EL MERCADO INDUSTRIAL Y DE AUTOMÓVILES DE ESE PAÍS REDUJO SU CONSUMO POR LA CRISIS ECONÓMICA MUNDIAL.
Trabajos: técnicos de YPFB en una inspección en la planta de gas de Río Grande
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Las exportaciones de gas a Brasil y Argentina superaron en 2008 los 3.000 millones de dólares.
La Prensa
Aunque el Gobierno asegura que, en invierno, Brasil restituirá los volúmenes que demanda el contrato, ese mercado tiene una sobreoferta de 20 millones de metros cúbicos de gas natural y las exportaciones nacionales podrían bajar más debido a la crisis económica mundial.
El año pasado, el país vendió gas por 3.121 millones de dólares y para este año se pronostica una reducción a 1.500 millones debido a menores volúmenes y precios.
La semana pasada, la agencia Efe informó que la petrolera estatal brasileña Petrobras había admitido una caída en las necesidades de gas natural y anunció que hará dos o tres subastas adicionales a las cinco previstas para este año para reducir los inventarios del combustible.
La directora de Gas y Energía de la compañía, María das Graças Foster, en la apertura del Gas Summit Latin America 2009, que reúne a empresarios del sector en Sao Paulo, explicó que la caída de la demanda se debe a la sustitución del producto por otros combustibles, como el etanol en el rubro automotor, con precios casi similares a los del gas natural.
“Hoy tenemos 20 millones de metros cúbicos de gas y no tenemos qué hacer con él”.
Foster agregó que el mercado no térmico, formado por los sectores industrial, automóviles, residencial y comercial, demandó 31,9 millones de metros cúbicos por día en mayo, menos que los 38,3 millones de metros cúbicos suministrados en el mismo mes de 2008.
En las tres subastas electrónicas realizadas para entregas de gas en los meses de mayo, junio y julio, Petrobras vendió 5,1 millones de metros cúbicos, pero el excedente continúa.
La previsión para este año es de una demanda de 7,7 millones de metros cúbicos por día, la mitad de los 14,5 millones de metros cúbicos registrados en 2008.
Desde enero, Brasil ha reducido su demanda del energético boliviano de los 30 millones de metros cúbicos que habitualmente importaba a un promedio de 18 a 20 millones. En abril, los envíos a ese país fueron de 20,97 millones de metros cúbicos. Las compras mínimas conforme al contrato son de 24 millones, si no se completa ese rango, la diferencia se paga igualmente. La medida se hizo efectiva porque el país vecino comenzó a abastecerse de fuentes hidroeléctricas y de combustibles más baratos, como el gas natural licuado (LNG).
El viceministro de Comercialización, William Donaire, aseguró que Brasil comenzó a subir sus compras para garantizar el suministro interno en invierno y cumplir el contrato.
El analista en hidrocarburos Hugo del Granado explicó que ese mercado tiene una mayor oferta debido a que la Asociación Brasileña de Distribuidores de Gas Natural confirmó en el último mes una disminución de la demanda en 4,5 por ciento de sus clientes. Esto como efecto directo de la crisis económica.
Además, con el LNG cuenta con fuentes alternativas de suministro que han ocasionado que el precio del gas natural disminuya en el mercado internacional a 3,80 dólares el millón de unidades térmicas británicas (BTU). “Brasil le compra actualmente a Bolivia el gas a un precio de 4,34 dólares el millón de BTU, si le ofrecen LNG más barato porque hay una elevada oferta de este energético, no dudará en comprarlo”.
El ex superintendente de Hidrocarburos Hugo de la Fuente agregó que, en la medida que la economía de la nación vecina se deteriore, comprará lo mínimo.
“Lo que hace Brasil es recibir gas y lo subasta a precio menor, está perdiendo y no sería lógico perder, no es sostenible”.
Más datos
Brasil pagó el año pasado, desde abril, unos 8 dólares por millón de BTU.
Argentina compraba el energético a diez dólares en promedio.
Los precios se elevaron gracias al alto precio del barril de petróleo, de hasta $us 140.