Auge del narcotráfico en Bolivia. Hallan 100 fábricas de cocaína en Yapacaní

El descubrimiento de un centenar de pequeñas fábricas de cocaína en Yapacaní confirma que la actividad del narcotráfico es intensa en Bolivia. En San Germán las fuerzas combinadas de la Policía encontraron procesadoras rústicas a solo 300 metros del pueblo. También ayer fueron enviados a la cárcel los nueve acusados del asesinato de César Baptista Azogue, en otro caso relacionado con tráfico de cocaína. 

imageDaño. Esta fábrica estaba ubicada a unos 500 metros de San Germán. En el sector había cuatro factorías más a orillas de un arroyo por donde fluían los químicos

Berthy Vaca Justiniano |  El Deber



Hallan 100 fábricas de cocaína en Yapacaní

Megaoperativos. Cientos de efectivos incursionaron en tres poblaciones de la provincia Ichilo, arrestaron a 13 sospechosos y decomisaron estupefacientes, armas, droga y Bs 1,1 millones

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Cuarenta patrullas de Umopar (de Chimoré y Buenavista) y de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) de Santa Cruz incursionaron en las poblaciones norteñas de San Germán, Nuevo Horizonte y Kilómetro 40, zonas casi inexpugnables para la Policía, y asestaron un golpe al narcotráfico al descubrir al menos 100 fábricas de cocaína. Se procedió al arresto de varias personas y la confiscación de droga, armas y una fuerte suma de dinero, según fuentes extraoficiales.

Las poblaciones citadas pertenecen a la jurisdicción de Yapacaní, tercera sección municipal de la provincia Ichilo.

En los operativos, ejecutados desde las 4:00 de ayer, participaron alrededor de 300 efectivos y 16 fiscales, que sitiaron la zona colindante con la región cochabambina de Chapare, protegidos por un contingente de agentes antimotines, cuya tarea consistió en vigilar en los centros urbanos para detectar a los agitadores que acostumbraban a cerrar los caminos vecinales y acorralar a uniformados policiales o militares durante las incursiones de estos en las regiones donde hay narcotraficantes.

Los ‘leopardos’ no tuvieron que esforzarse para descubrir decenas de pequeñas factorías, pues para sorpresa de muchos, funcionaban prácticamente en la periferia de estas localidades. Por ejemplo, en San Germán se encontraron fábricas rústicas a escasos 300 metros del lado este del pueblo.

“Mi patrulla trabajó desde las 4:00 y hasta las 15:30 hemos destruido 15 fábricas. En este sector (a poca distancia de San Germán), en una dimensión de una hectárea encontramos cinco laboratorios”, manifestó el capitán Raúl Omonte, mientras exhortaba a los periodistas a no acercarse a la gran llamarada que consumía precursores, droga líquida y montañas de hoja de coca triturada, a orillas de un riachuelo.

Al cabo de la intensa jornada no hubo un informe oficial sobre el megaoperativo, debido a que por la noche las patrullas seguían llegando con presos a la base de Umopar de Buenavista, pero se supo que hubo 13 arrestados, se confiscaron vehículos, tres armas y cierta cantidad de cocaína, además de Bs 1.180.000 a dos sujetos que están bajo investigación.

“En el km 40 actuaron seis patrullas, en Nuevo Horizonte 19 y en San Germán 14. En promedio cada patrulla halló cuatro fábricas”, señaló un mayor. Fernando Amurrio, director de la Felcc en Santa Cruz, tiene previsto brindar hoy un informe oficial al respecto.

De todas formas, Amurrio y el Cnl. Julio Alarcón, director de comunicación de la Felcn, destacaron el trabajo de las unidades e indicaron que se trata del primer gran operativo contra los narcos, ejecutado en el departamento.

     Un muerto en plena batida   

Asesinado. Alrededor de las 7:30 de ayer, unos trabajadores hallaron en el río Ichilo el cuerpo de un hombre no identificado. Presentaba signos de violencia y al parecer murió de un tiro en la frente. Según el policía Timoteo Oyola, el hombre tenía unos 35 años; vestía chamarra verde, camisa blanca y pantalón plomo, sin zapatos.

Importancia. La incursión policial de ayer estuvo presidida por altos jefes de la Felcn y por el fiscal de Distrito, Isabelino Gómez.

Caso reciente. En la zona aún se recuerda a Ricardo Cruz Martínez (16), que en abril murió en un tiroteo en Puerto Gretter. Se dijo que los policías lo confundieron con narcos, pero luego se supo que un grupo atacó a los agentes que estaban patrullando.

Sicarios van a Chonchocoro y a Palmasola

Medida. Uno declaró que Baptista se apoderó de 500 kilos de cocaína.

imageAudiencia. Los detenidos acusados de sicarios fueron golpeados ayer cuando entraban al salón para sentarse ante un juez

Guider Arancibia Guillén

El juez cautelar de Portachuelo, Pedro Félix Ribera, ordenó la detención en el penal de Chonchocoro de La Paz de cinco imputados por el delito de asesinato de Limberg César Baptista Azogue, mientras que otros cuatro fueron enviados al penal de Palmasola.

La audiencia cautelar, que debía realizarse en Portachuelo, se llevó a cabo en el piso cuatro del Palacio de Justicia hasta donde acudió el juzgador Pedro Félix.

Pese a las estrictas medidas de seguridad, los detenidos -todos de nacionalidad peruana- fueron golpeados por los familiares de la víctima cuando entraban al juzgado.

Los imputados que serán llevados a Chonchocoro son: María Nela Guzmán Ascarza, Julio César Gómez Trujillo, César Augusto Cahuana Barrientos, Jorge Eberson Ontiveros Ayala y José Pinedo Vargas. Los que se quedarán en Palmasola son: Raúl Gonzales Trigoso, Cirilo Palomino Calle, Franz Cristian Cahuana Cárdenas y Pablo Guzmán de la Cruz.

Los fiscales Rubén Salazar y Alberto Cornejo imputaron a los extranjeros por delitos de asesinato, tentativa de asesinato, secuestro, lesiones gravísimas y organización criminal.

Salazar fundamentó que quedó establecido que Limberg Baptista, ex recluso procesado por narcotráfico, fue secuestrado el 4 de este mes cuando retiraba su vehículo de un lavadero de autos en Montero. Después de cinco días el cuerpo de Baptista fue encontrado en medio de matorrales en Colpa Bélgica, a 20 kilómetros de Warnes. Había sido torturado, amarrado, vendado y acribillado a balas. En el mismo lugar fue hallado Adán López Mercado, también atado de manos y pies y vendado y presentaba seis heridas de bala, pero logró sobrevivir y  permanece en terapia intensiva en el hospital Japonés.

Todos los detenidos negaron la comisión del delito ante el juez. Cirilo Palomino Calle dijo que llegó de Perú el domingo, días después del crimen,  junto a su familia en busca de trabajo, y que nada tenía que ver con el crimen.

Sin embargo, en sus declaraciones ante los fiscales, Franz Cristian Cahuana Cárdenas (18) dijo que hace un mes que llegó de Perú en busca de trabajo. Declaró que escuchó decir a su tío César Augusto Cahuana que “había que levantar al gordo Baptista porque era un asesino y que se había robado unos 500 kilos de cocaína”. El fiscal que lleva el caso, Rubén Salazar, manifestó que esas declaraciones las hizo de forma espontánea y que las investigaciones siguen adelante. 

Ayer, María Ninosca Salazar Molina, esposa de Baptista, dijo frente al juez que reconocía la voz de los cinco enviados a Chonchocoro cuando la llamaban por teléfono pidiéndole el pago de $us 40.000 como recompensa.

    Entretelones de los secuestro, asesinato y droga   

Solidaridad. Plácida Mercado, madre de Adán López Mercado, acudió ayer a la audiencia. Pidió ayuda y solidaridad a la gente para salvar la vida de su hijo postrado en el hospital Japonés al recibir seis balazos. Dijo que en el hospital ya deben Bs 63.000 y no tienen recursos económicos.

Denuncia. La familia de   Guísela Stroebel y Vanesa Becerra, desaparecidas desde el 8 de mayo denunciaron ayer a autoridades policiales y de la Fiscalía incumplimiento de deberes ante la poca efectividad en el resultado de las investigaciones. La abogada Sandra Melgarejo dijo que no se elaboró el estudio de ADN de los restos óseos hallados en una casa por Equipetrol.

Robo en hacienda. Muebles, equipos, herramientas y otros objetos desaparecieron entre la noche del jueves y la madrugada de ayer de la quinta La Esperanza comunidad Potrero Largo donde sicarios tuvieron cautivo a dos hombres. Allí también los agentes de la Felcn hallaron 9 kilos de cocaína enterrados en un balde.