El ex prefecto de Pando, desde la cárcel, señala “hubo personas que quisimos evitarlo, pero no pudimos. Hubo personas que pudieron hacerlo, pero no lo hicieron”. Por su parte, la abogada de las víctimas, Mary Carrasco, responsabiliza a la ex autoridad.
Fernández: el ex prefecto prepara su defensa en el caso de la masacre de Porvenir
Desde la cárcel: El ex Prefecto de Pando asegura que 48 horas antes de la masacre hizo gestiones para evitar el desenlace violento en Porvenir.
“Había interés de que haya más muertos, porque si no había muertos, ¿cómo se podía justificar un estado de sitio?”, dijo el ex prefecto del Departamento de Pando Leopoldo Fernández desde el penal de San Pedro de La Paz, en una entrevista radial concedida ayer a la Red Erbol.
Fernández, un influyente político de derecha recluido desde septiembre de 2008, luego de la masacre de 14 campesinos en la población de Porvenir, el 11 de septiembre, señaló que tiene todo listo para asumir su defensa desde el viernes en el juicio oral que se instaurará en su contra.
Hablando desde una oficina del penal paceño, Fernández argumenta que el estado de sitio departamental dictado tras el hecho sangriento determinó su detención y con esta acción se consiguió el control político del departamento de Pando, hasta entonces una de las regiones opositoras a Morales, junto con Santa Cruz, Beni y Tarija.
“Se designó a otro Prefecto y de ese modo se lograría intimidar a otros líderes, dirigentes cívicos y prefectos de la ‘media luna’”, expresó.
La abogada de las víctimas de Porvenir, Mary Carrasco, entrevistada en el mismo programa, sostuvo que la lucha que se libró hace dos años en Pando tenía como trofeo el mantenimiento de privilegios, como una burocracia de 3.800 funcionarios en la Prefectura.
Fernández expuso como alegato que 48 horas antes del 11 de septiembre de 2008 asumió tareas para evitar un enfrentamiento porque dijo haber sido informado de que un grupo de campesinos procedentes de Riberalta y Filadelfia se dirigía a Porvenir y Cobija.
Asegura haber convocado a jefes de las tres fuerzas militares y la Policía para pedir que tomasen acciones de revisión de los campesinos para evitar que llevaran armas en la marcha.
“Hubo personas que quisimos evitarlo, pero no pudimos. Hubo personas que pudieron hacerlo, pero no lo hicieron”, afirmó, y ratificó que el proceso que se le sigue es político y que él no es responsable de las muertes en Porvenir.
Para destacar
“… Quisimos evitarlo (la masacre) y no pudimos. Hubo personas que pudieron hacerlo, pero no lo hicieron”, afirma Fernández.
La gente del Gobierno no lo evitó y, constitucionalmente, las fuerzas del orden y la Policía tenían esta misión.
Con 48 horas de anticipación nos dimos cuenta de esta marcha que salía de Riberalta y Filadelfia y que estaban armados.
Hicimos reuniones con los comandantes militares y la Policía, pero su acción debía ser aprobada por instancias nacionales.
Cineasta dice que campesinos tenían armas
La Prensa. Cobija /Erbol.
Transcurridos dos años desde la masacre de Porvenir, el ex prefecto de Pando Leopoldo Fernández y el codirector del documental de ese sangriento hecho Tahuamanu Javier Horacio Álvarez coincidieron en que los campesinos implicados estaban armados, al igual que los cívicos y funcionarios que apoyaban al entonces Prefecto.
Fernández, en una entrevista concedida a la Red Erbol desde el penal de San Pedro, donde se encuentra recluido de manera preventiva desde el 18 de septiembre de 2008, sostuvo que había elementos que hacían prever un enfrentamiento armado entre campesinos y cívicos, por lo que, como primera autoridad departamental en aquella época, intentó evitarlo, pero no el Gobierno de Evo Morales.
En ese sentido, reveló que con 48 horas de anticipación a los hechos ya tenía suficiente información de que los campesinos estaban saliendo de dos puntos hacia Cobija con armas.
Por su parte, el codirector y editor del documental Tahuamanu afirmó que en principio se logró identificar dos grupos de campesinos pandinos reunidos, uno en Filadelfia y otro en Puerto Rico.
Según Álvarez, los campesinos que estaban en Filadelfia esperando al otro grupo sí tenían armas, porque al menos se logró constatar que había armamento en una de las camionetas que partió de esa localidad, donde estaba Luscher Alpide, “un personaje bastante siniestro” y que ya había trabajado con el opositor de Fernández, Miguel “Chiquitín” Becerra, además vinculado al que era alcalde de ese municipio, Antonio Aguilera.
Fernández atribuyó los disparos a los marchistas y dijo que ninguno de los 26 acusados es autor material.
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Mary Carrasco: Solitos se derrocaron
Carrasco: Acusa al ex prefecto
La abogada de las 14 víctimas de la masacre de Porvenir, Mary Carrasco, afirmó que el ex prefecto de Pando Leopoldo Fernández y sus colaboradores cometieron errores sin que existieran otros factores que influyeran en ello.
“No hubo alguien que les dijera que se necesitaba muertos para derrocar a Leopoldo Fernández. Ellos se derrocaron solitos”, expresó Carrasco en respuesta la versión del ex Prefecto que atribuye el saldo sangriento del 11 de septiembre de 2008 a una intención ajena a su voluntad para generar alto grado de violencia.
Mientras que Fernández asegura que personalmente pidió a organizaciones cívicas que dejaran sin efecto la toma de las oficinas del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), para evitar una marcha de campesinos a la ciudad de Cobija, Carrasco responde que este hecho desencadenó la reacción popular de pueblos que deseaban defender el derecho propietario sobre las tierras que trabajan.
Mientras que Fernández reclama por que las acusaciones se dirigen solamente contra su persona, Carrasco sostiene que la ex autoridad departamental “comandaba” la Prefectura pandina.
“Los funcionarios de la Prefectura salen al enfrentamiento con los campesinos planificadamente”, dijo la abogada.
Según Carrasco, la Policía hizo una requisa entre los campesinos y verificó que no portaban armas durante la jornada del 11 de septiembre.