Los trabajadores del diario EL DEBER hacemos conocer públicamente nuestra indignación y rechazo a un nuevo agravio verbal hacia el gremio, por parte del Gobierno del presidente Evo Morales.
Conferencias de prensa. Los periodistas en su labor diaria.(foto archivo El Deber)
Durante una reunión con representantes de la Sociedad de Prensa, el primer mandatario se refirió a los trabajadores de la información como “pollos de granja” que sólo obedecen a lo que les dictan los dueños de los medios de comunicación o jefes de prensa. Interamericana
Rechazamos semejante aseveración porque mella la dignidad profesional y humana, además de faltar a la verdad.
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Consideramos que este hecho es un nuevo episodio surgido de la mala relación que ha establecido el Gobierno boliviano con gran parte de la prensa nacional.
Es nuestro interés reencauzar estas relaciones, dentro de un marco de respeto a nuestro trabajo.
Con la buena fe tan propia del periodismo, reconocemos las fallas humanas que pudiéramos cometer en nuestra labor y hacemos los esfuerzos gremiales para que el trabajo sea mejorado. Pero de ninguna manera son pretexto para recibir humillaciones, las que rechazamos de plano.
Por eso demandamos no sólo al Gobierno central sino a toda autoridad elegida en el territorio nacional:
– Respeto al trabajo periodístico que realizamos cada día.
– Transparencia en la información que se genera desde las instituciones públicas.
– Acceso a la información del Estado, en todas sus instancias, que es un derecho que le asiste a todo ciudadano.
– Garantías para ejercer nuestra labor.
– No generalizar a los trabajadores de la prensa al momento de una queja o denuncia, y en su caso presentar las pruebas que demuestren una falta de ética en la tarea que desarrollamos.