El hallazgo de las factorías se dio pese a que la FELCN anunció rigurosos controles. Duelo de comunidades enfrentadas por el narcotráfico movilizó a la Policía.
Efectivos de la Felcn destruyen una fábrica de droga en Pantipata. – FELCC Agencia
Por Vásquez Katiuska – Los Tiempos
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Un “megaoperativo” de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) en las partes altas del municipio de Vinto reveló ayer que Pantipata y Cotani continúan fabricando droga y que procesaban al menos 15 kilogramos de pasta base de cocaína a la semana, siguiendo el método colombiano basado en fábricas móviles, informó el comandante de la unidad antidrogas, Elvin Baptista.
El hallazgo develó que, pese a los anunciados controles, la actividad del narcotráfico continúa en la zona.
En las quebradas más altas, la Felcn encontró ayer 14 fábricas de cocaína. Once estaban en los alrededores de Pantipata, dispersas a unos dos kilómetros del pueblo. Las demás fueron halladas en Cotani, un poblado próximo a Pantipata, a unos 50 kilómetros de la ciudad de Cochabamba, en las faldas de la Cordillera del Tunari, agregó Baptista.
Las fábricas se disputaban las laderas cercanas al río Charingo. Las factorías eran “llanthuchas” (carpitas), como las que hay en los mercados. Estaban abarrotadas de tanques, de esos que sirven para depósitos de agua. También, se hallaron turriles y baldes, en los que se maceraba la coca.
Junto a los recipientes se halló gran cantidad de precursores, como gasolina, y hoja de coca lista para ser procesada. Después de un hallazgo, se quemaba todo. Baptista explicó que las condiciones del terreno y la distancia impidieron incautarse los insumos del narcotráfico y se optó por incinerar todo y salir en busca de las fábricas, que estaban bien escondidas.
La Felcn no halló “narcos” pues cuando llegaba a las factorías, éstas se hallaban abandonadas. El jefe de la Felcn contó que Pantipata es un lugar estratégico para el narcotráfico. Está en una meseta y tiene un solo camino de ingreso, que puede verse desde las alturas. Así que cada vez que las patrullas suben, los “narcos” los ven y se ponen a buen recaudo.
En la fábrica más grande de las 14 halladas ayer, la Felcn halló 12 paquetes de coca (taques o chanchitos), cada uno de 50 libras, listos para ser macerados. Con esa cantidad los “narcos” podían hacer hasta un kilo de pasta base. Para lograr ese kilo habitualmente se necesitan entre 370 kilos de coca paceña y 390 kilos de chapareña.
La intervención a las fortalezas del narcotráfico ocurrió en un momento crítico. La droga y la escasez de agua enfrentan a Pantipata con las comunidades que se mantienen al margen del tráfico, como Charingo, Llave Grande, Llave Chica y Tiomoko.
A diferencia de anteriores operativos, las patrullas no hallaron resistencia entre los “narcos” o los comunarios que defienden a los traficantes. La primera vez que la unidad antidrogas intervino en 2008, salieron 18 efectivos al ser emboscados por una turba. A causa de la paliza los policías recibieron más de 20 días de impedimento. Los autores de la emboscada fueron liberados a fines de junio libres de cargo, informaron fuentes policiales.
15 kilos por semana
• Los narcotraficantes del lugar fabrican unos 15 kilos de pasta base por semana, dice la Felcn
Negocian acuerdo
El duelo de comunidades enfrentadas por el narcotráfico movilizó a la Policía, que intenta pacificar la zona a través de una comisión de diálogo. Sin embargo, los sectores se atrincheraron en sus demandas y los dirigentes de Pantipata han demandando a cuatro representantes de Charingo en la Fiscalía por atentar contra la libre circulación al bloquear el camino a Pantipata.
El comandante de la Policía, Carlos Quiroga, dijo que “está por concretarse una negociación para pacificar la zona”. Añadió que Pantipata se mantiene en su posición de cortar el suministro de agua potable para Charingo hasta que no se levante el bloqueo.
Mientras, la gente de Charingo persiste en bloquear el camino a Pantipata hasta que se normalice el servicio de agua, se frene la contaminación del río Charingo con precursores, se destruyan las fábricas de droga y se acabe la construcción del módulo policial.
El martes pasado la Subprefectura debía hacer una inspección, pero los pantipateños no se presentaron y activaron una demanda penal por el bloqueo. Los de Charingo anunciaron contraatacar con denuncias por delitos ambientales.