Ayer asumió el ex militante del PC y ex del Ejército de Liberación Nacional, Edgardo Vázquez. Seguridad quedó en manos de ex “elenos” y radicales.
Posesión: Edgardo Vásquez es congratulado por el ministro Rada después del juramento de rigor, fue ayer
Autoridades tienen pasado con organizaciones de izquierda
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La Prensa
Alfredo Rada elogió la trayectoria política y sindical del nuevo Director General de Régimen Interior.
Se cerró el círculo de ex izquierdistas que controlan el Ministerio de Gobierno, después de que ayer se posesionara al ex dirigente sindical y periodista Edgardo Vásquez como director general de Régimen Interior.
El nombre de combate de Edgardo Vásquez, en el Ejército de Liberación Nacional (ELN), era “Mallku”. En los 80, dirigió la Confederación Sindical de Trabajadores en Radio y Televisión de Bolivia (Constrateb) y luego pasó al Partido Comunista (PCB).
El actual director Jurídico de esa secretaría de Estado, Rubén Gamarra, explicó que “en su juventud, quien no era sacerdote, era guerrillero”. El abogado nunca abrazó los hábitos.
El actual ministro de Gobierno, Alfredo Rada, ex trotskista, dirigió un grupo de formación ideológica en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), que fue absorbido por otro núcleo de estudios ideológicos liderado por el actual vicepresidente Álvaro García Linera.
En su juventud, el viceministro de Régimen Interior, Marcos Farfán, militó en filas del ELN fundado por el argentino-cubano Ernesto Che Guevara.
Otros funcionarios de menor jerarquía en el Ministerio provienen de diversas organizaciones de izquierda que resistieron a las dictaduras militares entre los 70 y principios de los 80.
El Ministerio de Gobierno es responsable de la seguridad y estabilidad del régimen. Las fuentes consultadas por este medio señalan que sus funcionarios “deben ser seguidores firmemente convencidos de la línea política e ideológica asumida por el Ejecutivo”.
Por ello, en la ceremonia de posesión, Rada elogió la trayectoria sindical y política de Vásquez, quien también formó parte del Comité Ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB) bajo el liderazgo de Juan Lechín. El suyo “ha sido un aporte a la lucha revolucionaria”.
El ministro Rada destacó que el compromiso político de la nueva autoridad para entablar diálogo con sectores que, por sus demandas, entran en conflicto con la actual gestión fue fundamental para ser designado como parte de su equipo.
Sin embargo, surgieron críticas por la composición de esta cartera de Estado.
Para el diputado de Poder Democrático y Social (Podemos) Bernardo Montenegro, la presencia de estas personas demuestra que las verdaderas bases del MAS están en la izquierda tradicional en reemplazo de los movimientos sociales, a los que “han desplazado”, en su opinión.
“No es malo haber militado”
“No es malo haber tenido alguna militancia política”, afirmó ayer el director Jurídico del Ministerio de Gobierno, Rubén Gamarra, consultado sobre la presencia de varios ex militantes de partidos de izquierda radical en ese despacho de Estado, como Edgardo Vásquez y Marcos Farfán, ex integrantes del ELN, y el ex trotskista Alfredo Rada.
Recordó que cuando era estudiante universitario, se vivía en una época en la que todos debían asumir una posición política e
ideológica definida, porque la coyuntura del momento lo ameritaba. “Tenías que ser cura o guerrillero”, afirmó la autoridad, y mencionó que nadie les puede cuestionar el haber tenido una militancia política en la izquierda y que ahora estén comprometidos con objetivos de cambio, que tiene la actual administración, “no es malo”. “No es igual a lo que hicieron los oportunistas del Partido Demócrata Cristiano, que han estado en todos los gobiernos desde que se ha recuperado la democracia en Bolivia.
“Es una situación diferente que estamos viviendo”, dijo el abogado, y sostuvo que para muchos no ha cambiado “su línea política” porque están comprometidos con el proceso de cambio.
Finalmente, Gamarra aseguró que esa convicción se la usa para trabajar y servir al pueblo boliviano.