medios logísticos; los líderes cívicos no participarán de este viaje.

Un cruce de propuestas

Según se conoció ayer en la reunión del Conalde, en el encuentro de la comitiva tarijeña con el vicepresidente Álvaro García Linera, ni siquiera pudieron abordar los temas de fondo como el nuevo texto constitucional, el IDH o el proceso de las autonomías.

Mientras el Gobierno propuso que se liberen los campos petroleros y devuelvan las instituciones públicas tomadas, los autonomistas insistían en que se cumpla el punto sentado por el propio Gobierno: un diálogo sin condiciones. Hoy también tocarán el cese de la violencia en Pando.

 

LOS MUERTOS SIGUEN SALIENDO DE PORVENIR

Luto. Los cuerpos salen del río Tahuamanu o son encontrados en medio monte

Tres cadáveres más fueron rescatados ayer de las inmediaciones de Porvenir. Los cuerpos de los campesinos no fueron llevados a la morgue del hospital Roberto Galindo de Pando y no han sido contados entre los 18 que llegaron desde el jueves hasta allí.

Ayer, la Federación de Campesinos de Pando hizo público un comunicado en el que informaba sobre nueve fallecidos, 24 heridos y más de 106 desaparecidos, que suponen que aún están escondidos en las cercanías de Porvenir, están heridos o fueron alcanzados por las balas cuando intentaban cruzar el río Tahuamanu y sus cuerpos aún no han sido recuperados.

Según el cónsul boliviano en Brasilea, población aledaña a Cobija, José Luis Méndez, el Gobierno ha evacuado a casi medio centenar de heridos en las últimas horas.

Médicos del Galindo informan de que por su sala de emergencias han pasado 16 muertos y más de 40 heridos. Dos de ellos tuvieron que ser operados, pero se encuentran fuera de peligro.

Méndez asegura que, luego de las muertes del jueves, hubo una negociación entre él y los parlamentarios de Podemos Róger Pinto y Pablo Bravo, en la que les propuso una tregua basada en tres puntos: renuncia del prefecto Fernández, renuncia de la presidenta del Comité Cívico, Ana Melena, y la liberación de las instituciones tomadas. Asegura que no recibió respuesta hasta hoy.

La situación es tensa en la región del enfrentamiento. Una fuente consultada en Porvenir asegura que los pobladores tienen miedo de que los habitantes de Filadelfia asalten el lugar para tratar de vengar a sus muertos. En el municipio masista mantienen un bloqueo de caminos.

La violencia también se trasladó a Riberalta, ciudad beniana desde donde venían parte de los caídos. Los pobladores quemaron la casa del alcalde de San Pedro, Pablo Bravo, a quien identificaron como el cabecilla del reclutamiento de riberalteños para llevarlos a enfrentarse a Pando. Por su parte, el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, aseguró que los militares ingresarán a la zona de Porvenir a intentar rescatar a los campesinos que aún se encuentran en la zona.

Los muertos del jueves

1.- Celedonio Bazoaldo

2. Alcides (nn)

3. Arnoldo González

4. Bernardino Racua

5. Diter Tupamattí

6. Alfredo Céspedes

7. Félix Roca

8. Alfonso Cruz

9. Norma Montero

10. (NN) Dumay

11. Agripino Vargas

12. Roberto Rodríguez

13. Hernán Justiniano

14. Pedro Oshiro

15. Wilson R. Mejía

16. Wilson Castillo

17. Johnny Cori

18. Abdiel NN

«Mi hijo no se merecía esa muerte»

Desde Guayaramerín, Martha Shiguekuni Cáceres no puede contener la angustia ni el llanto por haber perdido a uno de sus seis hijos en la retoma militar del aeropuerto de Cobija.

«Mi hijo no se merecía esa muerte. El sólo fue al aeropuerto a pacificar a la gente que estaba enfrentada. Él era muy bueno. Si alguien estaba enfermo, él buscaba remedios para ayudarlo. Yo soy evangélica. Todo lo dejo en manos del Señor, Él sabrá hacer justicia y nos dará fuerza para seguir adelante. Aquí todo el pueblo se ha sentido conmovido con la muerte de mi hijo. Lo han nombrado mártir de esta lucha autonómica», señaló.

Luis Antonio Rivero Shiguekuni (54) era pastor evangélico de una iglesia de Cobija desde hace tres años. Era casado y tenía dos hijos de 13 y 15 años de edad.

Según la mujer, ayer a las 14:30 entregaron el cadáver y esperan que en el transcurso de hoy puedan trasladarlo de Cobija hasta Guayaramerín para poder velarlo y enterrarlo. Los residentes de Riberalta en Santa Cruz expresaron su solidaridad con la familia. /A.C.