Centa Reck
Otra vez nos sentimos incitados a blasfemar a la política puerca de la que estamos siendo testigos presenciales. Nadie nos la puede charlar ni contarnos el cuento de que esto es democracia, ni siquiera aquellos teóricos marxistas que dicen que esta es una democracia estirada hasta sus limites y márgenes porque forma parte del queso o del elástico revolucionario-marxista.
No admitimos que nos sigan contando historias del tío ni cuentos chinos porque lo que está ocurriendo en Bolivia no es otra cosa que el reallity show de la política cruel y puerca, la más puerca de la que tengamos memoria, razón por la que nos parece abominable, despreciable y porcina.
En la fase final del proceso que pretende consolidar el Estado plurinacional resulta absolutamente imprescindible aprobar la deforme Ley Electoral que ha planteado el gobierno y que pretende aprobar por medio de un nuevo cerco en la cámara de senadores, razón por la que el Ejecutivo se prepara para armar un nuevo cerco puerco.
Debemos aclarar que no existe democracia desde que el actual régimen sólo utiliza decretos y cercos para la aprobación de todas las leyes controvertidas, por lo que no deberíamos ir a votar ante una ley que de hecho nos está sacando una vez más del marco de una elección democrática para meternos en un cerco urdido para que nuestro voto nos lleve al matadero y al chiquero porcino.
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En realidad es tan paradojal y silogística la actual manera de operar del gobierno que se constituye en una prueba de la esquizofrenia política en la que andamos metidos. Es algo similar a decir Lima es una ciudad, la lima sirve para limar entonces la ciudad de Lima sirve para limar. Ergo, con este ejemplo podríamos entrar en la forma en que nos encamina el gobierno a la paradojal y silogística conclusión de que el cerco sirve para cercar y la democracia sirve para votar cercados por el cerco en que se ha encerrado a la democracia.
Disculpen que no entendamos el razonamiento silogístico político porque tenemos un esquema que dice que si una ley sale de un congreso cercado no sirve para llevarnos a emitir nuestro voto, pero esto no lo entienden los que quieren llegar o llevarnos hasta las puertas de las urnas a cualquier precio.
Para colmo de males, además del razonamiento y los métodos silogísticos el gobierno utiliza la coacción, la fuerza y la amenaza flagrante y desvergonzada, motivo por el que el mismo Presidente y Vicepresidente han dicho que no permitirán manifestaciones en contra del cerco al congreso, ergo no permitirán que nadie se oponga ni se resista la Ley Electoral con la que nos quieren robar el voto antes de que lo hayamos emitido en las urnas, porque la Ley Electoral es la garantía y el sello lacrado del fraude y de las manipulaciones del bajo mundo de la política puerca.
Marchemos, marchemos, pero para apartarnos del brete de la política porcina-puerca.