La Tv húngara anuncia una entrevista clave

Esclarecedora. Rozsa cuenta qué vino a hacer en Bolivia, las causas reales están lejos de lo que se dice en el país.

Era un ícono de ideas extremas, considerado un ‘talentoso aventurero’.



image • FOTOGRAFÍAS DE SU BLOG • Eduardo Rozsa Flores aparece en distintos lugares del mundo. Estas tomas fueron rescatadas en un blog que está escrito, en su integridad, en húngaro.

La Razón

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Andras Kepes, periodista del canal estatal de la televisión húngara (MTV), señaló que el martes pondrá al aire una entrevista en la que Eduardo Rozsa Flores le contó, en exclusiva, qué vino a hacer en Bolivia. No dio más detalles, pero adelantó que las causas reales están lejos de lo que ahora se dice en el país.

Rozsa fue abatido el jueves por la Policía en un hotel de Santa Cruz, acusado de dirigir a un presunto grupo terrorista que atentó contra la casa del cardenal Julio Terrazas y que supuestamente planeaba asesinar al presidente Evo Morales.

La página web www.origo.hu, informó el viernes que Kepes dará a conocer la entrevista que se realizó en septiembre del año pasado. “Fue una grabación secreta en la que estuvimos solo Rozsa y yo”, dijo. Ni siquiera ingresó un camarógrafo a esa cita.

Ambos, según el periodista, suscribieron un compromiso. Kepes no podía dar a conocer el contenido de la entrevista. “No podía difundir el material hasta el retorno de Rozsa o ante una eventualidad”, esta última no del todo aclarada.

Según Kepes, en esa entrevista Rozsa le informa los pormenores de su viaje y las razones del retorno a su país. Kepes sostiene que la entrevista dejará en claro “a qué vino Eduardo a Bolivia y las causas son distintas, en varias maneras, a lo que la prensa boliviana interpreta. Y, definitivamente, tampoco son las que sectores políticos interpretan en ese país”.

The Wall Street Journal indicó ayer que la televisión húngara pondrá al aire una entrevista con Rozsa y que Kepes dijo que ésta dará luces de lo que pasó.

Eduardo Rozsa era un ícono de ideas extremas

imageFACETA • Rozsa posa vestido en alguna playa nudista.

La Razón

Una película húngara se inspiró en Eduardo Rozsa Flores. Él la protagonizó. Cambió el micrófono por el fusil en Croacia. Fue parte del Opus Dei y luego musulmán. Conoció a Carlos el Chacal.

Eduardo Rozsa Flores (49) inspiró y fue el protagonista de una película húngara que fue premiada (Chico, 2000). Victimado la madrugada del jueves en el hotel Las Américas de Santa Cruz, era un hombre de alta formación militar e intelectual, que transitó del cristianismo conservador a la práctica musulmana, dispuesto a usar las armas en defensa de su causa. Era un ícono entre los grupos de los que formó parte en países de Europa.

La revista húngara Elle publica una entrevista con él, en la que admite que el presidente de Irak, Jalal Talabani, lo invitó para dirigir su equipo de prensa, pero él rechazó esa invitación. Además, confirmó que el sucesor de Hussein era su “amigo personal”.

Su familia y el joven Rozsa salieron de Bolivia en la dictadura de Hugo Banzer y se fueron a Chile, donde pudo hacer activismo a favor de Salvador Allende. El padre de Eduardo era un comunista que habría ayudado a miembros de la guerrilla del Che Guevara a huir de Bolivia con dirección a Chile.

En una entrevista hecha en Venezuela el 2008, revela que en Chile surgió el “compromiso que rige hasta hoy mi vida: no es el individuo quien cuenta, sino la causa, los valores. Hay que tomar partido. Si no, no tiene sentido el paso fugaz por el mundo…”.

Entonces llegó a Hungría, a cuyas escuelas militares ingresó. Después fue enviado a completar su formación a la academia F. E. Dzerzhinski, en la antigua Unión Soviética, donde se sintió decepcionado del ´socialismo real´.

“He llegado a la conclusión de que no se puede hablar de socialismo —ni ´hacer´ socialismo— si no se respetan plenamente la libertad y el derecho a la autodeterminación, sea esto de los individuos, o de los pueblos o naciones en general”, dijo en la entrevista publicada en su blog.

Posteriormente estudió literatura comparada, lingüística y politología en la Universidad de Budapest, e incursionó en el periodismo, trabajando para la agencia cubana de noticias Prensa Latina, y después para el diario español La Vanguardia.

“Me tocó vivir y cubrir algunos acontecimientos claves en la otrora centro-europa socialista. Rumania, entrevistas con intelectuales disidentes de la minoría húngara oprimida por ese demente dictadorzuelo que se llamaba Ceaucescu. Luego, las manifestaciones en Praga, más bien desfiles de carnaval, organizadas por ultraliberales, pacifistas y otros bichos raros, o sea nada serio”.

Precisamente como periodista, llegó en 1991 a Croacia, donde pudo cubrir hechos que terminaron de llevarlo hacia la actividad armada. Fue cuando le tocó informar sobre la muerte de su compañero Zarko Kaic, de la Tv croata.

El periodista español Manu Lequineche comentó de Rozsa que fue un periodista que tomó partido y las armas hasta convertirse en el comandante de las brigadas internacionales en Croacia. “Fue una toma de decisión, tal vez la más simple o sencilla que yo haya tomado en mi vida hasta este momento. Después de casi tres meses de trabajar como corresponsal, de ver todo el sufrimiento, y la rabia de una nación prácticamente desarmada, pero así enfrentada al entonces cuarto ejército más fuerte de Europa, combatiendo por su libertad e independencia”.

¿La lucha armada es una opción? “Vaya, cómo no va a ser justificada la lucha armada…No quiero decir que todo periodista tire la pluma o la cámara y que se enrole en el primer despelote que se le ponga enfrente. Pero quien no toma partido, pudiendo hacerlo (…) para ayudar a quien lo necesita, es un ser egoísta, y por lo tanto despreciable”.

Así, llegó a comandar la Brigada Internacional en la guerra de los Balcanes, con más de 380 soldados, llegados de más de 20 países, para luchar por la independencia de Croacia.

Esa acción lo convirtió en un ícono en parte de Europa. No por nada, la película Chico se inspiró en él. “El rodaje fue una cosa intensísima como vivencia. Piensa en que a cuánta gente se le da la posibilidad de revivir los momentos claves de su vida… Esto lo digo como protagonista que fui de esa película”. (Chico se rodó en Hungría, Croacia, Albania, Chile y Palestina).

En Hungría, Rozsa llegó a ser vicepresidente de la comunidad musulmana, aunque en el pasado era parte del grupo Opus Dei. Entre sus contactos figura Illich Ramírez, el conocido Carlos el Chacal, quien fue parte de los grupos armados palestinos.

Frases

El católico • “Siempre tuve la necesidad de Dios, de la fe en Dios. Mi paso por la obra del Opus Dei me favoreció en todos los sentidos, conocí a gente magnífica, aprendí a conducirme disciplinadamente en cuanto a mi vida espiritual”.

El musulmán • “Hay mucha gente que se acerca al Islam por odio a las políticas imperialistas, pero no muchos pueden evitar contagiarse de esa bendita enfermedad que nos tiene locos de amor hacia el Único”.

Su opción • “Hay que ponerse las pilas —como dicen en España— y trabajar. Trabajar por el Islam, trabajar para ayudar a quienes lo necesitan, pelear si es necesario, donde y por la causa justa que así lo requiera”.

11-S • “Estoy convencido, y esto es cosa de simple cálculo, de que todo lo acaecido después del 11-S sólo ha favorecido a los grupos de interés que deseaban esa atroz, injusta e inmoral guerra contra Irak”.

«Rózsa era considerado ‘único’» . Lázar György | Periodista

El redactor del semanario húngaro Élet és Irodalom está haciendo lacobertura del caso en el que falleció Eduardo Rózsa y cuenta detalles de sus investigaciones. Dice que el boliviano-húngaro y algunos de sus acompañantes tenían vínculos con la extrema derecha

image Popular. Rózsa era un personaje conocido en Hungria . Los medios de comunicación de ese país le dieron amplia cobertura a su muerte

El Deber

Ricardo Herrera

– ¿Cómo era considerado Eduardo Rózsa en Hungría? 

– Bueno, es una pregunta difícil. Él era considerado único. La cultura hispánica o sudamericana está muy lejana a la mentalidad húngara. El hecho de que tuviera orígenes judíos y estuviese relacionado con la extrema derecha del partido Jobbik  y que además fuera líder de la comunidad musulmana de Hungría  determinaron que fuera considerado un ‘bicho raro’ en Budapest. El prestigioso diario Népszabadság lo definió como un ‘talentoso aventurero’.

– ¿Cuáles  fueron sus últimas actividades  en Hungría?

– Antes de dejar el país, en septiembre de 2008, Andras Kepes  (Kepes András)  le realizó una entrevista. La televisión hungará emitirá esa entrevista el 21 de abril en el programa ‘Különös történetek’ (Historias insólitas), pero Kepes hizo un reportaje previo con él, que fue difundido en octubre de 2008.

– Nosotros conocíamos que se había convertido al Islam, pero se especula mucho con sus relaciones con la extrema derecha. ¿Tuvo vínculos reales con partidos de esa línea política?

– Sí, como le dije antes, él estaba relacionado con el partido de extrema derecha Jobbik. Él fue editor de la publicación que tiene ese partido en la Internet. También era muy cercano al grupo radical  Lelkiismeret 88. (Conciencia 88). Ellos están vinculados con húngaros que viven en los países vecinos. ( Hungría era un país más grande antes de la Primera Guerra Mundial y por eso hay muchos húngaros que viven en Rumania, Croacia, etc.). Rózsa también estuvo conectado con Székely Légió (Legion Siculis), que es una agrupación paramilitar.

– ¿Eduardo Rózsa era conocido más como escritor, periodista o militar?

  – Como intelectual, escritor, poeta… un personaje único. Él afirmaba que se sentía ‘muy húngaro’. Yo me sorprendí al leer en el periódico EL DEBER la nota en la que se proclamaba ‘muy boliviano’.

– ¿Es verdad que él estaba reclutando personas para ‘liberar Santa Cruz’? ¿Usted tiene alguna información al respecto?

– Sí, es verdad.  En un correo electrónico que hizo circular por el país él estaba buscando gente con buena salud para esa  misión en Bolivia. El e-mail fue enviado en octubre de 2008 por el dominio .tk, que provee servicios de correo electrónico y es muy popular en Hungría.

– ¿Qué es lo que han dicho los medios de comunicación de Hungría acerca de la muerte de Eduardo Rózsa en Bolivia?

-Ha sido una noticia de alto impacto en la televisión y periódicos y websites. El diario Népszabadság cita artículos periodísticos de El DEBER y El Mundo y se han mostrado imágenes de canales de televisión bolivianos. 

-¿Qué ha dicho el Gobierno de su país?

– Funcionarios oficiales del Gobierno sostienen que no han recibido notificación oficial de las autoridades de Bolivia. Ellos también enfatizan en que Rózsa es ciudadano boliviano, pero el país está listo para proveer ayuda humanitaria si es necesario a las personas de nuestra nacionalidad. Rózsa no tenía contacto con las autoridades húngaras y como no hay embajada de nuestro país en Bolivia, el Gobierno ha pedido a su embajada en Argentina que contacte a las autoridades bolivianas sobre el caso.  Hay un consulado honorario en La Paz que ya está al tanto del tema. Por otro lado, se supo que a los húngaros musulmanes les gustaría repatriar los cuerpos de Rózsa y Magyarosi y darles un entierro musulmán. 

– ¿Tiene alguna información acerca de Magyarosi Árpád, el joven que también falleció en los sucesos del pasado jueves y de Elód Tóáso, que actualmente está preso en La Paz?

– Magyarosi nació el 4 de febrero de 1981 en Marosvásárhely (Tirgu Mures – Rumania) y vivía en Budapest. Era músico, tocaba la guitarra y tenía un grupo de música. Elód Tóásó también era de Marosvásárhely. Vivía en Budapest y recibió entrenamiento militar.

Ellos eran miembros de Székely Légió  (Legion Siculis), un grupo paramilitar. Ellos se autodefinen como un club de deportes, pero dan entrenamiento militar a sus integrantes y su objetivo es la autonomía de los húngaros en Rumania. Rózsa estaba muy relacionado con ellos.

En su web (http://www.szekely.tk) encontré una pregunta sorprendente formulada en húngaro: “¿Estás de acuerdo con la autonomía de Santa Cruz de la Sierra?

– ¿Es posible saber qué estaban haciendo ellos en Bolivia?

–  Un buen amigo de Rózsa, Zoltan Bolek, declaró al portal digital Index que antes de que Rózsa saliera de Hungría, él dijo que “tenía algunos asuntos de los que ocuparse”, pero no dijo a dónde estaba viajando.