Según el intelectual katarista Fernando Untoja, el Gobierno utiliza los órganos del Estado en contra de las personas que crítican sus políticas.
FERNANDO UNTOJA
El Diario
Gobierno utiliza mecanismos “fascistas” contra sus críticos
El analista político, Fernando Untoja, afirmó ayer que el Gobierno utiliza mecanismos “fascistas” al confundir el “ejercicio del poder con ser dueño absoluto del poder”, lo que estaría demostrado en el uso de los órganos del Estado en contra de todas aquellas personas que emiten críticas en contra de sus políticas. Además, sostuvo que eso sería un gran peligro para la democracia porque la libertad de expresión no tendría validez tampoco la posibilidad de hacer debate.
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En los últimos días, tanto el vicepresidente, Álvaro García, como el ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, sindicaron a los medios de comunicación de ser “ultraderechistas” y de pretender magnificar un hecho como el caso del general (r) de la Policía, René Sanabria, ex jefe de Inteligencia y vinculado con hechos de narcotráfico. Llorenti acusó, puntualmente a tres cadenas nacionales de televisión y una red de radiodifusión.
En este último caso, el director de la emisora Erbol, Andrés Gómez, ex partidario del actual régimen, periodista que participó de forma individual en la polémica reglamentación de la Ley antirracismo y ex colega de García Linera en las aulas universitarias, catalogó al Gobierno como un régimen con características “fascistas” en declaraciones al programa de televisión No Mentirás.
FASCISMO
Consultado por EL DIARIO, el analista Fernando Untoja explicó que el fascismo es una ideología que se sustenta con slogans del pueblo que apunta a implantar un régimen dictatorial de control y de persecución. Complementó que es la política de aquellos gobiernos que fueron fascinados por el poder y que confunden la función del poder con la propiedad del poder.
“El actual Gobierno se cree dueño del poder cuando en realidad no sabe que está cumpliendo una función de poder. Esto traerá consecuencias de aquí a mediano o a largo plazo originando enfrentamientos no sólo entre la misma población. Como resultado el Gobierno sale ganando, pero ganando adversarios porque los ciudadanos ya están indignados de los actos de corrupción y el incremento del narcotráfico, porque el partido gubernamental no sabe cómo defender a sus funcionarios que han sido cuestionados”, expresó Untoja.
El especialista recomendó que el Gobierno debe practicar la democracia y fortalecerla, “porque de continuar con ese impulso dictatorial el pueblo se le vendrá en contra”. Añadió que es mejor que el Ejecutivo termine su gestión resolviendo los problemas económicos y sociales porque las demandas de la ciudadanía no serían solucionadas con propagandas.
Además, afirmó que aquello representaría un peligro para la democracia boliviana, porque uno de los objetivos del Ejecutivo sería el erradicar a todas las personas que vierten opiniones contrarias a las políticas oficialistas.
GOBIERNO REPRIME JUDICIALMENTE
“En la democracia debe haber derecha e izquierda, porque nadie le ha dado un valor positivo o negativo a estas dos tendencias políticas y las personas que utilizan dicotómicamente las cosas ya están en el terreno del fascismo. Además, no hay respeto a las libertades de expresión, porque la gente es amenazada, luego han perdido el apoyo de los movimientos sociales propios al MAS y de otros grupos. Entonces, en lugar de aquello tienen a la Policía y a los jueces, es decir, que está institucionalizado el apoyo al Gobierno, pero apoyo para la represión. El Ejecutivo se apoderó del poder no para el beneficio del país, sino para perseguir opositores”, manifestó el analista.
El intelectual katarista mencionó que si el Gobierno fue elegido de manera democrática en las urnas debería estimular el debate político, pero el solo hecho que no acepte aquello y que cualquier contestación sea condenada como “acto de desacato o de derecha, es fascismo”. Untoja aseveró que el Ejecutivo ya no cuenta con el apoyo popular como en años anteriores, porque lo fue perdiendo de manera simultánea.
“Esta represión podría agravarse porque el Gobierno controla los aparatos del Estado, es decir, los aparatos represivos e ideológicos con el objetivo de ir cerrando paso, como por ejemplo, a los medios de comunicación que hasta el momento no están comprados por el Ejecutivo”, acotó.