El ex Vicepresidente propone que en agosto toda la oposición forme un frente único contra el MAS. La base de la organización política liderada por Cárdenas es el colectivo No de Corazón.
Victor Hugo Cárdenas, candidato
La Prensa
Rosario Paz Monasterios | 04/07/2009
Víctor Hugo Cárdenas confirmó su candidatura presidencial para las elecciones generales de diciembre y aseguró que no es de derecha, centro o izquierda, sino que se define como demócrata, intercultural y de cambio.
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El ex Vicepresidente conversó con La Prensa y anunció que en agosto se conocerá la organización del proyecto político en que está empeñado y que tiene como base al colectivo No de Corazón, que impulsó el rechazo a la nueva Constitución Política del Estado. Será cuando se conocerá a su acompañante de fórmula. Propondrá generar un frente de oposición, que se presente con una candidatura única.
—¿En qué espacio del espectro político se ubica, izquierda, derecha o centro?
—En el espacio democrático de cambio, no me gustan los términos de izquierda, centro o derecha porque eso funcionó con la Revolución Francesa, hoy el panorama se ha complicado más. Estoy en el campo democrático, intercultural y de cambio.
Ideológicamente soy katarista, siempre lo he sido. En lo político, el katarismo propone una democracia intercultural; en lo social, una construcción boliviana a partir de la diversidad; en lo cultural, construir una cultura boliviana, síntesis creativa de las diferentes culturas; y una economía mixta con capacidad de desarrollo por sí mismo.
—¿Considera prioritario a algún sector social?
—No, absolutamente no. Todos, obviamente, en cuanto a discriminación positiva, mujeres, indígenas, jóvenes, personas con discapacidad y personas en situación de extrema pobreza.
—¿Cuáles son sus propuestas?
—En detalle ya las daremos oportunamente a conocer, pero los criterios generales que se tiene es que lo prioritario es reconstruir la unidad nacional. Bolivia hoy está totalmente dividida y enfrentada y lo que tenemos que hacer es promover un verdadero reencuentro nacional y creo que para eso tenemos aptitudes porque nos llevamos bien con occidente y bien con oriente y con todos los sectores sociales del país. En segundo lugar, debemos reconstruir el aparato productivo del país, que ha sido muy golpeado por este Gobierno; recuperar los mercados perdidos y buscar nuevos para nuestras exportaciones; apoyar a sectores postergados, como la microempresa, la pequeña y mediana empresa; impulsar empresas indígenas, sociales y populares, y desarrollar una agresiva política social en educación, salud, saneamiento básico, provisión de agua y en desarrollo de infraestructura, sobre todo para el sector productivo nacional.
—¿Ya ha definido quién será su acompañante de fórmula?
—Todavía no porque aún es muy temprano, yo creo que a fines de agosto será el tiempo más adecuado para la definición del acompañante en el binomio.
—¿Maneja ya posibilidades?
—Es difícil ahora porque todo puede pasar en dos meses. Si bien hay gente que va subiendo, otros van cayendo, hay líderes que van emergiendo. Hay un sinfín de variables que hay que tomar en cuenta antes de identificar nombres; lo que hay que hacer es recorrer todo el país, estar abierto a todos los mensajes y tomar la mejor la definición.
—¿Cuál es el movimiento que lo está impulsando?
—Es un nuevo proyecto político ciudadano basado en todo el movimiento que significó el No de Corazón que trabajó para el 25 de enero en el referéndum constitucional. Es gente que, en su mayoría, no tiene trayectoria política partidaria, pero se definió para contribuir a la campaña del No. A partir de eso estamos agrupando núcleos organizativos para el proyecto político ciudadano. Vamos a configurarnos como una nueva organización política, en lo posible una nueva agrupación ciudadana que combine experiencia y capacidad de gente como yo con gente joven que dé una nueva inyección a la esperanza política de país con una enorme voluntad de contribuir en la construcción de ese reencuentro nacional.
—¿Está ya estructurado este movimiento ciudadano?
—Estamos culminando las últimas acciones de esta fase preparatoria, esperamos completarla este mes en cuanto a la organización, el diseño ideológico y programático con las diversas regiones y el plan de financiamiento. Una vez terminada esta tarea, vamos a discutir nombres de los conductores y hacer el anuncio oficial de esta propuesta.
—¿Ha visto la posibilidad de hacer alianzas políticas?
—En este momento es muy temprano para ver alianzas y acuerdos; pero yo creo que el siguiente mes hablaremos con la mayoría de los candidatos que han dado a conocer su deseo de participar en diciembre, porque sería una locura ir con cuatro, cinco o seis candidaturas. Nosotros somos partidarios de que la oposición vaya en una sola candidatura y mediante procedimientos técnicos se pueda definir quién merece el mayor apoyo de la población boliviana. Para no estar divididos, lo que hay que hacer ahora es correr cada uno por su cuenta, pero en vísperas de la inscripción, que es en agosto, reunirnos y elegir al mejor hombre o mujer que conduzca este proceso.
Si nosotros mereciéramos el apoyo del pueblo, lo asumiríamos con la mayor responsabilidad, si no fuésemos nosotros, pondríamos el hombro para apoyar a aquella persona o a aquel binomio que el pueblo apoye.
—¿Ha buscado acercamientos con los líderes de la “media luna” para lograr apoyo?
—Nosotros no hablamos de “media luna”. Estamos en contacto con organizaciones de los nueve departamentos, incluso aquellos que están ubicados en lo que llaman “media luna”. Donde más apoyo tenemos es en Cochabamba, Chuquisaca, Tarija, Santa Cruz, Beni y Pando; ahí tenemos una enorme ventaja.