Haitianos llegan a Bolivia; piden ayuda y ya tienen oferta de trabajo

Sismo. Un grupo de 76 personas llegó a Santa Cruz. No estuvieron en Haití durante el terremoto, pero saben de los destrozos y de sus familiares muertos. Buscan empleo donde lo puedan hallar

image



El Deber

C.Siles y C. Delgado

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Haitianos piden ayuda y ya tienen oferta de trabajo

Un grupo de 76 personas, compuesto por 31 niños, además de mujeres y hombres, llegó a las 9:00 a la terminal Bimodal de Santa Cruz de la Sierra en dos buses de Expreso Tarija. Dos representantes de Migración se encargaron de revisar uno por uno los pasaportes y la visa que avala su ingreso legal. Los haitianos aguardaron ansiosos la revisión y dieron a entender que su objetivo era seguir viaje a Brasil y luego a las Guyanas francesas, pero horas más tarde varios de ellos mostraron interés en quedarse en Bolivia si aquí encuentran trabajo, como de hecho ya varias personas comenzaron a ofrecerles.

La presencia de los haitianos en la capital cruceña no pasó desapercibida y durante toda la jornada hubo gente que se acercó a darles ayuda de todo tipo, al identificarlos como víctimas del terremoto ocurrido en Haití el pasado 12 de enero. No obstante, el grupo que ayer pisó suelo cruceño informó de que ninguno de ellos estaba en Puerto Príncipe en el momento del sismo, sino en Santo Domingo (República Dominicana), desde donde vieron por televisión todo el desastre.

Contaron que con apoyo de algunos familiares y con recursos propios tomaron un vuelo  hasta Lima (Perú) y cruzaron a Bolivia con la intención de ir a Argentina, pero allá les negaron el ingreso, no saben por qué razón. Esto los obligó a volver a Tarija y continuar viaje con rumbo a Brasil. “Queremos ayuda para obtener una visa. No tenemos dinero para viajar ni para el hotel”, explicó Joseja Sejesun, miembro del grupo.

Su estadía en Bolivia, por ahora, está en regla, según las autoridades migratorias. Vivian Zambrana, jefe de Extranjería, dijo que ingresaron con visa de turista y que podrán permanecer durante 30 días. Aclaró que pueden ampliar por 30 días más en dos oportunidades, hasta completar los 90 días.

Con dificultades para hacerse entender, porque el idioma que dominan es el creole, los pocos haitianos que se animaron a hablar en francés manifestaron que pretenden pasar dos semanas más en cualquier país antes de llegar a Guyanas francesas, donde tienen familiares. Aseguran que todos los recién llegados han perdido parientes y se han quedado sin trabajo. “Haití está destrozado, las casas se han derrumbado, mis parientes están muertos. Queremos ayuda para este grupo de haitianos”, dijo Sejesun.

Después de permanecer varias horas en los corredores de la terminal, en medio de una intensa lluvia y de muchas miradas, los haitianos decidieron cargar el poco equipaje que llevaban para instalarse en el hostal La Tía, próximo a la Bimodal, donde les hicieron una tarifa preferencial de Bs 20 por persona. Con el local lleno, la dueña del hostal puso un letrero en la puerta para anunciar que no había más vacancias, pero igual tuvo una agitada jornada, pues mucha gente se acercó al lugar para llevarles ropa, alimentos, dinero y hasta ofertas laborales. La presidenta del Concejo Municipal, Carol Viscarra, y el concejal Óscar Vargas llevaron donativos.

Según Viscarra, los haitianos agradecieron la ayuda y le comentaron que estaban recibiendo ayuda de familiares que se encuentran en otros países; pero algunos la sorprendieron al preguntarle si  podían quedarse a trabajar.

Las primeras ofertas laborales las recibieron varios ayer, en la puerta del hostal. Doña Herminia, dueña de un negocio de venta de ropa, se acercó entusiasmada para proponerle a Watson Leon un trabajo, con un sueldo de Bs 1.200, con derecho a dormitorio y alimentación. “Soy sola y tengo una hija pequeña. Necesito quien cargue bultos y me ayude”, manifestó. El haitiano, que dice haber hecho diferentes trabajos en varios países, agradeció la oferta y quedó en conocer el local, aunque aclaró que se tomará un tiempo para reflexionar sobre la oferta.

  Vivencias  

“Quiero volver por mi esposa”

Joseja Sejesun

Dice que estaba en Santo Domingo cuando ocurrió el terremoto en Haití, el pasado 12 de enero. Es parte de un grupo de haitianos y asegura que lo que necesitan es ayuda para seguir viaje a Brasil y llegar a las Guyanas francesas. Sabe que todo está destrozado en Haití y que incluso hay parientes suyos muertos, pero aún le queda su esposa y pretende recuperarla. Dijo que trabajaba como funcionario de un banco en Haití, pero éste quedó destruido y ahora está sin trabajo.

“Necesitamos que nos apoyen”

Isaac Mercinal

Está preocupado porque en el grupo de haitianos que llegó el viernes a Santa Cruz de la Sierra hay varios niños (31). Dice que hay dolor entre el grupo porque todos tienen familiares muertos en el terremoto que sufrió Haití. “Mi padre, mi madre, todos están muertos”, asegura y enfatiza en que tienen problemas. Aprovecha cualquier contacto con autoridades o periodistas para pedir ayuda y también para agradecer a los bolivianos, porque dice que le han dado alimento y apoyo.

  En Santa Cruz  

– Solidaridad. Algunas personas que estaban en la terminal les donaron alimentos, como guineo, leche, galletas y pipocas. Incluso gente humilde se acercó para darles dinero.

– Colaboración. Piden que los auxilien en la obtención de una visa y dinero para sus pasajes que les permita ingresar a Brasi. Dicen que  tienen pocos recursos.

– Idioma. Algunos del grupo de los haitianos se daban modos para comunicarse con la gente, pese a que escasamente hablaban el español. Con señas expresaban que sus familiares perecieron en el terremoto y que ellos querían llegar para tener noticias.

– Lluvia. Se les hizo más difícil la llegada. Tuvieron que mojarse antes de encontrar refugio.

– Cena. A las 19:00, los haitianos dijeron haber cenado pollo y que les había gustado Santa Cruz, así como la solidaridad de la gente.