La empresa ICA y la esposa del dirigente político Fidel Surco fueron los blancos. Gobierno politiza los bombazos.
En ambos casos se habría usado el explosivo C4.
Herido: personal del Hospital Arco Iris traslada anoche a Leonel Moya, víctima del atentado en Villa Fátima
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La Prensa
El Gerente de la empresa ICA sufrió un atentado explosivo el 2 de septiembre del año pasado. La Policía arrestó ayer a un hombre armado en Villa Fátima. No se determinó si está implicado en el hecho.
Dos atentados perpetrados ayer con sobres explosivos dejaron siete heridos en La Paz, entre ellos dos oficiales de Bomberos y la esposa del presidente de la Coordinadora Nacional para el Cambio (Conalcam), Fidel Surco.
Los hechos desconcertaron a la Policía y a los organismos de seguridad del Estado, que se declararon en emergencia. El viceministro de Régimen Interior, Marcos Farfán, dijo que los dos casos no tienen relación entre sí, aunque admitió: “Nada se puede descartar en este momento”.
Farfán hizo tales afirmaciones en Villa Fátima, donde aseguró: “Este hecho no quedará impune y la investigación debe dar con los autores intelectuales y materiales del atentado”.
El Ministerio de Gobierno comunicó que “ha instruido a la Policía Boliviana tomar todas las previsiones” de seguridad.
La primera de las explosiones se produjo alrededor de las 11.45 en el noveno piso del edificio Las Dos Torres, donde funcionan las oficinas de la constructora Ingenieros Civiles Asociados (ICA), en Sopocachi, y la segunda se registró en la sede del Sindicato de Volantes a Yungas, situada en Villa Fátima.
Alrededor de las 11.00 de ayer, la secretaria del gerente general de ICA, Édgar Gutiérrez Mercado, abrió un sobre remitido por correo —según la red televisiva Uno— por el “Arq. Juan Carlos Antequera Soliz”.
La funcionaria halló hojas en blanco y lo llevó de inmediato al depósito. Se puso en contacto con Bomberos para denunciar la existencia de un “sobre sospechoso”. Tenía razones para sentirse inquieta, pues el 2 de septiembre del año pasado, el ejecutivo de ICA y ella fueron víctimas de otro paquete-bomba.
Poco antes del estallido, una llamada anónima alertó de la presencia de un artefacto explosivo.
Al llegar, los uniformados evacuaron el noveno piso y se proponían retirar el artefacto. Esperaban el ascensor, cuando se produjo la explosión.
El comandante de Bomberos, teniente coronel Gustavo Daza (46), cayó malherido y el subteniente Jorge Ramírez (24) sufrió lesiones menos graves.
El reporte oficial del Hospital Virgen de Copacabana, al que fueron evacuados ambos oficiales, dio cuenta de que la explosión comprometió la mandíbula de Daza, le causó la amputación de los labios inferior y superior, un trauma en la mano izquierda, con pérdida de sustancia, y lesiones en ambos ojos, aunque el derecho es el más comprometido, a grado tal que puede perderlo.
Daza fue sometido a intervenciones de cirugía plástica y ocular en procura de salvarle la visión. Se mantiene en la Unidad de Terapia Intensiva.
Ramírez sufrió daños no severos en ambos ojos y lesiones en la mano izquierda, también con pérdida de sustancia. Otros dos policías rasos fueron llevados al nosocomio de la institución del orden y después de recibir los primeros auxilios fueron dados de alta y son sometidos a tratamiento ambulatorio.
Entre el quinto y el séptimo pisos de ese edificio funciona el Instituto Nacional de Seguros de Salud (Inases), cuyos médicos debieron romper una puerta para ingresar en el noveno piso a fin de socorrer a los heridos.
Hace 11 meses, un artefacto explosivo escondido en un paquete de regalo hizo explosión en el despacho de Gutiérrez, quien sufrió lesiones en el rostro y en el pecho, mientras que a su secretaria Rosario Huarín se le incrustaron esquirlas en el cuello, una de las que estuvo a milímetros de cortarle la arteria aorta.
La investigación de ese caso no avanzó y estuvo cerca de archivarse, a causa de la falta de indicios para señalar a los responsables, aunque hubo muchas especulaciones al respecto.
La Policía sospecha de que se trate de un asunto pasional, pues la ex esposa de Gutiérrez Mercado, de 75 años, Rita Castrillo, de 39, cumple una condena de 20 años por intento de asesinato a su ex cónyuge. Pese a la sentencia, Castrillo denuncia parcialización de la justicia y reclama constantemente su inocencia.
Atentado en Villa Fátima
Alrededor de las 15.15, el edificio del Sindicato de Volantes a Yungas, en la calle Yanacachi de Villa Fátima, fue estremecido por el estallido del segundo artefacto.
En ese local debía desarrollarse una reunión para superar las diferencias entre la entidad gremial y los ejecutivos de Turbús Totaí, empresa perteneciente a Fidel Surco, principal dirigente de la Conalcam, y su esposa Arminda Colque (34).
Un anónimo mensajero había dejado, minutos antes en las oficinas de la madre de Colque, un sobre cerrado y rotulado a nombre de Surco.
José Antonio Choque, secretario de Relaciones del Sindicato, recordó que la esposa de Surco llegó, en compañía de cuatro representantes de su empresa, con anticipación a la cita, por lo que le pidió que aguardara unos minutos en la sala de espera.
En ese momento, Arminda Colque abrió el sobre destinado a su esposo. Fue cuando se produjo la explosión. Choque refirió que, al escuchar el estruendo, los dirigentes salieron de la Presidencia.
“Había mucho humo, vidrios y papeles rotos por todas partes. Vimos a la señora tendida en el piso. En un primer momento creímos que estaba muerta, pero la movimos un poco y reaccionó. Incluso sacó su celular y pidió que llamáramos a su esposo”.
Arminda llevaba atado a la cintura un bolso, conocido como “canguro”, donde tenía varios fajos de billetes y monedas. “Tenía bastante dinero, dólares, bolivianos y monedas. Los billetes quedaron picados y desperdigados por todos lados”.
Choque cree que este bolso salvó la vida de Colque, pues absorbió parte de la explosión y no le causó heridas en el abdomen.
El dirigente dijo que la víctima tenía la mano y la rodilla izquierdas completamente destrozadas y manaba abundante sangre por el rostro, además de que presentaba otras heridas.
Sus compañeros presentaban heridas y estaban mareados, pues no podían tenerse en pie.
Los bomberos llegaron a los pocos minutos y evacuaron a los heridos hacia el hospital Arco Iris, mientras empezaban las investigaciones en el lugar.
Se conoció que la Policía arrestó a un hombre armado en inmediaciones de ese edificio, aunque no se pudo establecer si está involucrado en el hecho.
Entrevistado por la red radial Erbol, con la voz entrecortada, Surco contó: “Estábamos compartiendo un partido de fútbol entre los equipos de la CSUTCB y de las comunidades interculturales. Lo único que sé es que dejaron un sobre en las oficinas de mi suegra, que había recogido mi esposa. El sobre había sido dejado a mi nombre. Mi esposa recogió el sobre, estaba yendo a reunirse con unos dirigentes y en eso la bomba explotó. La carta decía Fidel Surco, Presidente de la Conalcam”.
Alrededor de las 20.00, el ministro de Salud, Ramiro Tapia, prestó un completo informe sobre la condición física, además de Arminda Colque, de Leonel Moya (43), Santos Mamani (47), Benito Apaza (41) y Julio Choque (59), internados en un hospital.
La Policía continúa la evaluación de los daños producidos en los dos lugares.
Gobierno politiza los bombazos
Ya en carrera electoral, el presidente Evo Morales y los parlamentarios oficialistas politizaron los actos terroristas ocurridos ayer, al acusar a la oposición de la autoría de éstos.
El Primer Mandatario atribuyó a la oposición las explosiones y aseguró que no siente temor ante la posibilidad de que él sea el próximo objetivo de quienes envían los sobres explosivos.
Denunció que la oposición inició su campaña electoral “con bombas”, y convocó a sus colaboradores “a tener mucho cuidado”.
“Los ministros y viceministros que apuestan por las transformaciones profundas y a quienes trabajan con mucha transparencia por el país deben cuidarse”.
El principal dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), Isaac Ávalos, sostuvo que “cuando no pueden con nosotros, vienen los atentados, los intentos de asesinatos, son hechos que hay que investigar pero no se descarta que sea la derecha opositora que quiere perjudicar el proceso de cambio cuando nosotros estamos avanzando”.
El senador del Movimiento Al Socialismo (MAS) Félix Rojas refirió que el objetivo de los atentados es eliminar al presidente Morales. “No son hechos aislados. El objetivo final es eliminar físicamente al presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales”.
El parlamentario opinó que quienes están detrás de los atentados no son “células terroristas”, sino “sistemas del terrorismo” que todavía operan en el territorio nacional.
Daza, víctima nuevamente
El director de la Unidad de Bomberos, teniente coronel Gustavo Daza, sufrió ayer, por segunda vez, los efectos de una explosión, pues el 30 de marzo de 2004 fue una de las víctimas de la inmolación del ex minero Eustaquio Picachuri en el edificio anexo al Palacio Legislativo.
En aquella oportunidad, el ex trabajador del subsuelo exigía la devolución de sus aportes para jubilarse, pero su demanda no fue atendida durante dos horas y media de negociaciones.
Alrededor de las 15.02, el coronel Marbel Flores y el policía Rolando Amurrio se abalanzaron sobre el obrero para quitarle de las manos los detonadores eléctricos de ocho cargas explosivas que llevaba atadas al cuerpo, pero fracasaron.
Picachuri activó el circuito y quedó despedazado, al igual que Flores y Amurrio. Daza, uno de los mejores especialistas en desactivar explosivos de la Policía, permaneció cinco meses internado para recuperarse de sus heridas. Desde este año ocupa la dirección de esa unidad policial especializada.
Condena de Naciones Unidas
A través de un comunicado público, el Sistema de Naciones Unidas en Bolivia condenó ayer “enérgicamente los atentados explosivos que hirieron de gravedad a varios bolivianos, entre ellos a dos bomberos y la señora Arminda Colque, esposa del señor Fidel Surco, líder de Conalcam” (Coordinadora Nacional para el Cambio).
“Naciones Unidas deplora estos hechos de violencia injustificable, expresa su solidaridad con las víctimas y sus familiares y confía en que las autoridades encuentren a los responsables de estos atentados y haga caer sobre ellos las sanciones correspondientes”.
Reporte médico oficial
PACIENTE DIAGNÓSTICO TRATAMIENTO
Arminda Colque (34) Politrauma secundario a explosión. Estabilización hemodinámica.
Esposa del Presidente Trauma ocular severo. Amputación de tres dedos de mano izquierda. de la Coordinadora Heridas faciales múltiples y complejas. Estabilización de segundo dedo, mano izq.
Nacional para el Amputación traumática de tres dedos. Lavado quirúrgico, fractura expuesta en fémur.
Cambio (Conalcam) y Lesión severa de 2.o dedo, mano izq. Estabil. temporal con fijador externo de fémur.
principal accionista Heridas superficiales en mano derecha. Lavado de heridas superficiales.
de Turbús Totaí. Fractura expuesta del fémur izquierdo. Limpieza y sutura de heridas faciales.
Herida en Lesión severa de cuádriceps. Tratamiento quirúrgico de lesiones oculares.
Villa Fátima Heridas superficiales en muslo derecho.
Leonel Moya (43) Trauma acústico. Estabilización hemodinámica.
Turbús Totaí, herido Trauma facial. Evaluación escrita del estado neurológico.
en Villa Fátima. Herida cortante en pabellón auricular. Limpieza quirúrgica de heridas.
Benito Apaza (41) Trauma acústico. Control por cons. ext. de otorrinolaringología.
Turbús Totaí, herido Perforación timpánica izquierda. Tratamiento anitmicrobiano.
en Villa Fátima. Policontusiones. Tratamiento antiinflamatorio.
Julio Choque (59) Policontusiones. Estabilización hemodrinámica.
Turbús Totaí, herido Traumatismo encéfalo craneano leve. Control estricto del estado neurológico.
en Villa Fátima. Síndrome vertiginoso. Tratamiento antivertiginoso.
Tratamiento anitmicrobiano.
Tratamiento antiinflamatorio.
Santos Mamani (47) Herida abierta en rodilla izquierda. Estabilización hemodinámica.
Turbús Totaí, herido Trauma acústico derecho. Evaluación estricta del estado neurológico.
en Villa Fátima. Limpieza de heridas.
Administración de nimodipino.
Gustavo Daza (46) Lesiones en la mandíbula. Cirugía plástica reconstructiva de labios.
Comandante de la Cercenamiento de labios. Cirugía ocular en ojo izquierdo.
Unidad de Bomberos Lesiones en el ojo izquierdo. Cirugía reconstructiva en ojo derecho.
Antofagasta, herido Lesiones severas en ojo derecho. Estabilización hemodinámica.
en Sopocachi. Mano izquierda traumática. Tratamiento quirúrgico en falange de un dedo.
Jorge Ramírez (24) Lesiones oculares. Limpieza quirúrgica en ambos ojos.
Oficial de Bomberos, Pérdida de sustancia en mano izquierda. Cirugía traumatológica de mano izquierda.
herido en Sopocachi Lesión en eje discal de mano izquierda. Tratamiento otorrinolaringológico. Trauma acústico.
Dos sobres-bomba provocan siete heridos en La Paz
El comandante de Bomberos, coronel Gustavo Daza, y el subteniente Jorge Ramírez resultaron gravemente heridos, al igual que la esposa de Fidel Surco. En ambos casos se habría usado el explosivo C4. Morales condenó los hechos.
En Villa Fátima • Así quedó el sitio donde Arminda Colque abrió el sobre enviado a su esposo.
La Razón
En dos hechos distintos, explotaron ayer dos sobres-bomba que dejaron siete personas heridas, entre ellas de gravedad a dos efectivos policiales y a la esposa del dirigente de la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conalcam), Fidel Surco. En ambos casos se habría usado el explosivo C4, según fuentes policiales.
La primera detonación se registró en la oficina de la empresa Ingenieros Civiles Asociados (ICA), ubicada en el piso 9 del edificio Las Dos Torres, que está en la avenida 6 de Agosto. El ruido de la explosión se escuchó entre las 11.55 y 12.00, pocos minutos después de que llegaron y entraron al edificio los bomberos.
Eran el comandante de esta unidad, teniente coronel Gustavo Daza, y el subteniente Jorge Ramírez, quienes, según los testigos, ingresaron sin ningún equipo especial de seguridad. Ambos acudieron al lugar luego de que recibieran un llamado telefónico que alertaba sobre un sobre sospechoso que recibieron.
Los empleados de la empresa fueron evacuados. Una fuente policial reveló que el sobre fue abierto en parte y, al ver en su interior un artefacto sospechoso, lo dejaron y llamaron a Bomberos.
No se conoce un informe oficial sobre las circunstancias de la detonación, sin embargo, algunos efectivos policiales informaron que el artefacto explotó cuando Daza y Ramírez sacaban el sobre fuera de la oficina, para desactivarlo.
Aparentemente, el movimiento lo activó y explotó, dejando gravemente heridos a los dos oficiales, quienes fueron llevados a la clínica Virgen de Copacabana.
“El coronel Daza tiene amputaciones parciales en el labio inferior (de la boca) y en el párpado superior derecho”, informó el director de la clínica, Rolando Gonzales. Añadió que Ramírez “tiene múltiples laceraciones en los ojos y heridas en la mano izquierda”.
Hasta el momento no se conoce oficialmente el tipo de explosivo usado, pero una fuente anticipó que podría tratarse del C4 (un potente explosivo de uso militar), que habría estado armado con un sofisticado sistema de activación al contacto.
Un similar sobre-bomba explotó en la misma oficina de ICA en septiembre del 2008. En esa ocasión se estableció que la esposa de uno de los ejecutivos le envió el sobre desde la cárcel, donde se encuentra recluida.
Tres horas después del primer hecho, detonó el segundo sobre-bomba en la sede social de los transportistas a Yungas, en Villa Fátima. Arminda Colque recibió el sobre y su curiosidad la llevó a manipular y provocar su explosión. Perdió tres dedos y se le practicó una cirugía reconstructiva del rostro. Junto a ella resultaron heridas cuatro personas.
La detonación dejó el lugar destrozado. En el piso se observó pedazos de papeles que iban en el sobre. Fuentes policiales creen que en este caso también se usó el explosivo C4.
Ambos sobres-bomba habrían sido depositados en la Empresa de Correos. El presidente Evo Morales expresó su preocupación por los atentados, sobre todo el dirigido a Surco. “Muy sospechoso y preocupante este acto de terrorismo”, sostuvo.
El comandante de la Policía, general Víctor Hugo Escóbar, informó que se investigan los móviles de los hechos.
“Los dos bomberos entraron al edificio sin nada. Detrás de ellos entraron otros policías con algunos objetos”.
Una testigo que tiene su negocio cerca al edificio Las Dos Torres.