Un debate imprescindible

Un debate de alto nivel transmitido en cadena nacional de radio y televisión sería el mejor colofón del proceso previo al referéndum.

Los Tiempos

Editorial



Una de las muchas agrupaciones que desde las bases mismas de la sociedad han asumido la promoción del rechazo al proyecto de Constitución Política del MAS ha tomado una iniciativa que bien vale la pena respaldar. Ha propuesto que al cerrarse las campañas previas al referéndum del próximo domingo se realice un gran debate nacional entre el presidente Evo Morales y el ex vicepresidente Víctor Hugo Cárdenas.

Sugiere que el representante de la causa del NO sea Cárdenas por varias razones, la principal de ellas que es el único líder de talla nacional que desde un principio, desde que se inició el proceso de reforma constitucional, ha mantenido una posición firme y diáfana sobre el tema. Considera, asimismo, que es el que con más vigor y solidez ha cuestionado cada una de las etapas de ese proceso y lo ha hecho con la autoridad moral que le da toda una vida dedicada a la inclusión de los indígenas y a la defensa y perfeccionamiento de la democracia.

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Siendo Morales y Cárdenas los dos más sobresalientes líderes de origen indígena y al mismo tiempo los principales exponentes de las dos opciones entre las que los bolivianos tendremos que elegir, no habría mejor contribución a la reflexión colectiva que ese debate.

Tal ocasión sería especialmente útil para los promotores de la propuesta oficialista pues, como no se cansan de afirmar últimamente, estiman que las campañas por el NO se basan en un cúmulo de falsedades. Un debate nacional sería la mejor oportunidad para despejar esa y otras dudas.

La propuesta es también pertinente porque hasta ahora las campañas de ambos lados han incurrido en la banalización de los temas de fondo, lo que no contribuye a que el voto de la ciudanía en uno u otro sentido esté inspirado en una profunda meditación. Tienden a imponerse en cambio las consignas rara vez respaldadas por un análisis del contenido del texto constitucional.

Lamentablemente, pese a lo buena que es, es poco probable que la propuesta sea aceptada. Es que nunca el presidente Morales se mostró inclinado a la confrontación de ideas y no parece posible que ahora haga una excepción, menos si una de las características del debate que se plantea es que una parte se realice en idiomas nativos.

Este, sin embargo, no debiera ser óbice para que un debate de alto nivel sea el colofón del proceso previo al referéndum, y si no fuera el presidente Morales, cabría esperar que el Movimiento al Socialismo designe a quien represente mejor a su causa. Que el mejor de sus polemistas asuma el reto y en una cadena nacional de radio y televisión, que puede ser encabezada por el Canal 7, los argumentos a favor y en contra de cada una de las opciones en juego se pongan al alcance de todos.