“Sólo sabían 5 personas de mi llegada”.Traducción y transcripción de la entrevista facilitada a La Razón por el periodista Andras Kepes.
EDUARDO ROZSA FLORES • El principal miembro de la banda terrorista aparece en una foto que fue extraída de su blog.
Nombres. Se identificó como Germán Aguilera Roca y Jorge Hurtado Flores para registrarse en el hotel y comprar un auto Hyundai.
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La Razón
Germán Aguilera Roca, Jorge Hurtado Flores y su verdadero nombre fueron al menos las tres identidades que utilizó en el país Eduardo Rozsa Flores, el cabecilla de la banda de supuestos terroristas, quien fue eliminado el 16 de abril por un grupo de la Policía Nacional junto a otros dos.
Las primeras investigaciones revelaron que el presunto terrorista utilizó el nombre de Jorge Hurtado Flores para registrarse en el hotel Las Américas, antes de su muerte. El gerente del hotel, Hernán Rosel, dijo que Rozsa presentó su cédula de identidad con el nombre en cuestión.
“Tengo fotocopias del carnet con el que él (Rozsa) se registra bajo el nombre de Jorge Hurtado Flores, por eso me sorprendí cuando el jueves (16 de abril) por la tarde se lo identificó como Rozsa”, dijo Rosel, según ANF.
A poco tiempo del operativo policial en el hotel Las Américas, la Policía allanó el stand de la Cooperativa de Teléfonos Automáticos Santa Cruz (Cotas), donde encontró una gran cantidad de armas y de explosivos.
El nombre de Jorge Hurtado Flores (Rozsa) figura como la persona que habría firmado un contrato con los ejecutivos de Cotas, por el alquiler del galpón.
De hecho, el 16 de abril se identificó por varias horas a Rozsa como Hurtado Flores. El nombre de Rozsa fue confirmado finalmente en horas de la noche de ese día por la Policía.
Otra de las identidades que tuvo el líder del supuesto grupo terrorista fue Germán Aguilera Roca. Este nuevo elemento fue revelado ayer, cuando se presentó a la Fiscalía Carlos Guillén, quien informó que vendió su vehículo a Rozsa, que se presentó con el nombre de Aguilera Roca. Este motorizado habría sido utilizado en el atentado a la casa del Cardenal Julio Terrazas.
Mauricio Ortiz, el abogado del propietario del motorizado, informó ayer que su cliente “transfirió el vehículo a favor del señor Germán Aguilera Roca que, posteriormente resultó ser (Eduardo Rozsa), que apareció muerto en el hotel Las Américas”.
El jurista aclaró que ese “coche fue utilizado por la banda de supuestos terroristas en el atentado a la casa del Cardenal”, sin embargo evitó dar más información porque el caso, explicó, continúa en reserva fiscal.
El fiscal que lleva la investigación, Marcelo Sosa, no se pronunció al respecto.
En el operativo del 16 de abril, además de Rozsa perdieron la vida Arpad Magyarosi y Michael Dwyer. En la misma acción policial se detuvo a Elot Toazo y Mario Tadik Astorga, mientras otros tres estarían prófugos.
DATOS
Video • La Fiscalía presentó un video en el que dice que Rozsa, Magyarosi y Dwyer hablan de atentar contra el presidente Evo Morales.
Pedido • El embajador de Hungría en Argentina, Matyas Jozsa, sugirió que el video presentado por la Fiscalía se analice por expertos internacionales.
“Sólo sabían cinco personas de mi llegada”
Eduardo rozsa, en la entrevista concedida a Kepes, antes de su viaje a Santa Cruz. En ella hace revelaciones sobre sus objetivos y cómo actuará.
Entrevista realizada a Eduardo Rozsa Flores, el 8 de septiembre del 2008
Esta es la traducción y transcripción de la entrevista hecha y facilitada a La Razón por el periodista Andras Kepes.
Eduardo Rozsa Flores a Andras Kepes
Te he pedido esta entrevista pensando en dos razones: una, que antes de que pasase cualquier asunto con el que yo tenga que ver en los próximos días, semanas, meses, me gustaría explicarte el por qué había decidido aceptar este encargo. Te voy a explicar naturalmente de qué se trata. La otra razón es que puede que me ocurriera algo.
Es decir que no quedarás vivo.
Sí. Soy, entre comillas, tan viejo o adulto que habrá que contar con esto. Y desde entonces, tú podrás disponer de este material de cualquier modo pienses adecuado. Evo Morales, justo después de haber ganado las elecciones, pronunció un discurso con el mensaje de que devolverá la dignidad y el respeto a la población autóctona. De ello no surgiría ningún problema si no…, si no hubiera seguido al mismo un siguiente, o sea: frente a quiénes hay que arreglar las injusticias pasadas durante 500 años. Quedando todo esto en palabra, pues no habría ningún problema; sin embargo, en el último año y medio ocurrieron varios casos mortales, y no puedo decir números exactos, tal vez ni importa; no es esto de lo que tenemos que hablar. Había descargas cerradas, e intentaron oprimir a la oposición no solamente mediante los recursos legales de los cuales disponen debido a su mayoría en el Parlamento, sino mediante violencia militar y policial. ¿Cómo entro yo en todo este asunto?, y vamos a tratar las cosas concretas. Se planteó en algunas personas que, si ocurriera algo serio aquí, si tuviera lugar un conflicto, pues aquí hay alguien al que, refiriéndose a la patria de nacimiento y otros, se puede llamar a que vuelva y ayude. Dado que nunca he pensado que soy un Rambo o Superman, ni nada parecido, al principio dije que, bueno, está bien que tengo alguna experiencia bélica, pero, gracias a Dios, es debido más bien a la tontería del enemigo, entre otras cosas, que ganamos aquella guerra, no porque nosotros fuimos tan buenos. Pero al final no tuvieron que hacer muchos esfuerzos en convencerme, por un solo argumento que utilizaron: aun así sabes más que nosotros. ¿Qué es lo importante de lo que no traté hasta ahora? Y tal vez ahora se entenderá más el resto. Me llamaron para organizar o ayudar a organizar la defensa de la ciudad de Santa Cruz, así como la de la provincia. Teniendo en cuenta que se puede contar con la actuación del Gobierno central, con la intervención del Ejército y diferentes milicias indígenas –las que fueron movilizadas contra Santa Cruz–, varias veces en la historia, bajo influencia del alcohol, a mediados, finales de los años 50; dos ocasiones y con resultados muy feos para la población civil. Pues, había que organizar la defensa contra ellos, o sea, la resistencia. Por lo tanto, yo no voy a ir para afirmar o apoyar la capital de La Paz en la organización de atacar y echar al Presidente, dado que yo no tengo nada que ver con La Paz, y los del este ni piensan en ello. Repito otra vez, aquí hay que organizar la defensa y la resistencia.
Kepes señala que manteníamos contacto con Eduardo por internet. De su primer mensaje de Bolivia resulta que el 4 de octubre de 2008 llegó a su país de nacimiento.
Sigue la entrevista: Para que sea aún más claro: en Santa Cruz se presentó ante el Consejo de la provincia una propuesta de decreto, la que al final aceptaron. Se trataba de la realización de un órgano de defensa provincial, cuya tarea es la protección de la propiedad pública, la garantía de la tranquilidad pública pacífica, la defensa de las personalidades de alto cargo, es decir, de los alcaldes, concejales, funcionarios y diputados elegidos de la provincia. Es decir, todo esto tiene una base legal, todo esto no inicia llegando yo y preguntando, oye chicos, ¿qué será el nombre de este grupo? Con esta última frase prácticamente maté lo que sé que a ti te gusta, la romántica del asunto, pero la verdad es que no se trata de que yo vaya a la jungla de Bolivia, jugando el papel de Che Guevara. Ante todo, porque no tengo ni la más mínima intención de morir..
Kepes responde: A mí no me gusta.
¿No te gusta la romántica?, cuestiona Andras.
Este tipo de romántica no, responde Kepes.
Sigue Rozsa: ¿La romántica revolucionaria? La relación entre las dos partes del país se empeoró a tal profundidad que sólo se puede solucionar la situación, uno, arrasando la mitad de la población, manteniendo unido al país de modo violento, y yo voy, entre otras razones, para que tal cosa no ocurriera o que al menos este (si) allí algo ocurre. Porque al fin y al cabo allí pertenezco. Lo digo en voz baja que tengo más que ver con Santa Cruz que con Croacia. Hay que llevar la situación, con recursos políticos, pero señalando la fuerza y estamos preparados que dentro de un par de meses lleguemos a que, si no hay autonomía, si no hay convivencia con autonomía, proclamaremos la independencia y fundaremos un país nuevo. Ahora ya utilizo plural, porque a partir de ahora, en mi alma ya estoy allí.
¿A qué posición te llamaron, al del comandante general del ejército?
No, no hay ejército todavía. Hay que realizarlo. Hay organizaciones que, dada la situación, han conseguido un índole semi-militar en las últimas, pues tengo que decir décadas. De los miembros de estas organizaciones tendré que elegir muy urgentemente, dentro de nada, el núcleo de lo que en el futuro convertirá en milicia, cuya tarea principal será la autodefensa. Y al mismo tiempo, señalar la fuerza. Pues no se trata de que los chicos vayan marchando en las calles con banderas y barras de bambú, sino que hacen falta armas.
Armas…, pero existe ya en la provincia oriental la milicia.
Las leyes de armas de propiedad son significativamente más liberales allí. Es decir, comparando con Hungría también. Cualquiera puede tener armas, evidentemente no se trata de cañones o lanzaminas. Los recursos financieros existen, de lo mismo me aseguraron el viernes. Al mismo tiempo, cuando me informaron de que hay luz verde, que se puede ir ahora. Naturalmente, los que tendrán esta tarea no podrán ni conseguirán las armas desde fondos legales.
Desde el extranjero supongo.
Desde el extranjero o del mismo país; lamentablemente hay muchos que disponen de gran cantidad de armas. Sin embargo, en este caso no podemos ser exigentes. Lo importante no es de quién compramos las armas sino el asunto para lo cual las utilizaremos.
¿Cómo llegarás tú a Bolivia? Supongo que no cogiendo dos maletas y llegar simplemente.
No, debe ser lo mínimo allí. No llevo nada. Una mochila
¿Irás como turista?
No, no. Sería demasiado evidente pues, aunque se guarda el secreto, hasta ayer sólo sabían cinco personas de mi llegada.
¿Y ahora yo soy el sexto?
No, en Bolivia… tú eres el sexto. El plan es el siguiente, me expiden el billete de avión, lo pagan ellos. No sé todavía de qué manera desde aquí de Europa, pero lo importante es que llegaré a una ciudad de Mato Grosso de Brasil, llamada Campo Grande. Allí me esperarán con un automóvil. Me llevarán a un sitio concreto, cerca de la frontera verde, donde pasaremos la frontera con personas contrabandistas conocidas por mis contactos, de modo contrabandista.
¿Es la selva allí?
Sí, es la selva. En el otro lado me esperará un coche. Me llevarán a un alojamiento preparado. Y es cuando empezará el trabajo. Mi tarea primera será intentar establecer un equipo. Un equipo directivo.
A ti te llamaron para ser dirigente. Te llamaron para organizar la resistencia en Santa Cruz y en las provincias orientales y se organizará la resistencia posteriormente en el ejército a base de tus instrucciones y órdenes.
Sería demasiado evidente. Sí, naturalmente, es así.
¿Saben de ti? ¿El Gobierno central?
No. Pero bien. No seamos tan inocentes. Probablemente saben de mí, yo qué sé, tiene servicios secretos, etcétera. Por lo tanto, somos cuidadosos. Ellos son cuidadosos allí y yo también intento serlo lo más posible. Sin embargo, afortunadamente se trata de un territorio grande a donde voy y con unas características que probablemente podremos impedir que nos capten, y además, el Gobierno central actual es cada vez menos apto de mandar a un grupo de ataque de los servicios secretos para captar a alguien en la región de Santa Cruz. Pues, ellos tampoco pueden moverse tan libremente como hace medio año, por ejemplo. La situación ha cambiado.
¿Es algo emocionalmente importante para ti que vayas? ¿O es un encargo de mercenario?
No, yo nunca fui, ni seré mercenario. Tuve que aclarar definitivamente a mis mandantes que olvidémoslo. Se hablaba, no de dinero, sino de cuáles eran mis condiciones. Pues dije, que no tenía ningunas. Voy a mi patria. Mi tierra de nacimiento me necesita, pues voy. No sé si es el antimundo ahora, pero a mí me educaron así. Es mi obligación. Yo no me considero…, lo he dicho cien, mil veces, yo no me considero militar. Sino una persona que ha conseguido cierta, mínima pero al parecer utilizable información en este terreno. Esto iría contra mis principios. El hombre no coja armas por ser pagado, especialmente no coja armas si le pagan y va a matar. Si esto automáticamente puede ocurrir. Así no. Si hay un asunto detrás, es completamente diferente. A pesar de que me ponía nervioso muchas veces en casa al mirar la tele con más frecuencia, aunque no podía desacostumbrarme del Internet, sé qué es lo que pasa en el mundo. Pero aun así, no cojo la mochila y voy, porque ya habría podido estar en 500 sitios donde pasaban cosas asquerosas en el mundo. Pero digo, lo fundamental es que yo mantengo mi postura. No pensé hacerlo así.
Al fin y al cabo, ¿eres un idealista, verdad?
No sé a qué lo llaman.
¿No tienes miedo de ir y morir?
No, no. Y sabes ¿por qué? Pues, un poco de romántica ahora… Por Dios, si aquí también puede caerse una maceta encima de mí, qué tonto sería, ¿no? Ahora voy a mi patria de nacimiento, a mi tierra, si allí me pasa algo, ¿qué? Primero, así fue escrito; segundo, pasaría en el mejor sitio posible.
“ Si no hay autonomía, si no hay convivencia con autonomía, proclamaremos la independencia y fundaremos un país nuevo”
El periodista
Andras Kepes • Tiene 61 años, nacido en Budapest, Hungría; periodista, personalidad en televisión. Es autor de varios libros, profesor universitario y reconocido documentalista para Magyar Televízió (Hungría). Entrevistó en cuatro ocasiones a Rozsa.
Tadik y Toazo habrían dicho que eran parte de un grupo irregular
Conversaciones
Mario Tadik Astorga (boliviano-croata) y Elot Toazo (húngaro), detenidos por supuestos hechos terroristas, habrían admitido que integraban grupos subversivos y que están arrepentidos de su accionar de las últimas semanas.
Una fuente que conversó con ellos en la cárcel de San Pedro informó a La Razón que Tadik dijo “que está arrepentido por todos (sus actos) del pasado incluyendo la relación con este grupo”. El entrevistado afirmó que “hay indicios que permiten percibir que esta gente estaba metida en estos problemas”.
La fuente declaró que Toazo “es más ingenuo” y que le contó que Eduardo Rozsa, el supuesto cabecilla de la banda, le sugirió viajar a Bolivia “porque ahí encontraría aves exóticas, animales que son de su preferencia”.