Un hombre mató a golpes en Santa Fe a uno de sus hijos de tres años e hirió de gravedad a su hermanito mellizo, aparentemente cuando descubrió que habían comido una mermelada sin autorización. Fue detenido junto a su mujer y ya habría confesado el crimen.
El salvaje ataque ocurrió en la casa de la familia, en Santo Tomé, a 15 kilómetros de la capital provincial. El hombre, de 33 años, trabajaba como chofer de colectivos de la empresa de media distancia Continental.
Según informaron fuentes de la investigación, el acusado se enfureció al descubrir que los chicos habían tomado un frasco de mermelada sin su permiso y comenzó a golpearlos e, incluso, a uno de ellos lo habría sumergido en una bañadera con agua helada ubicada en el fondo de la casa, lo que le provocó un cuadro de hipotermia.
A los gritos desesperados de los mellizos se sumaron los de sus cuatro hermanos, de 2, 9, 14 y 15 años, que alarmaron a los vecinos, quienes llamaron a la Policía.
Los efectivos detuvieron a los padres y sacaron a los chicos de la casa. Los mellizos fueron trasladados de urgencia en una ambulancia al hospital Orlando Alassia de Santa Fe.
Uno de los chiquitos llegó con politraumatismo de cráneo y traumatismos en piernas y brazos. La gravedad de las heridas le provocó la muerte horas después.
Su hermanito seguía hoy en terapia intensiva y en estado delicado. Mientras que sus padres continuaban detenidos en una dependencia policial y él ya habría confesado ser el responsable de la fatal golpiza.
Los otros hijos del matrimonio fueron entregados a familiares por orden de la Justicia de Menores.
Fuente: www.clarin.com